El Gobierno argentino tildó de “proteccionista” la decisión de la Unión Europea de imponer aranceles al biodiésel local, restricción que se confirmó ayer y que fue adelantada por Clarín. En un comunicado, la Cancillería consideró que la medida se adoptó ante “la incapacidad de los productores europeos para competir con productores más eficientes”.
Los aranceles, aprobados por ahora de forma provisional y que deben ser ratificados, podrán ser de hasta 104,92 euros por tonelada, en una banda que va del 6,8% al 10,6%. Están vigentes desde hoy y también Indonesia fue castigada. Bruselas dice que lo hace para proteger a la industria europea de lo que considera “dumping”. Acusa al país de vender biodiésel por debajo de su costo de fabricación, para así copar el mercado y expulsar a los productores europeos.
La decisión “carece de justificación técnica”, dijo Cancillería, mientras que las empresas exportadoras, nucleadas en Carbio, señalaron que poseen ventajas competitivas sobre sus pares europeos, como la proximidad a las zonas de cultivo, el acceso a puertos y escalas eficientes. “Muy lejos de hacer prácticas de dumping, las exportaciones de biodiésel desde Argentina a la UE siempre fueron realizadas con una rentabilidad razonable”, sostuvieron.
El Gobierno recordó que la Argentina había hecho el 15 de mayo un reclamo en la OMC por las trabas a las exportaciones de biodiésel argentino a Bélgica, Francia, Italia y Polonia. Y que el año pasado España tuvo que modificar una norma que prohibía la importación de biodiésel, como consecuencia de un reclamo en la OMC.
La actual medida provisioria la impuso la Comisión Europea sin consultar con los 27 países del bloque. En caso de querer hacerla definitiva en noviembre, estos sí tendrían que dar su visto bueno y los aranceles se extenderían hasta 5 años. El mercado europeo de biodiésel mueve, según la Comisión Europea, 12.000 millones de euros al año. Las importaciones de Argentina e Indonesia representan el 20%, pero en países como Italia, los productores argentinos copan ya el 75% del mercado.
Por otro lado, la Comisión estudia también subsidios al biodiésel argentino. Lo que podría derivar en más aranceles o en otra denuncia ante la OMC, debería llegar aprincipios de agosto.
Clarín
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La Argentina acusó a Europa de “proteccionismo agresivo”
El Gobierno acusó ayer a Europa de impulsar un “agresivo proteccionismo” al imponer aranceles a las importaciones de biodiésel de la Argentina y de Indonesia.
“Ante la incapacidad de competir, Europa impulsa un agresivo proteccionismo contra el biodiésel argentino”, afirmó el Ministerio de Relaciones Exteriores mediante un comunicado, a la vez que manifestó la disposición del Gobierno para “efectuar todas las acciones que sean necesarias, dentro del derecho internacional” para proteger a productores y exportadores argentinos.
La Comisión Europea (CE) anunció ayer que impondrá aranceles a las importaciones de biodiésel argentino e indonesio, al considerar que ambos países venden este combustible en forma desleal, por debajo del precio de costo con el objetivo de copar el mercado.
Esta decisión “representa una acción más en el escalamiento del histórico proteccionismo europeo, agravado hoy por la crisis que atraviesa la Unión Europea”, afirmó la nota del ministerio que encabeza Héctor Timerman.
Agregó que las medidas “se deben a la incapacidad de los productores europeos para competir con productores más eficientes” y que “se trata de una decisión de neto corte proteccionista que carece de justificación técnica”.
La CE fijó aranceles provisorios de entre el 6,8% y el 10,6% para las importaciones de biodiésel argentino. En el caso de Indonesia, el rango fue aún más amplio (0% a 9,6%).
La Argentina es el principal exportador mundial de biodiésel y junto con Indonesia representa el 90% de las importaciones de este producto por parte de la UE.
La Cancillería argentina recordó el reclamo “para contrarrestar este proteccionismo europeo” que formalizó el 15 de mayo pasado ante la Organización Mundial del Comercio (OMC).
La Cámara Argentina de Biocombustibles (CARBIO) rechazó en un comunicado la denuncia de la UE sobre “prácticas de dumping por parte de los productores-exportadores argentinos” y manifestó su respaldo a las gestiones del Gobierno. La entidad está integrada, entre otras empresas, por las filiales locales de los gigantes del sector agroalimentario estadounidenses Bunge y Cargill.
En 2012, la Argentina logró revertir una medida impuesta por España, que modificó entonces su normativa para importar biodiésel extracomunitario tras la decisión del Gobierno de Cristina de Kirchner de expropiar el 51% de las acciones de la petrolera YPF.
Ámbito Financiero