Juan Pablo De Santis.- En horas de la tarde, el secretario de Energía, Daniel Cameron, recibió formalmente el pedido de renuncia a su cargo que ocupada desde 2003, cuando Néstor Kirchner llegó a la Casa Rosada. Su desplazamiento no hace más que blanquear el ascenso del ministro de Economía, Axel Kicillof, en materia de política energética, un área que hasta hace dos años manejó su par de Planificación, Julio De Vido, casi con exclusividad.
La presencia de Cameron al frente de Energía se volvió prácticamente insostenible después del verano pasado, cuando ocurrieron los últimos cortes de energía y al mismo tiempo de Kicillof consolidaba a sus funcionarios en áreas claves del mercado eléctrico y de hidrocarburos.
Según confirmó una fuente oficial a LA NACION, la reemplazante del Secretario saliente será Mariana Matranga, una joven ingeniera química, que desde agosto de 2012 se ha desempeñado como asesora de la Dirección de Finanzas de YPF, a cargo de Nicolás Arceo, alfil energético del ministro de Economía.
Matranga, de fuerte perfil técnico, también se desempeña como investigadora de la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Buenos Aires (UBA) y cuenta con antecedentes en empresas del sector tales como Solaris, DynaMotive, Techint y Tecna. Su especialidad son los hidrocarburos.
En los últimos dos años, De Vido sufrió un fuerte recorte de poder en las áreas energéticas a manos de Kicillof, que logró ocupar áreas claves como el control de Cammesa (la empresa que administra el mercado eléctrico), dirección financiera de YPF, la petrolera estatal Enarsa y la Comisión que coordina al Plan Nacional de Inversiones Hidrocarburíferas.
El nuevo esquema es coordinado por Emmanuel Álvarez Agis, secretario de Política Económica del Ministerio de Economía, quien además tiene a su cargo la coordinación de la reducción de subsidios a las distribuidoras de gas y energía eléctrica.
Cameron era considerado un funcionario “pingüino”. Con un título de ingeniero industrial y especialización en el mercado eléctrico, durante la gestión de Kirchner como gobernador de Santa Cruz había sido gerente general de la empresa provincial de energía, asesor de la Dirección Provincial de Energía, jefe de gabinete del Ministerio de Economía y Obras Públicas de la provincia y participó activamente en la privatización de YPF durante la década del noventa.