Por Lucas Chiappe (*).-Mientras en todo el mundo se celebra el “XIII Día Mundial contra las Represas”, en latinoamérica la fiebre energética estimulada por las corporaciones trasnacionales (mineras, pasteras, productoras de aluminio, petroleras y demás ) sigue fomentando un fenómeno que vemos crecer día a día de una manera atemorizante y sin ningún tipo de consideraciones ambientales o sociales…
El furor por represar ríos para generar electricidad tuvo su auge en los años 70: durante esa década se construyeron 5400 diques por año de promedio en todo el mundo. El saldo es que hoy más de la mitad de los ríos del planeta están represados y alrededor de 80 millones de personas han sido desplazadas de sus tierras. Sin embargo y a pesar de todas las evidencias que han demostrado el enorme impacto ambiental y social, el escaso tiempo de vida útil de las mismas, y el enorme riesgo que implican, hoy estos faraónicos proyectos anti-natura vuelven a florecer alrededor del globo, como hongos luego de una lluvia.
Alcanza con hojear cualquier nota o resumen sobre los objetivos del Mercosur o los planes que preveen los “iluminados” que pretenden imponer por la razón, el engaño o la fuerza el nefasto proyecto IIRSA a lo largo y ancho de Latinoamérica, para darse cuenta del alcance de estos mega-delirios basados en una concepción política, económica y social absolutamente antigua, insustentable y con consecuencias ambientales suicidas en el corto y mediano plazo.
Prácticamente todos los ríos caudalosos de nuestro continente están hoy amenazados por faraónicos proyectos salidos de la galera de estos conglomerados de comerciantes sin bandera y sin escrúpulos, que se encuentran entre las empresas más contaminantes que existen, persiguiendo el mismo fin: Despojarnos de nuestras riquezas, utilizar estos fértiles territorios para los extensos monocultivos que siguen fogoneándo el altísimo consumo y despilfarro de los países del hemisferio norte y aprovechar la corrupción generalizada (sumado a la falta de leyes eficaces y/o conciencia ambiental), para manufacturar los productos más tóxicos lejos del Hemisferio Norte…
Claro que no hace falta ser un genio para comprender una ecuación muy sencillita: Hoy todos los paises del mundo son gobernados por corporaciones trasnacionales comandadas por entidades anónimas… sin ningún código ético ni escrúpulos percibibles. Su único propósito es generar dividendos sin importar el método utilizado, y sin percibir sanciones adecuadas al ecocidio que provocan sus “proyectos productivos”, ya que los únicos que podrían aplicarlas (nuestros patéticos gobiernos nacionales), se han trasformado hace rato en sus subordinados, sus gerentes o en todo caso sus socios minoritarios…
Lo expresa claramente el analista Paul Moore en uno de sus artículos más recientes: La democracia ha muerto, ¡viva la “corporatocracia”!: – Es que las corporaciones son, por supuesto, diferentes del pueblo. Carecen de emociones humanas. Por su propia naturaleza son incapaces de generar empatía. No sienten nada si el pueblo sufre explotación, si el pueblo vive en la miseria o si el pueblo muere horriblemente…
Como bien sabemos a Union Carbide no le afectaron las miles de personas que murieron y que siguen muriendo en Bhopal… Únicamente registró en la hoja de balance 470 millones de dólares de pérdidas dedicados a la futura viabilidad corporativa bajo un nuevo nombre, Dow Chemical.
Por otra parte cuando señalo a sus gerentes menores, me refiero a los distintos gobernantes, presidentes, ministros, diputados, senadores y a toda la sarta de dis-funcionarios públicos provinciales y municipales, “abroquelados por el espanto” en la corporación política, sin importar cual sea su ideología o las plataformas que agitan desde los estrados: “Es la economía estúpido” gritaba Elvis Clinton entre fiestas y fellatios desde la Casa Blanca… “Es la economía” repiten como loros descerebrados el resto de los titeres de norte a sur… con una ceguera alarmante ante la emergencia ambiental que vive el planeta al borde del abismo y sin detenerse un sólo momento a considerar hacia adonde nos lleva esta salvaje asalto de los escasos bienes naturales que nos quedan incólumes y que deberían garantizar la subsistencia de las generaciones futuras…
Gobernantes apabullados por la codicia del poder que utilizan el sálvese quien pueda para destruir la biodiversidad de nuestro entorno a una velocidad imposible de igualar por la regeneración que permite, ya no al ser humano, sino a todo el planeta seguir sustentando la vida en el mismo.
