Lewis Kaplan, el juez de Nueva York que ‘consiente’ a Chevron

Los abogados de los 30 mil amazónicos perjudicados por la contaminación estaban seguros de que el titular de la Corte estadounidense fallaría a favor de la transnacional, como en efecto ocurrió el pasado martes. Apelarán el fallo e insistirán en que la petrolera pague los $ 9.500 millones de indemnización
Lewis A. Kaplan, juez superior de la Corte Federal para el Distrito Sur de Nueva York. Foto: Internet.

Lewis A. Kaplan, juez superior de la Corte Federal para el Distrito Sur de Nueva York. Foto: Internet.
Lewis A. Kaplan, juez superior de la Corte Federal para el Distrito Sur de Nueva York, es quien desde 2010 llevaba a cargo el juicio RICO (Racketeer Influenced and Corrupt Organizations Act), entablado por Chevron en contra de los indígenas y colonos de la Amazonía ecuatoriana, a quienes trata como “mafiosos” y “extorsionadores” por haber ganado el juicio que condenó a esa empresa a pagar una millonaria indemnización.
Chevron, durante el juicio, pidió a Kaplan no tomar en cuenta el testimonio y argumentos de los amazónicos en torno al daño ambiental -pese a ser lo medular del caso- y que no intervenga ningún jurado compuesto por varios magistrados. Esos y otros pedidos de la compañía recibieron el consentimiento y aprobación del juez. Por ello, Kaplan fue quien el 4 de marzo pasado emitió el fallo favorable a Chevron, el cual será apelado por la defensa de los afectados.
Lo nominó Bill Clinton
Nació el 23 de diciembre de 1944 en el distrito de Staten Island (Nueva York). Se graduó en la Universidad de Rochester en 1966. En 1969 obtuvo el doctorado en jurisprudencia por la Escuela de Derechos de Harvard. En la vida profesional fue asistente legal de Edward McEntee, exjuez Federal de Apelaciones; en el Tribunal de Apelaciones de EE.UU. para el Primer Circuito; y en el ejercicio privado.
El 5 de mayo de 1994 fue nominado por el expresidente Bill Clinton a un asiento en la Corte Federal de Distrito Sur de Nueva York que dejó vacante Gerard Louis Goettel. Fue confirmado por el Senado de EE.UU. el 9 de agosto de 1994. El 1 de febrero de 2011, en cambio, asumió como juez superior de esa corte.
En su carrera ha ganado fama de ser un juez dispuesto a tomar decisiones sobre cuestiones complejas. Sin embargo, en el caso de Ecuador, los afectados y su abogado, Steven Dozinger, creen que su actuación quedó corta para los estándares que se esperan de un jurista imparcial.
Las decisiones y comentarios de Kaplan sobre los afectados ecuatorianos han generado controversia: varias veces se ha referido a ellos como los “así llamados” afectados, poniendo en duda su existencia.
También ha dicho que la demanda impuesta por indígenas amazónicos no es más que “un gran juego” y que la demanda interpuesta en Ecuador no era un litigio de “buena fe”.
Cadena perpetua a Ghailani
Kaplan presidió el primer caso presentado ante un tribunal civil estadounidense contra un cautivo de Guantánamo durante 2009 y 2011.
Ahmed Khalfan Ghailani fue acusado de participar en los atentados de la red terrorista Al Qaeda contra las embajadas estadounidenses de Kenia y Tanzania en 1998, en los que murieron 224 personas.
En un primer momento, la Casa Blanca sufrió contratiempo cuando Kaplan no permitió la comparecencia de Hussein Abebe, uno de los testigos que debía aportar pruebas contra Ghailani, lo que demoró el proceso. Así consta en el blog de noticias chileno www.emol.com.
El juez fue criticado por observadores del proceso, quienes dijeron que las pruebas que se habían excluido podrían haber sido admitidas en un tribunal civil. Pero, Kaplan dijo que una comisión militar también hubiera excluido esas pruebas en base a la restricción en contra de pruebas obtenidas con tortura.
Entonces, The New York Times dijo que la decisión de Kaplan podría sentar un precedente en casos de otros presos de Guantánamo, que al igual que Ghailani son transferidos al sistema de justicia civil.
El 25 de enero de 2011, Kaplan lo condenó a cadena perpetua y a pagar $ 33 millones. De nada sirvió que abogados del procesado pidan clemencia y demuestren que fue torturado por la CIA. “Lo que Ghailani habría sufrido es menor en comparación con el sufrimiento y el horror causado por los ataques terroristas”, argumentó el juez al diario The Huffington post.
Ciclistas lo miran con recelo
Kaplan falló en contra de los ciclistas en base a la disposición que permitía al Departamento de Policía detener a cualquier grupo de más de 50 ciclistas que pedaleen juntos sin un permiso de desfile.
La nueva ley fue un golpe para el grupo denominado “La Masa Crítica”, que realizaba protestas frecuentes en bicicleta por Nueva York. Denuncias individuales afirmaron que, tras el fallo de Kaplan, la Policía tomó represalias y regulaciones selectivas contra estos protestantes.
En 2007, el club “Five Borough Bicycle” presentó una demanda en contra de la ciudad. El club alegó que al pedir la solicitud para el permiso de desfile, el proceso había sido “una pesadilla burocrática”, y que el requisito violaba sus derechos constitucionales de asociación, libertad de expresión y movilización.
Los tribunales dijeron que la nueva ley era imprecisa, por lo que el Departamento de Policía cambió el argumento: a que pequeños grupos de ciclistas eran más seguros y no interrumpen el tráfico.
El 16 de febrero de 2010, Kaplan reconoció los inconvenientes de la ley, pero dictaminó que no hubo violación a la Primera Enmienda de la Constitución, fallando en contra de los ciclistas.
Su fallo enfadó a los jubilados
El 2 de enero de 2010, Kaplan rechazó una demanda interpuesta por los jubilados de Lehman Brothers Holdings Inc., en contra de 11 ejecutivos y directores del banco de inversión, incluyendo a su expresidente ejecutivo Richard Fuld, por no cumplir con sus obligaciones fiduciarias conforme a la ley.
Según Kaplan, ningún hecho fue suficiente para explicar que los acusados (ejecutivos y directores del banco) fueron negligentes en manejar los fondos de jubilación. Frente a ello, Marcos Rifkin, abogado de los jubilados, dijo: “Creemos que la decisión pasó por alto los hechos y aplicó erróneamente la ley. Pero esta no es la última palabra para estos empleados, apelaremos”.
Finalmente, es conocido que Kaplan ha sentenciado numerosos casos de extorsión que involucran a miembros de la mafia. Por ejemplo, en 2010 fue asignado para presidir los juicios de 14 familias Gambino, arrestados por cargos de crimen organizado, conspiración de chantaje, manipulación de testigos (en el juicio de 1992 John Gotti) y tráfico sexual de un menor de edad.
El Telégrafo