En su primera sesión, el nuevo Directorio de Petroperú, ahora presidido por Héctor Reyes Cruz, aprobó el proceso de transferencia del Lote 64 –que controlaba la canadiense Talisman– a la petrolera estatal.
Ese hecho se frustró un día antes, tras revelarse la aceptación del gobierno a la renuncia de Humberto Campodónico a la presidencia de la estatal, junto a otros hoy ex directores. Con ello se concreta uno de los principales logros de la gestión del ex titular de Petroperú Humberto Campodónico, quien negoció exitosamente, junto a su equipo, la entrega de ese lote de producción. Es de gran importancia la recuperación del Lote 64 porque el Estado retomará las actividades de explotación de hidrocarburos.
En las siguientes horas el anuncio oficial será dado por el Ejecutivo, por tratarse de un hecho histórico para la petrolera estatal y para el país. Ubicado en la cuenca del río Marañón, el Lote 64 tiene reservas probadas de 42 millones de barriles de petróleo, en un lugar donde Talisman invirtió unos US$ 500 millones.
DISCREPANCIAS
En tanto, durante el día de ayer y ante el silencio de Campodónico y el mismo ministerio se tejieron diversas conjeturas de ese alejamiento. Según Jaime Quijandría, ex ministro del sector, la renuncia de Campodónico se habría debido a que junto al ministro Merino “no eran parte de un equipo que trabajaban juntos”. Una de las señales de ese distanciamiento era que Petroperú había sido dejado de lado en el caso del Gasoducto Sur Peruano, pues en las últimas etapas no participaba en las negociaciones, dijo Quijandría.
Si Petroperú iba a ser parte de una Asociación Público Privada, no se entiende cómo no participaba en el equipo que preparaba esta obra importante, que además comprende la instalación de un polo petroquímico, indicó Quijandría. Debe precisarse que la empresa estatal participará en el polo petroquímico, y para ello el Ejecutivo deberá entregar US$ 400 millones. Al nuevo directorio le toca continuar la modernización de la refinería Talara, cuyo costo se elevó de US$ 1.700 millones a US$ 3.450 millones. La tarea principal de esa obra será la de aminorar el contenido de azufre en las gasolinas que refina.
CLAVES
Tarea pendiente del directorio será apuntalar a Petroperú como socio para explotar petróleo de los lotes cuyos contratos están por vencer. Otro reto será colocar una porción de acciones de la estatal en la BVL. La gestión Campodónico logró que la BVL incluya a Petroperú en el Índice de Buen Gobierno Corporativo.
Petrolnews