Centenares de personas marcharon este sábado desde el kilómetro 154 de la Ruta 26, a pocos kilómetros de la localidad de Tambores, hasta la entrada misma de uno de los pozos que está haciendo la empresa Schuepbach Energy.
El reclamo principal de la marcha era que se paren las perforaciones y que no se realice fracking (o fractura hidráulica), técnica altamente nociva para el agua subterránea.
En la actividad participaron activistas de varios puntos del país pero también de Argentina, Brasil y Paraguay.
Portando carteles y pancartas alusivas, los manifestantes pidieron que se detengan las perforaciones en busca de hidrocarburos, las cuales, en muchos casos, implican la generación de movimientos sísmicos.
Al llegar a la entrada misma de los pozos y a pocos metros de donde se realizan las exploraciones, los manifestantes leyeron una proclama realizada en conjunto.
Las exploraciones petrolíferas se están realizando sobre una de las mayores reservas de agua dulce del mundo: el Acuífero Guaraní.
Si bien los departamentos de Salto y Paysandú están declarados por sus respectivas juntas departamentales como “libres de fracking”, los manifestantes quieren que eso se respete y que la técnica sea prohibida a nivel nacional.
El Acuífero Guaraní, cuya superficie es de 1.175.000 Km3, tiene una importancia que a veces no se reconoce. Allí almacenan aguas que poseen una antigüedad de hasta 20.000 años.