La distribuidora Metrogas negocia contrarreloj para cumplir con el pago de su deuda y evitar así una intervención del Estado. Según manifestó ayer el vicepresidente ejecutivo de YPF, Sebastián Eskenazi, está avanzada una gestión para que entre en la empresa un nuevo socio que aporte capital para cubrir el próximo vencimiento. Otra alternativa es que la propia YPF ponga la planta. De ambas opciones, fuentes del sector sostuvieron que la llegada de un nuevo inversionista sería la más probable para sanear la situación de Metrogas. La consecuencia sería que British Gas (BG) cedería el control de la distribuidora. El directivo aclaró que “el socio es privado”, descartando la posibilidad de que fuera socorrida por Enarsa.
Metrogas, una de las privatizadas más grandes del país, define por estas horas si entra en default. El gobierno nacional había alertado que si la empresa no cumple con los diez millones de dólares de intereses que vencen el 30 de diciembre, intervendrá la compañía. La empresa convocó a una asamblea extraordinaria para ayer a la mañana para analizar la situación económica y regulatoria de la sociedad. “La compañía se encuentra inmersa en un proceso de renegociación de licencia”, advertía el texto dirigido a todos sus accionistas. Entre los puntos principales que fueron tratados se destaca el endeudamiento.
La firma aclaró que la deuda se contrajo por el financiamiento de planes de inversión realizados entre 1993 y 2001. A esto sumaron la deuda asumida de la ex Gas del Estado con el Tesoro Nacional y con YPF de 110 millones de dólares, que se necesitaba financiar. “Por ello, el mecanismo utilizado fue el mercado de capitales a través de la emisión de Obligaciones Negociables”, señalaron. Ahora enfrenta un vencimiento de diez millones de dólares y la firma no cuenta con el dinero para cumplir con el pago.
No bien se conoció la situación, el Gobierno adelantó que podría definir la intervención de Metrogas. Eskenazi sostuvo que las negociaciones para resolver esta situación “están avanzadas”. El directivo consideró entre las opciones un “desembolso de YPF o la incorporación de un socio privado”. Esta última sería la alternativa con más chances para concluir con el default de la distribuidora y evitar la intervención por parte del Estado. “Estamos en plena negociación viendo cuál es la mejor solución”, manifestó el vice de la petrolera.
Otro de los temas que fueron analizados ayer durante la asamblea son las tarifas. Según el informe de la firma, la industria del gas está regulada y sólo Gas Natural Ban obtuvo una actualización de tarifas. El resto “no ha recibido hasta ahora ningún tipo de ajuste “. En este sentido, remarcaron que en marzo de 2009 el Poder Ejecutivo había ratificado un Acuerdo Transitorio suscripto inicialmente en septiembre de 2008 y que permitía una suerte de ajuste. Pese a ello, advirtieron que la empresa aún no puede facturar con los valores resultantes del acuerdo. En este sentido, Eskenazi confirmó que el Gobierno viene llevando a cabo negociaciones con toda la cadena gasífera, tanto productores como distribuidores, y estimó que “en 30 o 45 días habrá alguna definición al respecto”. Las discusiones comprenden el precio del gas en boca de pozo y el precio de suministro. Este nuevo ajuste de tarifas, en tanto, podría servir de incentivo a nuevos jugadores que quieran ingresar al negocio del gas a partir de su incorporación en Metrogas.
Fuente: Página/12