La IEA publicó el jueves pasado que la producción de crudo repuntaría durante los siguientes años. Declaran que Agencia Internacional de Energía ya ha exagerado antes sus declaraciones
Expertos independientes expresaron dudas sobre cálculos que la Agencia Internacional de Energía (IEA, por sus siglas en inglés) publicó el jueves pasado, según los cuales la producción de crudo repuntaría durante los siguientes años.
De acuerdo con el documento de la IEA, cuya información sirve de base para que 28 de los países más desarrollados del mundo tomen decisiones sobre políticas energéticas, la producción mundial de crudo será de 105 millones de barriles en 2030.
Esa cifra significaría que el punto máximo de la producción petrolera mundial sería alcanzado en dos décadas. Tal aseveración es un aliciente para mantener los precios de crudo estables y favorecer así a los países consumidores. Actualmente, la producción mundial es de 83 millones de barriles diarios, según la IEA.
Sin embargo, señalan sus críticos, la IEA ha exagerado ya antes sus estimaciones. Sus cálculos de 2005 indicaban que la producción en 2030 sería de 120 millones de barriles, cifra que cuatro años más tarde se ajustó en 15 millones de barricas menos.
Así, expertos independientes -sin relación directa con gobiernos- han dudado sobre la veracidad de las cifras de la IEA. Algunos de ellos indican que la cúspide de la producción petrolera será alcanzada en una década, si no es que antes.
Tanto la Universidad de Uppsala, en Suecia, como la de Liverpool, en Inglaterra, señalan que para 2030 la producción mundial de crudo será de 75 millones de barriles diarios, una cifra incluso menor a la actual.
Por su parte, expertos de la IEA citados por el diario británico The Guardian durante la semana pasada revelaron que esa agencia ha alterado en forma consistente sus proyecciones de la producción futura de crudo.
El diario señaló que funcionarios de Estados Unidos han jugado un papel esencial en presionar al alza las cifras publicadas por la IEA y en exagerar el hallazgo de nuevas reservas energéticas. Por su parte, Kjell Aleklett, de la Universidad de Uppsala, autor del reporte “La cúspide de la era del crudo” declaró apenas este jueves que el reporte de la IEA es un “documento político”.
Por ahora, los precios del crudo fluctúan en alrededor de 80 dólares por barril. Un precio mucho más elevado, según apuntan expertos, podría afectar el ritmo de la recuperación económica.
No obstante, una proyección demasiado optimista presiona los precios a la baja y, al final, resta incentivos para que se impulsen alternativas energéticas que sean renovables y más amigables con el ambiente que los hidrocarburos. (Con información de Notimex/JOT)
Fuente: El Financiero