Hoy como ayer, el comercio internacional orienta el modelo de desarrollo de nuestros países y organiza nuestro sistema productivo. Por ello, afecta cuestiones próximas a nuestras vidas como las oportunidades de trabajo, el tipo de bienes que consumimos y, dado que los acuerdos comerciales incluyen cuestiones como inversiones y regulaciones estatales, impactan también en el sistema educativo y el sistema de salud del que podemos gozar, el acceso a medicamentos, al agua, a la energía, a los alimentos, a los servicios públicos esenciales, a los bienes culturales y al conocimiento.
Relacionados
Mirar al norte para no perder el sur: la política energética de los primeros seis meses de Trump
Por Alan David Rocha Varsanyi En sus primeros meses, Donald Trump relanzó su política de “combustibles fósiles primero” mediante la declaración de…
#Entrevista | Hidrógeno verde y extranjerización del territorio
“La producción de hidrógeno demanda grandes cantidades de agua y de energía. En Argentina desde 2022 hay proyectos, mayormente en Patagonia, que…
Latifundios energéticos para la transición corporativa
En los últimos tres años, se han sucedido anuncios de inversiones millonarias destinadas a la producción de hidrógeno verde a gran escala…



