Por Marcelo García
El 2017 arrojó muy malos resultados productivos en todo el país. La extracción de crudo y gas bajaron el 7,5%. En Chubut la producción petrolera descendió el 8,3% y en el norte de Santa Cruz la merma llegó al 9,1%. YPF y Tecpetrol tuvieron los peores resultados de los yacimientos chubutenses.
Nada parece detener la baja productiva en el sector de los hidrocarburos nacionales. Ninguna de las cuencas extractivas mostró resultados positivos, a pesar de haber alcanzado en su versión WTI la cotización de 58 dólares por barril durante diciembre del 2017.
La Cuenca del Golfo San Jorge tuvo a lo largo de todo el año pasado una merma de 8,6% en la extracción de crudo, que se tradujo en la pérdida productiva de 7,9 millones de barriles menos que en el 2016. De los 91,1 millones de barriles extraídos en 2016 se pasó a los 83,2 millones de barriles de 2017, para de esa manera llegar al nivel de producción más bajo de los últimos tres años.
Al interior de la CGSJ, en Chubut la producción de crudo bajó de los 55,3 millones de barriles de 2016 a los 50,7 millones de 2017, reflejando una merma de 4,6 millones de barriles que se tradujeron en un retroceso del 8,3%.
Por su parte, en la porción del norte de Santa Cruz la extracción de petróleo retrocedió de manera más abrupta, mostrando una caída del 9,1%, pasando de 35,8 millones de barriles en el 2016 a los 32,5 millones del año pasado. Esa baja significó que se extrajeran 3,2 millones de barriles menos en el último año.
PAE se mantiene; cae YPF
Las petroleras que operan en CGSJ fueron las protagonistas en diferentes magnitudes de la baja productiva del petróleo. Pan American Energy sigue siendo la de mayor volumen extractivo en Chubut , aunque en 2017 su producción retrocedió un 1,7%, mostrando una contracción de 523 mil barriles. CAPSA fue la segunda compañía que menos retrajo se producción chubutense con una caía del 4,4%, a partir de haber producido 189 mil barriles menos.
Muy diferentes y alarmantes fueron los desempeños de YPF y Tecpetrol en Chubut. La petrolera con mayoría accionaria estatal bajó su producción de crudo en un 13,2%, que se tradujeron en 1,7 millones de barriles menos; mientras que la operadora del Grupo Techint bajó la extracción de petróleo 34,5% al producir 1,4 millones de barriles menos en el 2017.
En el terreno gasífero, la CGSJ tuvo una baja del 7,5%; mientras que los yacimientos chubutenses retrocedieron el 3,5% pero aún más preocupante fue la retracción del norte santacruceño donde la producción de gas retrocedió el 14%.
Derrumbe en todo el país
La producción de hidrocarburos bajó en todo el país, mostrando una contracción del 7,5% en los rubros del crudo y del gas. En la totalidad de los yacimientos nacionales se dejaron de producir 14,1 millones de barriles de petróleo y en el sector gasífero -a pesar de los subsidios estatales- la caída fue de 3,3 miles de millones de metros cúbicos.
La crisis de los precios internacionales cada vez parece menos válida para explicar la desinversión y la caída de los ritmos productivos; especialmente si tiene en cuenta que el WTI cerró en diciembre pasado a 58 dólares y que el promedio anual de 2017 fue casi un 18% mayor al de 2016, habiendo pasado de 43,2 dólares por barril a los 50,9 dólares del año pasado.
La retracción productiva en el terreno petrolero generó adicionalmente problemas en las recaudaciones por regalías en las provincias productoras y obligará a los gobiernos provinciales a ajustar sus números de ingresos vinculados a la producción de crudo.
La Cuenca Neuquina tuvo una baja del 5% en la extracción de petróleo y su descenso se reflejó en los 3,8 millones de barriles que dejaron de producirse a pesar del impulso y las inversiones centralizadas en los recursos no convencionales de Vaca Muerta.
En cuanto a la producción gasífera, la Cuenca Neuquina tuvo una reducción del 3,9% pero la Cuenca Austral descendió su extracción en un 14,7%; sin que los abultados subsidios estatales al gas en boca de pozo pueda revertir una tendencia decreciente que se extiende en el tiempo.
En tanto que YPF, la mayor petrolera en el país, subió su producción de gas nacional en un 6,8%; pero la francesa Total Austral las bajó un 18,2% y PAE hizo lo propio con una merma del 4,6%.