El juez Santiago Marquez Gauna se presentó en el yacimiento Medianera, que opera la empresa Medanito. Está paralizado desde hace 35 días por superficiarios que reclaman una remediación. Ambientalistas señalaron que el juez decidió dar marcha atrás con el desalojo a cambio de que se libere un equipo de perforación.
La Justicia rionegrina intervino ayer en el conflicto entre superficiarios y la empresa Medanito en Catriel por el cual el yacimiento Medianera permanece paralizado desde hace 35 días.
Según señaló el presidente de la Fundación Ambiental Acción Sustentable, Francisco Anaya, el juez Santiago Marquez Gauna se presentó junto con la Policía ayer a las 10.30 con orden de desalojar el corte. Sin embargo, después de reunirse con las familias de crianceros (unas 80 personas), decidió dejar sin efecto la medida a condición de que liberaran un equipo perforador de una empresa de servicios.
“Llevamos al juez a recorrer los lugares más contaminados y encendimos una de las bombas centrífugas que sacan agua para los animales y vio cómo salía petróleo; además le mostramos los animales muertos por la contaminación de las napas”, indicó Anaya.
El ambientalista aseguró que, al ver la situación, Marquez Gauna decidió no desalojar el piquete y pedirles que liberen el equipo de perforación. “Los crianceros hicieron una asamblea y decidieron ser flexibles con el tema porque se trata maquinaria de una empresa de servicios, y no de Medanito, que necesita trabajar”, indicó Anaya.
Agregó que los superficiarios pretenden que se remedien sus campos, los cuales están determinados por la provincia de Río Negro como tierras productivas.
El presidente de la Fundación Ambiental Acción Sustentable señaló que la empresa “recurre a la Justicia para dilatar los tiempos y lograr continuar extrayendo petróleo y gas hasta 2016, fecha en la cual vence el contrato de concesión del área, y pretende transferir el pasivo ambiental a generaciones futuras”.
Aseguró que los funcionarios de la provincia de Río Negro nunca se acercaron para corroborar las denuncias de los superficiarios.
Los crianceros reclaman que Medanito invierta 150 millones de pesos para remediar los campos afectados, y aseguran que poseen título de propiedad, padecen problemas de salud, la muerte de sus animales y vegetación y la contaminación del agua.
La empresa denunció que es víctima de una campaña de difamación basada en falsedades vinculadas a presuntos daños ambientales, así como una inexistente falta de pago de compensaciones a ocupantes del área Medianera.
El yacimiento
La petrolera señaló que dicho yacimiento inició su producción hace 48 años, mientras que su gran desarrollo se realizó entre las décadas del ’70 y ’80. A mediados de 2010 Medanito tomó el área en estado de abandono, sin producción ni actividad.
“Nuestra empresa descubrió nuevos reservorios con sostenidas inversiones, privilegiando contrataciones locales tanto de servicios como de mano de obra, produce gas y petróleo, construyó un gasoducto, montó una planta de tratamiento de crudo y una red eléctrica, paga impuestos, regalías y cánones, así como también compensaciones económicas a los 12 superficiarios bajo sendos convenios”, indicó la compañía.
Y agregó que “gestores inescrupulosos y grupos que responden a dos superficiarios que desconocen lo firmado están cortando el acceso al área impidiendo operaciones, amenazando a nuestra gente, así como al personal de contratistas, y bloquean la entrada y la salida de equipos encargados de desarrollos en el área”.
Anaya aseveró que “cuando una empresa accede a una concesión la recibe con sus activos y también con sus pasivos ambientales, por lo cual debe remediar la contaminación”.
La Mañana de Neuquén