Su objetivo es encontrar una salida que ponga fin a la presión oficial sobre YPF, pero ayer reivindicó el plan de inversiones cuestionado por el Gobierno. En Planificación afirmaron que no recibieron ningún pedido de reunión
El titular de Repsol, Antonio Brufau, arribó ayer al país e informó que formalizó un pedido de audiencia con autoridades del Gobierno. Su objetivo es negociar una salida que ponga fin a la presión oficial sobre la petrolera YPF, donde los españoles tienen el 57,4 por ciento, pero en un comunicado difundido ayer reivindicó una vez más el plan de inversiones de la filial, que es considerado insuficiente por el Gobierno. El ministro de Planificación, Julio De Vido, se reunirá hoy con directivos de Petrobras (ver aparte), pero desde esa cartera aseguraron que no recibieron ningún pedido de audiencia de Brufau. La acción de YPF cayó 2 por ciento en la Bolsa de Buenos Aires, pero subió 0,7 por ciento en Wall Street.
A diferencia de lo ocurrido en sus viajes anteriores, en esta ocasión el ejecutivo de Repsol hizo público el pedido de audiencia a través de un comunicado. Allí afirma que formalizó la solicitud para reunirse con “las autoridades”, sin identificar cuáles. Las últimas veces se entrevistó con el ministro De Vido y con su par de Economía, Hernán Lorenzino. Además, también trató de hacer lo propio con Cristina Fernández de Kirchner, pero sin suerte.
En el texto difundido ayer, Brufau reivindicó el plan de inversiones de YPF: “YPF reitera su vocación de contribuir al desarrollo del país mediante la continuidad de su Programa de Desarrollo Exploratorio y Productivo 2010-14 y a través de la concreción de las inversiones más importantes que esta compañía realizó en su historia, con una previsión de 15.000 millones de pesos para este año, compromiso que supera los más de 13.300 millones de pesos invertidos durante 2011”.
Ese plan se ha convertido en parte central de la disputa. El Gobierno viene exigiéndole a YPF desde enero que incremente las inversiones en el país para aumentar su producción, pero hasta el momento no logró que la petrolera dé el brazo a torcer en ese punto. El lunes 6 de febrero, Brufau tuvo una primera reunión con De Vido y Lorenzino, donde se discutieron las inversiones. Allí Brufau detalló que en 2011 desembolsaron 13.300 millones y ratificó el plan para 2012. Luego difundió esas cifras públicamente, generando malestar en el Gobierno, pues en el encuentro le habían dicho que eso era insuficiente.
El martes 28 de febrero, Brufau volvió a reunirse con De Vido y Lorenzino. En esa ocasión participó también el ministro de Industria de España, José Manuel Soria, quien viajó especialmente a Buenos Aires ante los rumores de una inminente estatización, pero en aquella ocasión tampoco hubo avances. La última vez que funcionarios del Gobierno se encontraron con Brufau fue en la reunión de directorio de YPF del último 21 de marzo. Allí la empresa anunció que no repartiría dividendos y capitalizaría la compañía, pero se negó a conformar un fondo específico para destinar a inversiones y ratificó, una vez más, el plan ya conocido. El Gobierno rechazó la oferta y el conflicto siguió abierto.
La falta de respuesta de la empresa llevó al Gobierno a incrementar la presión en coordinación con las provincias. Desde entonces, seis gobiernos provinciales anunciaron la reversión de 13 áreas petroleras y Chubut y Santa Cruz están cerca de oficializar la anulación de otra serie de contratos, lo que elevaría las pérdidas de la petrolera al 27,7 por ciento de su producción nacional de petróleo. De hecho, el presidente del Instituto de Energía de Santa Cruz, Juan Antonio Ferreiro, se mostró escéptico con la posibilidad de que la petrolera YPF presente un plan que permita evitar la caducidad de las áreas Cañadón Vasco, Pico Truncado-El Cordón y Los Perales. “Sería extraño que decidan venir a poner todo lo que no pusieron cuando tenían la oportunidad. Es prácticamente imposible”, afirmó.
Página/12
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YPF formalizó un pedido de audiencia con el Gobierno
Antonio Brufau se encuentra en Buenos Aires aguardando una respuesta de la Casa Rosada
El presidente de YPF, Antonio Brufau, formalizó este lunes un pedido de audiencia formal con las autoridades del Gobierno nacional “con el objetivo de continuar el diálogo”, según informó un escueto comunicado de la petrolera.
A través de la misiva, la empresa afirma que busca “contribuir con el desarrollo del país” a través de su Programa de Desarrollo Exploratorio y Productivo 2010-2014. YPF informó que para este año tiene una previsión de inversión de $15.000 millones, que se sitúa $2000 millones por encima de la cifra invertida el año pasado.
Las acciones de la empresa perdieron hoy 2% en la Bolsa de Buenos Aires, en su primera jornada de cotización tras que el Gobierno de Santa Cruz advirtiera que retiraría la concesión en el área Los Perales, que representa el 8% de la producción nacional de crudo.
Desde el inicio de la tensión con la Casa Rosada, quien le reclama aumentar sus inversiones en exploración y producción, unos seis estados provinciales petroleros le quitaron 14 áreas concesionadas.
Fuera de los encuentros del directorio, el Gobierno argentino no ha mantenido ninguna reunión con directivos de Repsol o de YPF desde que comenzó a exigirle un aumento en las inversiones en exploración y producción de hidrocarburos a inicios del año.
Argentina está realizando millonarias importaciones energéticas para alimentar a una economía que crece a altas tasas mientras sus reservas de crudo y gas natural languidecen.
Inversores temen que el Gobierno busque controlar al que es el mayor grupo energético del país a través de una expropiación o la compra de una participación.
Recientemente, varias provincias petroleras le retiraron a YPF varias concesiones por supuestamente no realizar inversiones comprometidas.
Repsol tiene el 57,4% de YPF y el Grupo Petersen, de la familia Eskenazi, controla un 25,4%.
La Nación