El Acuífero Guaraní y la patraña del peligro terrorista en la Triple Frontera

“Cuando un imperio proclama la paz trae la guerra, cuando exalta la solidaridad esconde un ataque, cuando reclama adhesión trama entrega y cuando ofrece amistad distribuye hipocresía.” Gustavo Cirigliano

Por Elsa M. Bruzzone y José Luis García.- La opinión pública se ha visto desbordada por una serie ininterrumpida de informes sobre el grave peligro que constituye la actividad del terrorismo internacional en la zona conocida como la “Triple Frontera” que amenaza no sólo a los países limítrofes incluido en ella al nuestro, sino a todo el mundo “occidental” al ser un centro de planificación de acciones terroristas, recaudador de fondos para financiarlas y coordinador de todo tipo de acciones delictivas para lograr esos fondos.

El dato no deja de ser significativo y preocupante, más aún cuando se insinúa que las acciones terroristas que destruyeron la Embajada de Israel en la Argentina y la AMIA, con su secuela de ciudadanos muertos y heridos de nuestro país, probablemente partieron de elementos que se infiltraron ilegalmente en nuestro territorio a través de esa zona geográfica donde, además, pudieron recaudar el dinero para financiarlas.
El CEMIDA, por medio de algunos de sus adherentes, ha tenido el privilegio de conocer, a través de los años, es región ya que ellos prestaron sus servicios militares en la zona de referencia o en su área de influencia. Ese conocimiento detallado y recientes investigaciones nos permite presentar este trabajo para hacer partícipe al pueblo argentino, de nuestras conclusiones. Algunas de ellas espectaculares y con casi una nula difusión hasta la fecha. Esperamos que sus conclusiones sirvan, como nos sirvieron, de temprana advertencia.
Características de la región
Tomando como núcleo central el lugar llamado “Tres Fronteras” donde limitan Argentina, Brasil y Paraguay y sin otro objetivo que dar un panorama general de la zona, la sensación dominante de un observador es la de encontrarse en el reino de las aguas fluviales. La magnitud del río Paraná en la zona de su confluencia con el Iguazú, potenciado inmediatamente al norte por la enorme represa de Itaipú con sus ensordecedores vertederos y engalanado hacia el este por las portentosas Cataratas del Iguazú nos obliga a pensar en la enorme riqueza que constituyen las aguas de superficie en ese lugar, corazón de la llamada Cuenta del Plata, que no demasiado lejos de allí, agrega las enormes cuencas de los ríos Paraguay, Uruguay, Pilcomayo, Bermejo, Grande, Parapema, San Lorenzo, Apa, Negro y cuantos otros que constituyen un recurso que, aunque poco explotado, determina el potencial de esa región derivada de sus posibilidades energéticas y la diversidad de recursos disponibles de esas potenciales vías de comunicación.
De acuerdo a datos oficiales la zona de las Tres Fronteras tiene una población de 470.000 habitantes agrupados en Puerto Iguazú (Argentina) 30.000, Foz do Iguazú (Brasil) 270.000 y Ciudad del Este (Paraguay) 170.000. Si bien en conjunto es una cantidad respetable, en particular y en cada caso constituyen porcentajes reducidos del total de sus respectivos países y casi sin importancia con relación a la población total de los tres.
La zona así descripta presenta características diferentes en cada país. En la Argentina, la región norte de la Provincia de Misiones ha sido organizada como Parque Nacional, preservando las especies originales (aunque bastante depredadas) de la selva misionera, no permitiendo en ellos actividades comerciales y controlando severamente la actividad turística. En Brasil toda la selva original ha desaparecido, su relativa mayor población se dedica a las actividades rurales y existe un importante flujo turístico en la zona de Cataratas. En Paraguay la principal actividad en la región es comercial, derivada del comercio de todo tipo creado en Ciudad del Este, que si bien no tiene acceso directo a las Cataratas, aprovecha el flujo turístico para comerciar en lo que puede considerarse una escala intermedia, aunque para ellos aparezca como muy importante. En las inmediaciones de la región hay poca población y ésta se ocupa en actividades rurales, incrementadas últimamente por el cultivo de la soja, aunque en magnitud reducida. La selva original ha sido depredada y prácticamente no existe.
