En el marco del seminario “Petróleo, Conferencia Federal” organizado en el Senado, el senador salteño aseguró que la ley propuesta por el Gobierno nacional dejará “todos los beneficios para la Nación y nada para las provincias”. Y lamentó que no haya resistencia por parte de los gobiernos provinciales.
El vicepresidente segundo de la Cámara alta, senador Juan Carlos Romero, afirmó que de aprobarse la ley de Hidrocarburos, próxima a tratarse en el Congreso, “la Argentina se convertirá en una sola jurisdicción, como un emirato”. De este modo, aseguró que se perderá “la diversidad federal, geográfica e ideológica” del país. El senador se refirió en estos términos en el Seminario “Petróleo, Conferencia Federal”, que organizó junto al legislador Adolfo Rodríguez Saá, en el Salón Illia, del Senado.
“Pensamos que (el proyecto de ley del oficialismo) iba a tener más resistencia por parte de los gobernadores, pero hoy nos queda el debate parlamentario como forma de poner racionalidad”, señaló Romero. En esa línea, Romero, quien ya adelantó su voto en contrario, sostuvo que “todos los beneficios quedarán para la Nación; nada para las provincias”.
Romero explicó que la iniciativa “fija un límite a los ingresos de las provincias, con un máximo de 3 por ciento en ingresos brutos, 12 por ciento en regalías, sellos solo para unos casos específicos, prohibición de reservar áreas y de asociarse con los inversores, entre otros limitantes.
“Este Gobierno ha sido el que ha generado en esta última década la pérdida del abastecimiento. Provincias como la mía, Salta, han visto recortada su producción. Por ejemplo, se recibe un gas de Bolivia, que se paga cinco veces más”, sostuvo el también candidato a gobernador por Salta. Y agregó: “Esta ley viene a querer tapar un problema que nos trajo ese desabastecimiento cuando vemos que los países vecinos están creciendo”.
En esa línea, señaló: “Esta ley no es un camino de superación, es la muestra de un fracaso, es un intento final de este Gobierno por reconstruir la confianza que ha venido perdiendo. Hace más de 15 años que en Argentina no hay inversión seria en petróleo”.
A su turno, los ex secretarios de Energía, Daniel Montamat y Jorge Lapeña señalaron su oposición a la iniciativa oficial. Montamat consideró que “hace falta una nueva ley de hidrocarburos, pero no este proyecto”. Además, definió a la propuesta del Gobierno como “un parche a una vieja ley que no va a solucionar el desabastecimiento”.
Por su parte, Lapeña aseveró: “No creo que este proyecto sea la ley que necesita el país, ya que no formula una propuesta para el futuro”.
En línea con las palabras de Romero, el titular del Sindicato Unido Petroleros e Hidrocarburíferos (SUPeH), Antonio Cassia, afirmó que “las provincias tienen todo el derecho de exigir lo que están exigiendo”, y agregó que “es necesario renovar todas las instalaciones en todos los yacimientos del país”.
Por su parte, Oscar Suárez, ex integrante de la Organización Federal de Estados productores de Hidrocarburos (OFEPHI), expresó: “Vemos que hay un avance muy grande hacia las autonomías provinciales”.
Entre los oradores participaron también los senadores Graciela Di Perna (Chubut) y Carlos Verna (PJ – La Pampa) y el radical Alfredo Martínez (UCR – Santa Cruz) .El vicepresidente segundo de la Cámara alta, senador Juan Carlos Romero, afirmó que de aprobarse la ley de Hidrocarburos, próxima a tratarse en el Congreso, “la Argentina se convertirá en una sola jurisdicción, como un emirato”. De este modo, aseguró que se perderá “la diversidad federal, geográfica e ideológica” del país. El senador se refirió en estos términos en el Seminario “Petróleo, Conferencia Federal”, que organizó junto al legislador Adolfo Rodríguez Saá, en el Salón Illia, del Senado.
“Pensamos que (el proyecto de ley del oficialismo) iba a tener más resistencia por parte de los gobernadores, pero hoy nos queda el debate parlamentario como forma de poner racionalidad”, señaló Romero. En esa línea, Romero, quien ya adelantó su voto en contrario, sostuvo que “todos los beneficios quedarán para la Nación; nada para las provincias”.
Romero explicó que la iniciativa “fija un límite a los ingresos de las provincias, con un máximo de 3 por ciento en ingresos brutos, 12 por ciento en regalías, sellos solo para unos casos específicos, prohibición de reservar áreas y de asociarse con los inversores, entre otros limitantes.
“Este Gobierno ha sido el que ha generado en esta última década la pérdida del abastecimiento. Provincias como la mía, Salta, han visto recortada su producción. Por ejemplo, se recibe un gas de Bolivia, que se paga cinco veces más”, sostuvo el también candidato a gobernador por Salta. Y agregó: “Esta ley viene a querer tapar un problema que nos trajo ese desabastecimiento cuando vemos que los países vecinos están creciendo”.
En esa línea, señaló: “Esta ley no es un camino de superación, es la muestra de un fracaso, es un intento final de este Gobierno por reconstruir la confianza que ha venido perdiendo. Hace más de 15 años que en Argentina no hay inversión seria en petróleo”.
A su turno, los ex secretarios de Energía, Daniel Montamat y Jorge Lapeña señalaron su oposición a la iniciativa oficial. Montamat consideró que “hace falta una nueva ley de hidrocarburos, pero no este proyecto”. Además, definió a la propuesta del Gobierno como “un parche a una vieja ley que no va a solucionar el desabastecimiento”.
Por su parte, Lapeña aseveró: “No creo que este proyecto sea la ley que necesita el país, ya que no formula una propuesta para el futuro”.
En línea con las palabras de Romero, el titular del Sindicato Unido Petroleros e Hidrocarburíferos (SUPeH), Antonio Cassia, afirmó que “las provincias tienen todo el derecho de exigir lo que están exigiendo”, y agregó que “es necesario renovar todas las instalaciones en todos los yacimientos del país”.
Por su parte, Oscar Suárez, ex integrante de la Organización Federal de Estados productores de Hidrocarburos (OFEPHI), expresó: “Vemos que hay un avance muy grande hacia las autonomías provinciales”.
Entre los oradores participaron también los senadores Graciela Di Perna (Chubut) y Carlos Verna (PJ – La Pampa) y el radical Alfredo Martínez (UCR – Santa Cruz) .