La estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA) recibió el lunes un crédito por 2.000 millones de dólares, de manos de la estadounidense Chevron, para desarrollar un plan de aumento de la producción de crudo en el proyecto conjunto Petroboscán, en el occidente del país sudamericano.
En lo que va del año, la petrolera venezolana ha amarrado créditos por un total de 9.000 millones de dólares con empresas extranjeras que le otorgarán capital fresco de inversión en los próximos meses en momentos de estrechez de su flujo de caja.
“Estos recursos comienzan a entrar de inmediato e irán a infraestructura y gestión para tener el incremento de producción planificado lo mas pronto posible (…) Tenemos que optimizar nuestra producción e infraestructura en Occidente”, dijo el ministro de Petróleo, Rafael Ramírez.
Petroboscán, situada en el estado Zulia -al occidente del país- y conformada en un 60 por ciento por PDVSA y en un 40 por ciento restante por Chevron, produce unos 107.000 barriles por día (bpd) de crudo pesado con un plan de elevarlos a 127.000 bpd para el 2019.
Ramírez dijo que la producción de crudo en Occidente cerró en menos de 800.000 bpd en 2012 pero este año va por 830.000 bpd. Agregó que se están añadiendo calderas para la inyección de combustibles a los yacimientos del sur del Lago y de esa manera elevar la producción.
PDVSA y Chevron negociaron el crédito durante dos años.
El crédito tendrá una tasa de interés de Libor más 4,5 puntos y su desembolso será por tramos, con fecha tope al 2026.
Las condiciones del crédito habían sido aprobadas por ambas partes el año pasado, dijo una fuente cercana a la negociación, pero las condiciones políticas del país en medio de la convalecencia y muerte del presidente Hugo Chávez y cambios de última hora solicitados por Venezuela demoraron la firma.
“Este crédito va a ir a desarrollo y a incremento de producción. Vamos a seguir trabajando en proyectos como Plataforma Deltana y Petroindependencia para incrementar producción a partir de allí también”, dijo Alí Moshiri, presidente de Chevron para América Latina y África.
“Chevron tiene muchos años en Venezuela y seguirá trabajando con PDVSA, pensamos que las reservas en Boscán son suficientes para continuar incrementando la producción”, añadió.
Tras un año de caída en la extracción de crudo, en 2013 PDVSA invertirá un récord de 25.000 millones de dólares buscando lograr un alza de unos 400.000 bpd en el bombeo a partir de seis nuevos proyectos en la Faja del Orinoco, de los cuales cuatro ya iniciaron su operación, para llegar a una producción de 3,3 millones de bpd.
Los otros dos, Petrourica con la china CNPC y Petroindependencia con un consorcio liderado por Chevron, iniciarían bombeo en los próximos meses, dijo Ramírez.
Los proyectos en la vasta Faja del Orinoco, el mayor depósito de crudo del mundo, planean agregar más de 2 millones de bpd de nueva producción a la aletargada extracción local, que el año pasado bajó a su menor nivel desde el 2007.
El ministro dijo que la producción en la Faja ronda 1,22 millones de bpd, por encima del histórico de un millón de barriles diarios.
A través de empresas mixtas conformadas con firmas extranjeras para operar campos maduros como Boscán, PDVSA también espera revertir la caída de producción de los últimos años en las áreas tradicionales.
Para enfocarse en el incremento de la producción petrolera, que apalanca la economía venezolana, este mes PDVSA logró un crédito con CNPC por 4.000 millones de dólares, otro con la rusa Rosneft por 1.500 millones de dólares y una línea de crédito con la estadounidense Schlumberger por 1.500 millones de dólares.
Esto le permitiría sustituir las emisiones de bonos por créditos privados y destrabar la acumulación de cuentas por pagar a proveedores, que han afectado sus operaciones.