“Nosotros tenemos la habilitación del ONABE ,que es el organismo que regula las tierras a nivel nacional. Hace 15 años que nos autorizaron a ocuparlas, pero el Municipio nunca terminó de cumplimentar los trámites”, señaló.
El caso de Santiago Maldonado, el joven artesano desaparecido en medio de una protesta del pueblo Mapuche sobre la ruta 40 en Chubut, puso en la mesa del debate el histórico reclamo de la comunidad originaria por el reconocimiento hereditario de las tierras que ocupan en gran parte del país.
En total, este pueblo originario habita en siete provincias distintas del país. En todas ellas la reforma constitucional de 1994 les otorgó a los Mapuches y al resto de los pueblos indígenas, el reconocimiento de la preexistencia al Estado Nacional, lo que les otorga el derecho a la posesión y propiedad comunitaria de las tierras que tradicionalmente ocupan.
En Bahía Blanca, el pueblo Mapuche también reclama tierras que entienden le corresponden por tradición.
El sector que les corresponde por ley ( y que reclaman como propio) es un macizo de cuatro manzanas en la zona cercana a Avenida Alem al 3.000.
“Son las tierras que ocuparon Cafulcurá, Antinao y otros tantos caciques desde hace cientos de años”, explica Olga Curipán, representante de la comunidad en nuestra ciudad.
“Hoy esas tierras están usurpadas y cada vez se construyen más casas”, detalló invitada al programa “El mejor resumen de la semana” que se emite por LA BRÚJULA 24 FM 93.1.
“Es más, -agregó Curipán- en los documentos hasta nos otorga derecho de ocupación sobre parte del las tierras del Ejército”.
“Nosotros no somos violentos. No somos como algunos medios nos quieren hacer ver. Nosotros vamos con la ley en la mano. Y queremos que el estado haga lo que le corresponde de una buena vez, con nosotros y el resto de los pueblos originarios”, exclamó la mujer.
“Necesitamos que se termine el relevamiento de tierras que nos corresponden por ley y tradición, y que está paralizado desde hace años por falta de presupuesto y recursos”.
El tratamiento en los medios de comunicación, las acusaciones y el temor de una reacción en su contra
“La gente en nuestra comunidad está muy preocupada tiene miedo de que pase algo. Porque algunos medios de comunicación nos muestran como violentos. Es una historia que se repite, dependiendo del cronista de la época y de la conveniencia. En el pasado, también nos mostraban como violentos, sucios y borrachos”.
“Hay medios de comunicación que inducen a la violencia hacia nuestra comunidad. Salvando las distancias nos están haciendo sufrir la misma persecución que en los tiempos de Julio Argentino Roca.”, sentenció Curipán.