Gobernantes que supuestamente deberían administrar las escasas o abundantes riquezas que posee cada rincón de sus biorrregiones para el interés colectivo de las personas que, cada tantos años, los colocan al mando de las naves sin preguntar siquiera si tienen un carnet de timonel que nos garantice si saben manejar un barco en alta mar…
Sin embargo bien sabemos por experiencia acumulada que ese acto de democracia republicana se ha trasformado con el tiempo en una especie de farsa grotesca en la cual millones de seres eligen entre tal o cual personero que pone la cara, el cuerpo o el carisma si lo posee , sabiendo que ese señor o señora es bancado y moldeado por un determinado pool empresarial, que son en definitiva quienes invierten en su “figura” una cantidad de dinero para mejorar la imagen que deberá seducir a los electores y, en caso de triunfar, será monitoreado de cerca para que cumpla hasta las últimas consecuencias el pacto firmado entre bambalinas… sin olvidar el rol de vocero de las corporaciones para el cual fue entrenado.
Pero ustedes se preguntarán ¿porqué me detuve tanto tiempo en defenestar a los gobernantes de turno, cuando esta nota se suponía que estaba dedicada al tema de las represas?… Sencillito: porque si no comprendemos quienes están atrás de esta especie de fiebre hidroeléctrica, no lograremos entender adonde está “la madre del borrego”… ya que, al son del mito del crecimiento y el desarrollo, se esconde una espesa cortina de humo que logra confundir la necesidad de energía para abastecer la creciente población mundial, con los verdaderos intereses que subyacen atrás de los fantasmas del desabastecimiento energético.
Y aquí una vez más lamento comunicarles que el juego es exactamente el mismo de siempre: Corporación minera, pastera, fabricante de aluminio, petrolera o póngale usted el nombre, busca territorio, agua, riquezas y energía barata para establecer las cabezas de puentes que les permitan seguir el saqueo con el mínimo gasto o inversión posible a fin de optimizar las ganancias… Ergo:
Primero prepara el terreno a través de un minucioso plan estatégico que tiene que contar indefectiblemente con la anuencia de los gobiernos pseudo-democráticos que logramos conseguir, para garantizarles la seguridad jurídica del despojo: Léase conseguir a través del soborno o métodos afines, que los poderes ejecutivo y legislativo comprendan las necesidades de la empresas para “invertir” (¿invertir?) en estos paisuchos de morondanga ya que de no ser por ellos serán condenados a subsistir en la pobreza… En consecuencia serán ellos quienes decidan si hace falta cambiar o modificar las leyes a gusto y piacere, para iniciar las conversaciones y acuerdos subsiguientes (Ej: código minero Fujimori-Menem, subsidios del 100%a los monocultivos forestales, exenciones impositivas de todo tipo y color etc.)
Luego anunciarán con bombos y platillos gigantescos gastos estatales para proveer de energía barata a estas nobles empresas que entonces sí se dignarán a desembarcar en estos territorios olvidados por la historia…
Sin importar que para eso haya que aumentar vertiginosamente el endeudamiento con los distintos pulpos financieros, llámense BID, FMI u otro… que para guardar las apariencias exigirán cuantiosos estudios de impacto ambiental diseñados por consultoras amigas y finalmente se fregaran las manos de satisfacción con los resultados siempre condescendientes y favorables al proyecto de marras… logrando disuadir con esos visos “legales”, cualquier tipo de autodeterminación de los pueblos que puedan amenazar sus ilícitas ganancias futuras.
Todo esto contando por supuesto con la invalorable ayuda de los medios masivos de comunicación afines u opositores al gobierno de turno (aquí también no importa la línea editorial ya que también se derramarán unas monedas para aceitar el mecanismo y obtener que el discurso de todos los periodistas chupamedias o independientes, abreve de la misma fuente: supuesta escasez energética, supuesta inversión de las corporaciones, supuesto beneficio económico y social para las masas de votantes.
