Primas para las energías renovables a coste cero de los consumidores

Informe del Observatorio Crítico de la Energía
En los últimos años hemos vivido un proceso de privatización del sistema eléctrico en España que nos ha quitado la soberanía ciudadana en temas de energía, perdiendo totalmente la capacidad de decidir cómo se genera la electricidad y cuánto debemos pagar por ella. El resultado de este proceso de privatización es el Mercado Ibérico de Electricidad que tenemos ahora mismo: un mercado oligopólico que vierte ingentes beneficios injustificados sobre unas pocas grandes empresas verticalmente integradas. En este marco de mercado libre, el precio resulta además encarecido por mercados de futuros como las subastas CESUR que nada aportan a la economía real. Los poderes públicos, incapaces ya de actuar sobre la fijación de precios, sólo pueden evitar que los consumidores paguemos más hoy trasladando el pago a futuros consumidores mediante el déficit de tarifa, cuya suma asciende ya a más de 24.000 millones de euros. En definitiva, el mercado de electricidad en España no funciona, o mejor dicho, funciona intencionadamente para el beneficio de unos pocos, como ya denunciamos en el anterior informe de El Observatorio Crítico de la Energía Entiende el mercado eléctrico.
Además de ser complejo y extremadamente opaco, el mercado eléctrico sirve de escenario para que los grandes intereses económicos difundan sus ideas, algunas de ellas mitos que resultan no ser ciertos bajo un análisis detallado. El objetivo de este trabajo es el de desmigajar una de estas ideas: la de que las renovables son tan caras que no podemos permitírnoslas. Las energías renovables reciben unas primas para su desarrollo que los consumidores pagamos en la componente regulada de la tarifa eléctrica, esta es la parte que nos cuentan. Pero, al mismo tiempo, las energías renovables disminuyen el precio de casación al que se retribuyen todas las energías casadas en el mercado. Como consecuencia, se produce una rebaja de la componente de mercado de la tarifa eléctrica y es, obviamente, la parte que no nos cuentan. La pregunta ahora parece clara ¿cuál de los dos efectos es más importante? o, yendo un paso más allá, ¿cuál es el nivel de primas que pueden recibir las nuevas instalaciones renovables únicamente a partir del ahorro que producen, de modo que supongan un coste cero para los consumidores?
Este trabajo responde a esta pregunta y estima, a partir de datos del 2010, un valor de primas de entre 58.4 y 75.3 ¿/Moho que pueden recibir las nuevas instalaciones renovables sin que suponga un sobre coste para los consumidores. Si se compara con las primas recibidas por la energía eólica en los últimos años se observa cómo este valor es incluso superior al rango de primas recibido por esta energía según establecían los diferentes reales decretos. Es decir, la energía eólica no nos habría costado nada a los consumidores. Por supuesto, el valor de primas calculado mediante este procedimiento es sólo un mínimo sobre el que empezar a decidir el valor que queremos pagar. Sobre este mínimo habría que añadir además los beneficios económicos inherentes a las renovables y que no están internalizados en su retribución como son el ahorro producido por las emisiones de gases de efecto invernadero evitadas, el ahorro producido por los combustibles fósiles no importados y el aumento de la soberanía energética de nuestro país.
En definitiva, las energías renovables suponen importantes ventajas para los consumidores, no sólo ambientales y sociales sino también económicas. Desde El Observatorio Crítico de la Energía pensamos que esta reflexión representa una baza para apoyar un marco justo que permita a todos los ciudadanos ser partícipes de la generación renovable y distribuida que ponga fin a la histórica e injusta situación de oligopólico. Pongamos por tanto todas las cartas sobre la mesa y evitemos la demagogia. Informémonos y recuperemos el rigor antes de tomar decisiones que son importantes para que nuestro desarrollo pueda llegar a ser sostenible económica, ecológica y socialmente. Este trabajo pretende contribuir a ello.
 
Link al informe completo: Observatorio Crítico de la Energía