En cuanto a la seguridad general y control de la población, será analizada en los próximos capítulos.
Elementos de seguridad desplegados en la región
Dentro de ese espacio geográfico, de un gran movimiento turístico nacional e internacional que concurre a disfrutar del majestuoso espectáculo de las Cataratas del Iguazú, con su inevitable oferta de toda clase de mercaderías para atraer a esos públicos, los países interesados han desplegado sus medios de seguridad a fin de evitar que eventuales acciones delictivas puedan amenazar a esa industria tan vital. Los medios son abundantes y operan en forma coordinada y con modalidades particulares.
En general se puede expresar que los tres países disponen en sus tres ciudades básicas: Puerto Iguazú (Arg.), Foz do Iguazú (Br.) y Ciudad del Este (Py.) elementos de la policía nacional en cantidad más que suficiente, a ellos se agregan las disponibilidades de fuerzas de seguridad (Gendarmería, Prefectura), filiales de órganos de inteligencia, policías aduaneras y agencias de vigilancia privada para hoteles y otras dependencias turísticas. Se podría decir que prácticamente en un espacio geográfico no demasiado extenso y con una población permanente de magnitud moderada, los medios de vigilancia y seguridad son más que suficientes para mantener un control casi absoluto de la zona y sus habitantes y detectar de inmediato cualquier anomalía de importancia. A ello hay que agregar la disponibilidad inmediata o casi inmediata de guarniciones militares de importancia regional, sobre todo en Brasil y Paraguay y un poco más distante en la Argentina que son elementos que ayudan a completar la disuasión de delincuentes en la zona señalada, tanto comunes como políticos.
En particular puede expresarse que tanto en territorio argentino como en el brasileño las actividades turísticas, comerciales y sociales están aceptablemente organizadas y controladas, si bien se puede observar cierta tolerancia de los controles sobre el “contrabando hormiga” que practican los residentes permanentes y algunos turistas. Pero siempre bajo el control de las autoridades que no permiten desbordes. En territorio paraguayo la situación es algo diferente. Ellos no poseen la atracción de las Cataratas, privilegio argentino-brasileño, y por ello han apelado a un comercio de bienes y mercaderías que se realiza aún en las calles públicas y donde se puede obtener todo tipo de elementos. Todo ello en medio de una situación que un ojo desprevenido puede calificar de caótica. Pero no conviene engañarse. El Paraguay basa la obtención de parte de sus recursos en actividades que a veces no son muy claras, pero que tienen un grado de control riguroso. Con dolor nos referimos al contrabando a escala mayor, a la compra-venta de objetos robados en Brasil y Argentina, especialmente automóviles, actividades del cruce ilegal de todo tipo de mercaderías y objetos por lugares ajenos a los puestos de control fronterizos y aún acciones menores de narcotráfico. Pero en nuestro desgraciado vecino, esas actividades ilícitas se desarrollan en un marco muy controlado ya que los recursos mal habidos son administrados por un corrupto poder político-militar que históricamente lo organizó y controló. Ese control es hermético y casi infalible. Cualquier elemento extraño a la organización mafiosa oficial que pretenda terciar en las actividades tendrá una existencia efímera.
En Ciudad del Este se ha radicado y dedicado al comercio -que es su vocación ancestral- una relativa importante comunidad sirio-libanesa, que desarrolla sus actividades muy controladas y pacíficamente. Ella ha sido destinataria, conjuntamente con la comunidad árabe de Foz do Iguazú, de acusaciones como la que nos ocupa y podemos decir, que en este marco de referencia, estas denuncias resultan no sólo irrelevantes sino también ridículas. ¡Pobre comunidad árabe si se atreviera a quebrar el orden establecido a través de los años! En realidad puede trabajar en el marco comercial establecido por el orden creado y aún debe desembolsar grandes sumas de dinero para poder hacerlo.
