Fracking: dos estudios controversiales reavivan el debate en Mendoza

Los filtró una asociación denominada “Ecoleaks”. En ellos quedaría revelada la contaminación del agua por la extracción de petróleo.

Por Federico Fayad – ffayad@losandes.com.ar

Pese a que el 9 de marzo se autorizó el uso la técnica del fracking en el la provincia, los grupos ambientalistas están lejos de bajar los brazos en la pelea con el gobierno, ya que denuncian que esta técnica contamina el agua.

La aprobación de esta metodología permite la extracción de petróleo en Malargüe desde donde en las últimas horas trascendieron unos documentos elaborados por la Universidad Nacional de Cuyo y el departamento de Irrigación que indicarían que el uso de la técnica de fracking ha alcanzado napas de agua cercanas a la zona de donde se realizan estos trabajos. 

“Se trata de expedientes que se filtraron en Ecoleaks, que es el equivalente a Wikileaks, pero enfocada al área ambiental”, indicó el magister en Biotecnología, Esteban Servat, quien además pertenece a esta agrupación ecologista.

“Lo que muestran los informes es que hay evidencia de contaminación en los pozos de pruebas pilotos en el cerro Pencal. Se trata de contaminación elevada con hidrocarburos. Sin embargo, luego pasaron otros informes que no daban contaminación”, denunció el especialista.

Según indican estos resultados, la contaminación de hidrocarburos en la profundidad donde se encuentra agua subterránea es de 0,4 cuando el máximo permitido es de 0,1.

Este dato corresponde a un estudio encarado por el laboratorio del Centro de Estudios Tecnológicos y Ambientales de la UNCuyo y el análisis lleva el número 16419-17.

En tanto que otro relevamiento de Irrigación (muestra 13.072) muestra que el nivel de contaminación es de 0.7 cuando la normativa indica un máximo de 0.5.

“Se hicieron estas dos pruebas en diferentes laboratorios para determinar si hubo error humano. Pero lo cierto es que en uno de los casos la contaminación es cuatro veces superior a lo permitido”, dijo Servat, agregando que lo que determinan es que hay petróleo o derivados en el agua que es de consumo humano o destinada a riego.

Servat aseguró que estos informes deben darse a conocer masivamente porque los hidrocarburos que se obtienen a partir del fracking son “peligrosos y cancerígenos”. “Estos informes deben ser públicos. Pero hay un mandato de usar este método como sea. Lo más peligroso es que esto recién empieza porque hay más de 200 pozos donde se va a hacer fracking, que utiliza más de 500 químicos tóxicos que disuelven la roca pero que no se queda inmóvil sino que sigue comiendo en sentido horizontal y vertical”, resaltó.

Desconocen el origen

Desde el laboratorio de servicios a terceros, del Centro de Estudios Tecnológicos Ambientales dependiente de la Facultad de Ciencias Aplicadas a la Industria (UNCuyo), explicaron que en apariencia los documentos relacionados con este laboratorio -que no son de carácter público-  son reales y que los resultados que se muestran corresponden a los análisis.

María Esther Balanza, directora del laboratorio y que hace 30 años trabaja en proyectos de investigación de la calidad del agua dijo que los resultados que se obtienen de las diversas muestras que periódicamente llegan al laboratorio están certificados con normas de calidad y que está asegurada la trazabilidad de las mismas.

Sin embargo aclaró que “de lo que no tenemos conocimiento es de dónde son las muestras. Eso es así con cualquiera de nuestros clientes. Nos traen la muestra y nosotros la analizamos. Pero no sabemos de dónde se extrajeron o en qué condiciones”, detalló Balanza.

Según indicó la especialista, al desconocer de dónde se obtuvo la muestra no pueden determinar si la contaminación es por fracking o por otro motivo. “No me puedo hacer responsable de las condiciones de toma de la muestra porque lo desconozco. Solo puedo responsabilizarme por los resultados de los análisis”, reiteró la científica.

En coincidencia con lo señalado anteriormente, Eduardo Sosa, ex jefe de Gabinete de la Secretaría de Ambiente y Ordenamiento Territorial y reconocido ambientalista, afirmó en una nota publicada en Los Andes que “el sistema de control está pensado para que, en caso de un derrame, sea la empresa involucrada la que deba comunicar el incidente, y el órgano de control se entera solo si la empresa decide denunciarlo”.

No hay afectación

Los informes trascendieron el día viernes 16 y un día después desde Prensa de gobierno se divulgó que, luego de tres campañas de monitoreo para evaluar la calidad del acuífero subterráneo, los resultados obtenidos hasta el momento no evidenciaron ningún tipo de alteración en el acuífero.

En tanto que ayer nuevamente se insistió desde esa dependencia respecto a la calidad del agua del acuífero. “A la fecha, cabe destacar que no hay afectación del acuífero subyacente donde se está llevando a cabo la experiencia piloto de estimulación hidráulica o fracking, área Puesto Rojas, Yacimiento Pencal, en el departamento de Malargüe”, aseguró el director de Policía y Control de Calidad del Agua de Irrigación, Mario Luraschi.

“La estimulación hidráulica o fracking se hizo a 2.000 metros de profundidad, bajo nivel del suelo. Ahí se perforó la roca con agua a presión. El seguimiento y control de estos pozos de monitoreo donde se detectó agua rondan a una profundidad aproximada entre 30 y 60 metros. Hoy no podemos decir que haya afectación de esa actividad, pero seguiremos controlándola y cualquier anormalidad que surja será difundida a la empresa y a todos y se tomarán las medidas correspondientes según la legislación vigente”, señaló el funcionario.

Pedido de informes

El diputado Gustavo Majstruk, de Renovación Justicialista, solicitó un pedido de informes a la Cámara de Diputados de Mendoza para que a la vez haga lo propio con el Departamento General de Irrigación en relación a la extracción de petróleo de manera no convencional (fracking) en Malargüe.

El pedido de informe de cada muestra se remonta al mes de julio del año pasado hasta el día de la fecha. En él se solicita el detalle de la presencia de elementos químicos, componentes orgánicos e inorgánicos encontrados en cada muestra con su respectivo número y el detalle en unidades, entre otros aspectos.

Los Andes