El Gobierno ordenó profundizar la reducción del suministro de gas a grandes y medianas industrias al menos hasta el lunes, porque un error de cálculo sobre la evolución del consumo de los hogares y las bajas temperaturas registradas en los últimos días pusieron al sistema gasífero al límite de su capacidad de abastecimiento
El Ente Nacional Regulador del Gas (Enargas) se reunió ayer con las transportadoras TGN y TGS para analizar la situación y concluyeron que el volumen de gas cayó abruptamente en dos días porque se está consumiendo más de lo que ingresa a la red nacional a través de los yacimientos, lo que se importa por barco y lo que proviene desde Bolivia.
El nivel mínimo de gas recomendable en los caños de gas de TGS es de 198 millones de metros cúbicos y el máximo de 218, pero ayer el volumen se ubicó en 192 millones de metros cúbicos.
Eso generó problemas de presión en el suministro en las localidades alejadas de la “puerta de entrada” del gas.
La inyección total de ayer alcanzó los 122 millones de metros cúbicos y el faltante para entregar el suministro con presión normal fue de 12 millones de metros cúbicos. Del total suministrado, 6,8 millones provinieron de Bolivia; 9,9 del GNL para regasificar del buque instalado frente a las costas de Bahía Blanca y 106 millones de metros cúbicos de producción local, según detalló el diario Ambito Financiero.
Con esos datos, el Enargas decidió aumentar las restricciones en el suministro de gas a empresas, que habían comenzado el lunes.
La medida afectó entre otras compañías a Cerri, una terminal que produce gas para garrafas y cilindros. La empresa tiene capacidad para procesar cinco millones de metros cúbicos diarios pero ayer sólo recibió 800.000 metros cúbicos. Pero en el sector aseguraron que no faltarán garrafas a menos que se extiendan las bajas temperaturas.
También impactó en las generadoras metropolitanas Costanera, Puerto y Dock Sud, que tuvieron que operar con combustibles líquidos.
Las empresas ya habían sufrido cortes o reducciones en el suministro de gas en julio y agosto, y en muchos casos ayer recibieron el mínimo técnico que les permite mantener los hornos encendidos y retomar la producción rápidamente cuando se normalice la situación.
Además, el retorno de las bajas temperaturas provocó ayer que el consumo de energía superara los 19.000 megavatios, por lo que se importaron 980 megavatios desde Brasil. Pero el consumo de energía estaría afectando el nivel de las represas hidroeléctricas del Comahue, que se encuentran por debajo del máximo normal.
MDZ Online