¿Es que entonces el terrorismo internacional de las Tres Fronteras, sistemáticamente denunciado por las autoridades norteamericanas en los últimos tiempos, está siendo financiado por el poder establecido en el gobierno del Paraguay? El solo enunciado de ese desatino resulta inverosímil y obliga a investigar si en lugar de la lucha contra el terrorismo los EEUU están buscando lograr otros objetivos en esos lugares con ese pretexto.
Elementos de importancia mundial en un futuro mediato a resguardar en la región
El análisis de los movimientos de EEUU en el marco mundial y regional para obtener y asegurarse el control de insumos estratégicos y su forma habitual de operar para lograrlo podría ser un buen orientador para nuestra investigación.
El recurso de mayor interés actual para ese país ha sido y es el petróleo y sus derivados. Para asegurarse su abastecimiento a los precios que les resulten convenientes, hemos podido observar que bajo el pretexto del control del terrorismo internacional o del narcotráfico, primero lograron establecer el control político y luego militar de importantes yacimientos, sobre todo en el Asia Menor y Latinoamérica. Su fenomenal despliegue militar en la región donde se ubican las mayores reservas de hidrocarburos del planeta, es manifiesto y no ha trepidado en llevar la guerra más inicua contra países como Afganistán e Irak con pueriles pretextos repudiados por la mayoría de la comunidad internacional por absurdos.
En América, y a fin de asegurarse los mismos recursos, operó sobre México y Venezuela para controlarlos. Sobre México, utilizando el NAFTA como instrumento de sometimiento y dependencia. Y sobre Venezuela, organizando fallidos golpes de Estado como amenazas para que no se vea perjudicado su control sobre el recurso petrolero.
Pero observando el accionar imperial norteamericano se puede comprobar que otros elementos han pasado a tener valor estratégico para un futuro próximo y han llevado a desarrollar otras acciones tendientes a controlar estos nuevos recursos.
Ha sido muy significativa en los últimos tiempos la importancia que se está dando al agua potable como un recurso escaso para los próximos años y lo fundamental que resultará para la humanidad. En realidad mucho más fundamental que los hidrocarburos: quien la controle controlará la economía universal y toda la vida del futuro no lejano.
Los primeros que percibieron el peligro de un nuevo accionar en los pasados años, fueron nuestros vecinos del Brasil. Por el Plan Amazonia importantes intereses nortemericanos amenazaron con establecerse en la región para controlar sus grandes reservas de agua potable. Por el límite norte alentaron el movimiento independentista de indígenas Yanomanis que aspiraban a segregar importantes sectores del territorio brasileño. Hubiera sido más fácil para que los EEUU controlar los recursos con los indígenas que con Brasil que posee un amplio sentido nacional. Más adelante, lograría establecer una base militar en Alcántara. Pero Brasil operó rápidamente ante el peligro cortando la segregación, estableciendo una línea de bases militares a lo largo de su frontera norte, construyendo carretera en la selva y trasladando su capital al corazón de la Amazonia en una estrategia de afirmación de su soberanía, la cual completó actualmente con el SIVAM (Sistema de Vigilancia de la Amazonia), el SIPAM (Sistema de Protección de la Amazonia) y el anuncio del actual gobierno del cierre de Alcántara.
Pero el imperio no se rinde fácilmente, cambió su frente e intentó sin éxito afirmarse con un golpe de estado en Venezuela. Bajo el pretexto de la lucha contra el narcotráfico estableció el llamado Plan Colombia que en el fondo consiste en tener una activa presencia militar en la región y más aún amplió sus perspectivas con la llamada Iniciativa Regional Andina, que logró establecer una base militar en Manta, Ecuador, que le permitió ir cerrando el cerco sobre la Amazonia, controlar su periferia militarmente, y estar en condiciones de tener un rol preponderante en el momento que se exploten sus recursos naturales.
Todo ello complementado con su plan de imponer en los próximos años el llamado ALCA, seudo alianza económica que someterá totalmente las débiles economías latinoamericanas ante el poder colosal de estas gentes, no dejando más alternativas que enajenar los recursos.
