El presidente boliviano propuso en la inauguración del encuentro ´Soberanía Hidrocarburífera al 2025´ trabajar en alternativas al gas como la energía eólica, hidroeléctrica, geotérmica y la atómica con fines pacíficos. Además anunció el desarrollo de una planta petroquímica que demandará una inversión de 5.000 millones de dólares
El presidente Evo Morales planteó incorporar en el encuentro ‘Soberanía Hidrocarburífera al 2025´ utilizar los recursos del gas en buscar y garantizar alternativas a los hidrocarburos y reveló que hay conversaciones con Francia y Argentina para desarrollar en Bolivia la energía atómica con fines pacíficos. Además advirtió que “algunos fundamentalistas ecológicos” perjudican y anunció la construcción de una planta petroquímica que demandaría 5.000 millones de dólares.
Morales lanzó el desafío en la inauguración del encuentro en Tarija, en el que los asistentes de diferentes sectores públicos y privados perfilarán los desafíos en materia hidrocarburífera en vista a la Agenda Patriótica 2025, que busca concertar metas en áreas como la económica, productiva y social hacia la celebración del bicentenario de la independencia de Bolivia.
Bolivia tiene como una fuente importante de ingresos la producción y venta de hidrocarburos, particularmente gas a mercados como Argentina y Brasil. “El tema de gas, por decir se acabe de aquí a 50 años, y ¿de qué energía va a vivir Bolivia?. Creo que eso hay que planificar en este debate, sigo convencido y me parece muy importante que este recurso económico que vienen del gas hay que invertir en otros sectores energéticos”, desafió.
Del encuentro participan la estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Agencia Nacional de Hidrocarburos, empresas petroleras, representantes de embajadas, organismos financiadores, organizaciones sociales, entre otros invitados. El Presidente sugirió al responsable de la Agenda Patriótica, César Navarro, incluir en el debate la temática de energía.
Entre las fuentes alternativas a los hidrocarburos que planteó desarrollar están la hidroeléctrica, eólica, geotérmica y la nuclear con fines pacíficos. Uno de los objetivos planteados es que hasta el 2025 Bolivia esté generando seis mil megavatios para el consumo interno y la exportación.
La búsqueda de otras alternativas no implicará dejar de lado el fortalecimiento de la política de exploración, explotación e industrialización de los hidrocarburos. Morales anunció que la construcción de una planta petroquímica que demandará la inversión de 5.000 millones de dólares. Está en estudio dónde será construida, en Tarija, Cochabamba o Chuquisaca, señaló.
La energía atómica también fue incorporada en el debate. Morales informó que hay trabajos de “manera reservada” con Francia y Argentina para desarrollar esa energía con fines pacíficos. “Estos días nos vamos a reunir con nuestros expertos, hay países europeos que tienen mucho interés de aportar con su conocimiento como Francia, como Argentina”.
“¿Por qué no tener energía atómica con fines pacíficos?, tenemos todas las condiciones, hay estudios, cómo juntarlos, cómo implementarlos”, sostuvo el mandatario, quien en abril consideró necesario “repensar” ese desafío tras el terremoto y tsunami del 11 de marzo que sacudió a Japón dañando la planta nuclear de Fukushima, que liberó radiactividad.
El desarrollo de hidroeléctricas y otros emprendimientos, sostuvo, tropiezan con la resistencia de algunos sectores alentados por Organizaciones No Gubernamentales vinculadas con el medio ambiente. “Está presente un problema ¿qué hacemos con algunos fundamentalistas ecologistas?, que a veces nos les interesa generar más energía”, cuestionó y aclaró que los proyectos tiene como característica el cuidado de la Madre Tierra.
El encuentro en Tarija definirá los pilares para el desarrollo del sector energético.
