El Gobernador de Chubut y titular de la Ofephi explicó el acuerdo petrolero firmado el jueves

En diálogo con Página/12, Buzzi explicó que las provincias petroleras y el Estado nacional incrementarán la presión sobre las empresas privadas para lograr el autoabastecimiento. Van a supervisar la cantidad de equipos funcionando en cada yacimiento.

Fernando Krakowiak.- El gobierno nacional y la Organización Federal de Estados Productores de Hidrocarburos (Ofephi) crearon el jueves una comisión que se encargará de evaluar las actividades que vienen realizando las petroleras. En diálogo con Página/12, el gobernador de Chubut y titular de la Ofephi, Martín Buzzi, explicó los alcances de este acuerdo a través del cual buscan incrementar la presión sobre las empresas privadas para lograr el autoabastecimiento energético. “YPF aumentó el volumen de su producción el año pasado, pero la empresa representa el 38 por ciento de la producción nacional. El 62 por ciento restante son muchas otras petroleras, medianas, chicas y grandes. Lo que hace este acuerdo es poner el foco en ese 62 por ciento restante”, afirmó. Luego le apuntó directamente a Petrobras: “La verdad es que nunca hizo mucho y ahora va a hacer menos”.

–¿En qué se diferencia lo acordado el jueves con lo que la Ofephi firmó con el gobierno nacional y los sindicatos el 9 de febrero de 2012 para exigirles a las petroleras un incremento de la inversión?

–La diferencia en relación con el acuerdo del año pasado es que la instrumentación del acuerdo general está dada en los estados productores. En esta instancia lo que hacemos es un acuerdo donde no se mide la inversión sino los equipos que las petroleras tienen perforando, que son los que hacen la punta del proceso, y los equipos que tienen reparando, que son los que hacen incrementar la producción en los pozos viejos. Lo que hacemos es medir las metas físicas que hacen que al final del proceso haya un volumen de producción mayor, porque cuando se analiza el asiento contable con el volumen de inversión a veces éste es difícil de comprobar. Por ejemplo, YPF aumentó el volumen de su producción el año pasado, pero la empresa representa el 38 por ciento de la producción nacional. El 62 por ciento restante son muchas otras petroleras, medianas, chicas y grandes. Lo que hace este acuerdo es poner el foco en ese 62 por ciento restante.

–¿El desempeño de las otras empresas viene siendo flojo?

–Esto hay que hacerlo porque hay un incremento fuerte del consumo nacional de petróleo. En 2003 estábamos en 1,53 barril consumido por habitante por año y en 2012 llegamos a 2,8. Este incremento de casi el ciento por ciento del consumo nacional de petróleo es el que hay que compensar con un mayor volumen de producción. Entonces, por más que haya yacimientos que están estables y otros que están incrementando su producción, como en el caso de YPF, si no hay una suba del conjunto nos convertimos en importadores de petróleo y lo terminamos pagando con un déficit de la balanza comercial.

–¿Hay alguna meta de reducción del déficit?

–No podría darle una precisión sobre eso, pero estamos trabajando para reducirlo. En el caso de Chubut, este año tenemos previsto un incremento del 3 por ciento en la producción.

–Pero lo que hay que suponer a partir del convenio que firmaron el jueves es que las petroleras privadas no están haciendo un buen trabajo.

–No es parejo en todos lados. En Chubut y Santa Cruz, que es la realidad que yo más conozco, tenemos el caso de Petrobras, que ha decidido seguir desinvirtiendo en la Argentina.

–¿Qué producción tiene en Chubut?

–Es la tercera productora, luego de Panamerican e YPF. Tiene una sociedad que opera junto con Tecpetrol el yacimiento El Tordillo, que es el tercero en producción. Ahí hay una incógnita grande.

–¿Mientras decide qué hace con sus activos sacó el pie del acelerador?

–La verdad es que nunca hizo mucho y ahora va a hacer menos.

–¿No es una situación que se replica en el resto de las empresas privadas?

–No, la verdad que no.

–Usted me dice que se van a controlar los equipos, ¿pero además van a fijarles metas de producción?

–Cada yacimiento tiene su óptimo y eso lo define cada una de las provincias productoras. No es una meta que se establezca por empresa ni por provincia sino por yacimiento.

–Pero el año pasado, durante el conflicto con Repsol, fijaron como objetivo incrementar un 15 por ciento la producción nacional de crudo y gas en dos años, ¿eso quedó en la nada?

–Es una meta a lograr en el término de tres años, pero además eso no quita que cada yacimiento tenga su propio indicador de éxito. Para un yacimiento muy maduro, por ejemplo, el éxito es mantener lo que tiene.

–¿Qué tarea va a llevar adelante el Comité Técnico de Seguimiento?

–El acuerdo creó dos organismos. Una comisión ejecutiva, que está integrada por el Estado nacional y los gobernadores, y un comité técnico específico que evalúa a las empresas. Hay uno por cada provincia para evaluar el desempeño de los operadores en cada uno de los yacimientos y después llevar la información a la comisión ejecutiva.

–¿Las petroleras tienen la obligación de darles toda la información a estas comisiones de seguimiento?

–Por supuesto.

–¿Pueden aplicar sanciones?

–Sí, porque la ley corta les ha dado a los territorios provinciales la capacidad de tomar las decisiones concretas sobre cada operador.

–¿Cómo evalúa las inversiones que se están realizando en la formación Vaca Muerta?

–Sobre eso debería consultar al gobernador de Neuquén. Lo único que puedo decirle es que la inversión que está llevando adelante YPF en Vaca Muerta es bien agresiva. En Neuquén ahora hay 30 equipos perforando, no sólo en Vaca Muerta sino en toda la provincia de Neuquén. Es un número importante. Prácticamente no quedan equipos disponibles en el país ni para perforar ni para reparar. Están todos utilizándose.

–¿Están fabricando más?

–En el Golfo de San Jorge se están fabricando equipos, pero simultáneamente hay que importar.

Página/12