En resumen la música de siempre con distinta partitura: el imperio se trasforma en corporación, el regimen militar que impone, se trasforma en democracia que debate y se inclina por una solución consensuada… mientras los resultados son los mismos, saqueo y contaminación ambiental creciente, endeudamiento y pobreza, sumisión y aceptación de un destino aparentemente imposible de cambiar…
Para concluir sobrevolemos un cachito de historia reciente y veamos algunos datos concretos y actuales para redondear el planteo:
Comenzando por un ejemplo cercano en el tiempo y en el espacio cordillerano vale la pena recordar que prácticamente toda la energía que produce la gigantesca central hidroeléctrica de Futaleufu abastece a una sola empresa: Aluar (fabricación de Aluminio)… y que para construir ese gigantesco embalse hubo que desaparecer miles de has. del Parque Nacional Los Alerces (Amutui Quimey: belleza perdida), que era catalogado como uno de los 10 Parques Nacionales más hermosos y bien conservados del mundo…
Debido al “apuro” por poner en marcha Aluar (se acercaba otra apertura seudo-democrática en el régimen dictatorial que gobernaba una vez más este país devastado por la corrupción) el Estado se hizo cargo de construir el embalse (hasta su eventual privatización), dejando bajo agua más de 10 mil Has de bosque nativo virgen (lo que mordazmente se dió en llamar: el bosque sub-acuatico más extenso del mundo)…
Repito un detalle: en cambio de extraer y aprovechar esa masa impresionante de bienes naturales (10.000 Has de bosques templados significa un montón de madera de Cipres-Coihue-incluso Alerce-Tineo de primera calidad con la que podrían haber trabajado decenas de aserraderos durante décadas), los muchachos de uniforme verde oliva y sus socios empresarios decidieron hacerla corta y concentrarse exclusivamente en el negociado de la planta de aluminio y como de costumbre, endilgarle las consecuencias de su ecocidio a quienes los sucedieran… y como si esto fuera poco, fue nuevamente el Estado, invocando necesidades imperiosas y estratégicas, quien además se hizo cargo del costosísimo tendido de más de 800 Kms de torres y cables de alta tensión, para proveer de energía barata a esta empresa…
Empresa que hoy figura (con la reciente duplicación de la planta” de Puerto Madryn) como un ejemplo del “buen” empresariado vernáculo… Mientras sus dueños siguen flirteando con el matrimonio presidencial, para la eventual instalación de otra planta de igual porte… también en la costa patagónica, pero esta vez en la provincia originaria de los mandatarios santacruceños…
Eso sí para que esto ocurra “vamos a necesitar” que el Estado vuelva a dar via libre al recontra faraónico proyecto hidroeléctrico La Barrancosa-La Leona sobre el río más caudaloso de la Patagonia Argentina, ya apodado ” Yaciretá Dos” o “El próximo imperio de la corrupción” como el innombrable Carlos Saul llegó a apodar a la represa argentino paraguaya.
Justamente anteayer, 12 de Marzo, en el acto de apertura del cuestionadísimo “Interconectado Truncado-Río Turbio”, el mandatario provincial santacruceño y la presidenta Cristina Fernandez dijeron lo suyo: “-Aluar y la nueva Planta de Fertilizantes se asentarán en Santa Cruz, provincia para la cual se prevé un futuro promisorio en materia industrial (Minería, Petroleo etc.)!!!
Sin embargo (resalta el mismo despacho de la agencia de noticias “OPI”)… existe una notable contradicción entre los proyectos que se piensan desarrollar y la escasa cantidad de energía que prevén utilizar para el consumo interno de Santa Cruz.
Para cerrar una última reflexión: La materia prima que abastece Aluar es transportada en barco desde Australia lo cuál da pié a otra incómodo pregunta ¿Pero entonces porqué no instalan esa industria allá?…
La misma pregunta que se hacen mis colegas de la Campaña “Patagonia sin Represas” en Chile , donde la mayor empresa de alumino del planeta, Noranda, hace rato viene aceitando el lobby para instalarse en las costas de Aysen… ¿Dije Aysen?… Pero ¿No era en esa región en donde ultimamente se habla de construir una serie de represas (entre 4 y 19)?… que deberían abastecer de energía, según el verso oficial, a la población de Santiago y el resto de las ciudades de Chile que están sufriendo las consecuencias de una supesta crisis energética causada por el incremento del bienestar económico de la población?
Ups… aquí hay algo que no cierra manito… O mejor dicho hay algo que NO cierra para el futuro de la Patagonia, de Sudamérica y del Planeta…
Pero convengamos que cierra fenómeno para el presente de las corporaciones de la rapiña…
Rapiña ra-piñera ¿qué futuro nos espera?
El 40 % de la energía que se produce en Chile es utilizada exclusivamente para el sector minero…
El 80 % de la energía que produce Atucha II se utiliza para alimentar la explotación minera de Veladero…
La fabricación de sólo 5 materiales significan el consumo del 31 % de la energía que se produce en EEUU: Papel-Aluminio-Acero-Plástico y Vidrio…
De acuerdo al estudio de Expansiva-UDP: Chile es uno de los países de la OCDE con menor consumo eléctrico por habitante.
“POR UNA PATAGONIA SIN REPRESAS”
14 DE MARZO DE 2010
(*)Coordinador del Proyecto Lemu (Epuyen-Chubut). El título de esta nota se refiere a la primera vez que escribí una carta a los medios y que fue publicada por el Diaro Esquel en 1981, al comienzo de la primera movilización ambiental y social en contra del Proyecto Hidroeléctrico Epuyen-Puelo… Disparate suspendido por el Gobierno Provincial del Chubut en Octubre de 1986, luego de 5 años de eco-activismo por parte de “La Comisión de Defensa del Valle de Epuyen”, que tuve el honor de integrar desde su fundación.
Proyecto Lemu