Es por ello que nos pusimos en la tarea de determinar el interés militar yanqui en la Triple Frontera. En la zona no hay recursos minerales de importancia salvo los yacimientos de hierro de El Mutún y El Urucún en Bolivia y Brasil respectivamente. Pero no tienen un valor estratégico de carácter mundial. En la investigación apareció de pronto un colosal yacimiento, quizás la reserva más importante en el orden mundial de agua potable. EL ACUIFERO GUARANI. En los anexos 1 y 2 les mostramos lo detectado hasta hoy por organismos dependientes del Banco Mundial. Es increíblemente enorme y sorprendente, y sus límites norte, sur y oeste, no han podido precisarse hasta hoy. Veamos en el siguiente capítulo en qué consiste.
Descripción del acuífero guaraní
Llamado también Acuífero Gigante del Mercosur y Sistema Acuífero Mercosur, está situado en los paralelos 16° y 32° de latitud Sur y los meridianos 47° y 56 de longitud Oeste. Se extiende por las cuencas de los ríos Paraná, Paraguay y Uruguay. Tiene una superficie aproximada hasta la fecha de 1.194.000 kilómetros cuadrados de los cuales 839.000 corresponden a Brasil, 226.000 a Argentina, 71.700 a Paraguay y 59.000 a Uruguay. (Ver anexos 1 y 2).
Por el norte, toma contacto con el pantanal que a su vez se conecta con la Amazonia. Se desconoce todavía el límite oeste del Acuífero en el Paraguay y en Argentina, aunque se estima que en nuestro país se prolonga hacia la cuenca del Bermejo. También es desconocido el límite sur en la Argentina pero no se descarta que continúe hacia las regiones pampeana (inundada) y patagónica pudiendo llegar a conectarse con la zona de los grandes lagos precordilleranos. Sabemos que el agua potable se está convirtiendo en un bien escaso y por lo tanto de valor incalculable. Quizás la masiva compra de tierras cercanas a ríos y lagos que han llevado y llevan a cabo particulares norteamericanos en la Patagonia no obedezca a un capricho ecológico sino a una temprana toma de posiciones para un futuro que se aproxima peligrosamente. Por menores cosas hemos visto justificadas agresiones imperiales en el mundo.
Algunas características geológicas del Guaraní se conocen desde hace más de 50 años por las exploraciones de PETROBRAS, YPF y PAULIPETROL en Brasil, Argentina, Paraguay y Uruguay. Ya en 1974 se publicó en Brasil el primer estudio hidrogeológico importante sobre la región.
Es una de las mayores reservas de agua subterránea del planeta estimándose la misma hasta hoy, en unos 50.000 kilómetros cúbicos. La recarga se estima entre 160 y 250 kilómetros cúbicos por año y explotando 40 kilómetros cúbicos por año podría abastecerse a unas 360.000.000 de personas con una dotación de 300 litros por habitante diariamente. En vastas regiones presenta surgencia natural. El espesor más común del Acuífero es de 200 mts., pero supera los 600 mts. En el eje de dirección NNE-SSN paralelo al río Paraná, llega hasta 800 mts. a lo largo del río Uruguay, alcanzando 100 y 1.200 mts. en zonas de Brasil y Argentina. Las aguas encontradas entre 500 y 1.000 mts. de profundidad presentan caudales mayores a los 500.0001/H y en algunos casos 1.000.000 1/H. La temperatura del agua varía con la profundidad.
La región comprendida por el Acuífero, posee unos 15.000.000 de habitantes.
Constituye el Guaraní la principal fuente de suministro de agua potable para abastecimiento urbano, industrial y agrícola. En Brasil, más de 300 ciudades de entre 3.000 y 500.000 habitantes son abastecidas total o parcialmente por él. En Paraguay, se han registrado unos 200 pozos que abastecen a poblaciones de la región oriental del país. Uruguay cuenta con unos 135 pozos y se los usa para abastecimiento público y baños termales. En la Argentina, hay en explotación solamente 6 pozos termales de agua dulce en el sector oriental de la Provincia de Entre Ríos.
Las áreas de recarga y descarga del guaraní y las áreas donde existen una alta concentración de usos y usuarios, se consideran áreas críticas (“hots spots”): Concordia (Argentina) – Salto (Uruguay), Rivera (Uruguay) – Santana de Livramento (Brasil). Ribeirao Preto (Brasil). Pero el área más importante y fundamental de recarga y descarga es el corredor transfronterizo entre Paraguay, Brasil y Argentina, y este corredor está ubicado ¡OH SORPRESA! ¡NADA MENOS NI NADA MAS QUE EN LA ZONA DE LA TRIPLE FRONTERA!
