Bahía Blanca 15 de julio de 2013
El gobierno nacional llamó de Soberanía Hidrocarburífera a la ley 26.741, por la cual se reestatizaron el 51% de las acciones de Repsol-YPF. Mañana Miguel Galuccio anunciará el acuerdo con la empresa norteamericana Chevron para explorar el megayacimiento de hidrocarburos no convencionales de Vaca Muerta, en la provincia de Neuquén. No solo no hay soberanía en esta decisión, hay entrega, saqueo y riesgo ecológico. A pocas horas de hacer el anuncio del acuerdo, Gobierno publicó hoy en el Boletín Oficial un nuevo régimen de promoción de inversiones hecho a medida de empresas petroleras como Chevron. Por el mismo los inversionistas gozarán “a partir del quinto año de la ejecución de sus proyectos, del derecho a comercializar libremente en el mercado externo el 20% de la producción de hidrocarburos líquidos y gaseosos producidos sin pagar derechos de exportación”. Es decir, no pagará retenciones.
Además, los beneficiarios “tendrán la libre disponibilidad del 100% de las divisas provenientes de la exportación de tales hidrocarburos, en cuyo caso no estarán obligados a ingresar las divisas correspondientes a la exportación del 20 por ciento de hidrocarburos líquidos o gaseosos siempre que la ejecución del ‘Proyecto de Inversión para la Explotación de Hidrocarburos’ aprobado hubiera implicado el ingreso de divisas a la plaza financiera argentina por al menos” 1.000 millones de dólares.
Chevron que es una heredera de la mítica Standard Oil de California, es experta en extracción de petróleo no convencional. La extracción se realiza mediante el sistema de fractura hidráulica de las rocas (en inglés fracking). Este método de extracción, utilizado para el gas y el petróleo no convencional, implica insertar un tubo varios kilómetros bajo tierra hasta alcanzar la roca que contiene el hidrocarburo, y luego instalar una tubería horizontal, perforada. A través de sus agujeros se lanza agua con arena y sustancias químicas a gran presión, para poder extraer los hidrocarburos. El sistema es cuestionado en el mundo entero por el pasivo ambiental que deja, al punto que dentro del mismo territorio norteamericano el sistema ha generado múltiples protestas. En los estados de Pensilvania, Nueva Jersey y Vermont ha sido prohibido.
La CTA Bahía Blanca-Dorrego manifiesta que la asociación con la multinacional Chevron lejos de estar en el camino de alcanzar la plena soberanía energética, está entramada en la lógica del saqueo de los bienes comunes naturales con consecuencias devastadoras sobre el medio ambiente. Nuestro país es un país con petróleo, no un país petrolero o sea que asociarse con empresas que buscan exportar es un error que seguirá deformando el sistema. Por lo tanto como CTA estamos impulsando una `Campaña Nacional hacia una Consulta Popular por la Soberanía de los Bienes Comunes´, como único método verdadero de ejercicio de un pueblo soberano. Proponemos avanzar en la total nacionalización de esos bienes comunes, en el marco de un proyecto de largo plazo que incluya un rediseño de la matriz energética en alianza con otros pueblos y países de nuestra América, única forma de terminar con el saqueo, depender menos del petróleo y evitar los daños sobre el medio ambiente.
Comisión Ejecutiva CTA Bahía Blanca-Dorrego