Se menciona la existencia de otro acuífero en el Continente Americano. El mismo se extendería, ya que sus límites reales aún se desconocen desde la zona del Yucatán, en México, hasta Panamá. Esto explica la proliferación de bases norteamericanas en la región y la presión que se ejerce sobre los gobiernos locales para que acepten el Plan Puebla-Panamá, simple extensión del NAFTA. Ambos instrumentos le garantizan a EEUU el control militar y económico de la región cuyo control político ya posee.
Lo actuado hasta la fecha a nivel regional
EEUU estructuró un sistema para detectar la magnitud del recurso, asegurarse su uso de manera “sustentable” y evitar todo tipo de contaminación, regular su uso de “manera sustentable” y mantener permanente control hasta cuando lo considere conveniente (Ver anexo 3).
Cabe preguntarse: ¿por qué los gobiernos de la región renunciaron a la autonomía del proyecto? ¿Qué significa desarrollo sustentable para los países del Primer Mundo y para los que no pertenecen a tan “selecto” grupo? Basta con mirar hacia ellos para darnos cuenta: El Primer Mundo ha dilapidado sus recursos y reservas y ahora vienen por los nuestros. ¿A quién obedecen y responden los organismos internacionales que intervienen en el proyecto? ¿Desde cuándo poseen sentimientos altruistas, solidarios y humanitarios reales? ¿Qué significa preservar? ¿Acaso una cadena de SPAS? ¿Acaso el no uso de las aguas del Acuífero? ¿Desde cuándo las poblaciones indígenas han sido consultadas para que opinen sobre proyectos que las han afectado, la mayoría de las veces para mal? Y si se las consultó alguna vez, cosa dudosa. ¿Se las ha escuchado? ¿Cuándo los gobiernos de la región han informado la verdad a sus ciudadanos y los han consultado sobre temas trascendentales que tienen que ver con el mantenimiento de la soberanía e independencia de nuestros países? ¿por qué la comunidad académica permanece en silencio sin alertar sobre los peligros que encierra el proyecto, que no responde a nuestros intereses nacionales sino a los del imperio?
La inoperancia y actitud de los gobiernos locales, atentos exclusivamente a sus intereses particulares y no a los nacionales, ha favorecido el incesante avance del imperio y ha puesto en peligro la soberanía de nuestros países sobre el Acuífero Guaraní y toda la región pues como escribiera Manuel Ugarte “Pueblos que esperan su vida o su porvenir de una abstracción legal o de la voluntad de los otros son de antemano pueblos sacrificados”.
A nivel argentino
En febrero del 2001 el gobierno argentino constituyó la Unidad Interministerial de Aguas Subterráneas Compartidas con los Países Limítrofes. Luego se conformó la Unidad Nacional para la Fase de preparación del Proyecto (UNPP) integrada por las Subsecretarías de Recursos Hídricos y de ordenamiento y Política Ambiental, Cancillería (Dirección de América del Sur y del Medio Ambiente) y la Jefatura del Gabinete de Ministros. Como Consejo Asesor: las Universidades Nacional del Litoral y de Buenos Aires, el Instituto Nacional del Agua (INA), los gobiernos provinciales de Misiones, Corrientes, Entre Ríos, Chaco, Formosa y Santa Fé, centros de investigación, ONGs, profesionales especialistas en el tema, universidades privadas y públicas. Luego se formó la Unidad Ejecutora del proyecto (UNEP).
Pero como los gobiernos de la región renunciaron a la autonomía del “Proyecto para la Protección Ambiental y Desarrollo Sostenible del Sistema Acuífero Guaraní”, en nuestro país el control del mismo está en manos de EEUU a través de los organismos internacionales que coordinan, fiscalizan y ejecutan el mismo. Por lo tanto los estudios no tienen en cuenta las necesidades reales de la Argentina, sino que el objetivo sobre el cual se insiste una y otra vez es la preservación del Guaraní de los riesgos de la contaminación y su uso sustentable.
Los gobiernos argentinos han adoptado como propia, salta a la vista, una de las premisas del DOCUMENTO SANTA FE IV: …los recursos naturales del hemisferio están disponibles para responder a nuestras prioridades nacionales (las de EEUU, claro). Una ‘Doctrina Monroe’ si quieren”.

Conclusiones

Ante las cifras, no cabe más que la sorpresa. Todo ahora se justifica. La inusitada presencia de efectivos militares norteamericanos en la región, la proliferación de informes, siempre falsos, de la acción del terrorismo internacional desde la Triple Frontera, los infundados cargos a la comunidad árabe que trabaja, como lo hace y lo ha hecho con honradez y entusiasmo en sus pueblos adoptivos, no sólo allí, sino en múltiples lugares, los continuos ejercicios combinados de las fuerzas militares del imperio con las regionales, con pretextos tan inconcebibles como el de enseñar a nuestros entusiastas y pueriles militares como luchar contra el dengue objetivo del ejercicio conjunto de la infantería de marina norteamericana con la nuestra ¡muchas gracias marines!
Se habla continuamente de la necesidad y posibilidad de instalar una base militar de EEUU en la zona de la Provincia de Misiones a fin de controlar a tan temidos terroristas y los preparativos avanzan continuamente con el visto bueno del inefable y permanente Ministerio de Defensa Argentino y el apoyo de algunos sectores militares que facilitan sus instalaciones para las fases previas y que sueñan que con la presencia yanqui en el país, volverán a repetir su “epopeya de la guerra contra la subversión”, ahora contra el peligro de los comerciantes sirio-libaneses…
Parece un cuento escatológico y estrafalario, pero convendría preguntar a los habitantes próximos a la base naval de la Mazurca, Provincia de Entre Ríos, qué saben de marines norteamericanos, y preguntar al intendente de la zona qué le pasó por denunciar esas presencias ilegales que vulneran sistemáticamente nuestra Constitución.
Por ello expresamos que cada uno, en su ámbito, debería resguardar:
a) EL GOBIERNO: Preservar para la Nación y sus habitantes los recursos naturales y no permitir la injerencia extranjera en sus proximidades, máxime la militar. El gobierno debe ser el resguardo de la soberanía de la Nación. Debe tener planes de prospección, explotación y mantenimiento de los recursos estratégicos para el largo, mediano y corto plazo y sólo coordinar con nuestros hermanos limítrofes, la forma de explotar esos recursos en forma conjunta. Es realmente vergonzoso que la investigación de esas riquezas esté organizada y financiada por el imperio y sus aliados y nosotros recibamos la información de segunda mano.
b) EL PUEBLO; No debe ni puede permanecer al margen de estos verdaderos problemas actuales y del futuro argentino. Debe informarse y manifestarse contra toda forma de entrega del patrimonio. No debe tolerar la presencia y acción de los profetas nacionales del imperio que se vanaglorian de su accionar desnacionalizado y muchos menos de fuerzas armadas extranjeras en nuestro territorio.
c) LAS FUERZAS ARMADAS Y DE SEGURIDAD: Deben recuperar el sentido nacional que les inculcó el Libertador y que se diluyó en su desgraciada participación en las contiendas internas. No deben confraternizar con los efectivos del agresor imperial, por importantes que parezcan los beneficios que éste ofrezca. Su único lugar es junto a su pueblo, del que son parte, resguardando su patrimonio económico, social y cultural. Ello les devolverá el aprecio que tanto añoran.
Pero todos deberíamos están advertidos de lo que pronosticara el LIBERTADOR SIMON BOLIVAR el 5 de agosto de 1829: “Los Estados Unidos parecen destinados por la Providencia para plagar la América de miseria en nombre de la libertad”.
* Trabajo elaborado por la profesora Elsa M. Bruzzone y los coroneles (R) José Luis García y Horacio P. Ballester. Centro de Militares para la Democracia Argentina (CEMIDA). Nota publicada por Bitácora de Montevideo. Uruguay.
ALAI, 23/05/03