La petrolera argentina YPF dijo el lunes que el alto coste de los equipos la podría obligar a reducir su ambicioso plan de perforación este año en Vaca Muerta, una gigantesca formación de hidrocarburos no convencionales bajo el foco de los inversores internacionales.
Por Karina Grazina y Alejandro Lifschitz.- El presidente de la petrolera, Miguel Galuccio, explicó que, si la compañía no consigue la cantidad de equipos de perforación que necesita a un precio razonable y una mano de obra adecuada, va ajustar los objetivos de desarrollo del megayacimiento patagónico.
YPF, que fue nacionalizada en mayo pasado en un intento del Gobierno por revertir el derrumbe de la producción y reservas de hidrocarburos en el país, prevé realizar este año un piloto con 132 pozos de crudo en Vaca Muerta que demandará una inversión de 1.360 millones de dólares.
La formación está bajo la atención de los inversores internacionales porque podría albergar unas de las reservas de hidrocarburos no convencionales más grandes del mundo. YPF tiene adjudicado un 40 por ciento del campo.
“Yo no descarto que el 2013, para nosotros, va a ser un año de dolor desde el punto de vista de conseguir el equipamiento, desde el punto de vista de tener la gente (…) Pero lo bueno lo justifica, cuando uno está creciendo es un dolor que tiene con gusto”, dijo Galuccio en una conferencia de prensa tras el anuncio de los resultados financieros por el 2012.
“Cuánto de ese plan hacemos, si hacemos 80, 90, 120 (perforaciones) hoy no te lo podría decir”, agregó a una pregunta sobre la viabilidad del piloto.
YPF está tratando de cerrar un acuerdo con la petrolera Chevron para asociarse en el desarrollo de Vaca Muerta. Pero las conversaciones avanzan lentamente por un embargo contra el grupo estadounidense en Argentina debido a una causa judicial por contaminación en Ecuador.
La compañía argentina está a la caza de inversiones privadas por 4.500 millones de dólares para financiar parte de los 32.600 millones de dólares que necesita en los próximos cinco años para levantar su alicaída producción de hidrocarburos.
La realización del proyecto es clave para la estrategia de YPF de empezar a generar un flujo de caja que le permita financiar la mayor parte de su plan de inversiones con recursos propios.
La compañía tiene restringido el acceso a los mercados financieros internacionales por la poca confianza que genera Argentina tras la masiva suspensión de pagos del 2001/2002. La nacionalización sin compensación de un 51 por ciento en YPF en manos del grupo español Repsol también aumentó el malhumor de los inversores con el país.
UTILIDADES EN ALZA
El beneficio neto de YPF creció en el cuarto trimestre del año pasado por encima de las previsiones del mercado, empujado por un aumento en las ventas e ingresos extraordinarios que neutralizaron un alza en los costos.
El resultado de la empresa alcanzó los 1.019 millones de pesos (207,1 millones de dólares) en los últimos tres meses del 2012, un 90,5 por ciento superior al mismo período del año previo y por encima de los 784 millones de pesos esperados por analistas consultados por Reuters.
Los ingresos de YPF crecieron un 26,5 por ciento en el cuarto trimestre, gracias a mejores precios locales del crudo que beneficiaron a sus negocios de exploración y producción, pero que redujeron sus márgenes por ventas de combustibles ante el encarecimiento de la materia prima.
Los beneficios también se vieron apuntalados por ingresos extraordinarios debidos a una reversión de créditos relacionados con un programa estatal para incentivar la producción de hidrocarburos y por saldos a favor tras la renegociación de algunas concesiones.
Galuccio dijo que YPF planea aumentar un 60 por ciento sus inversiones en el 2013 contra el 2012, cuando se destinaron 16.485 millones de pesos a bienes de uso.
También explicó que los costes de la compañía, un motivo de preocupación del mercado, estarán este año en línea con lo planeado si no hay nuevas negociaciones salariales. La alta inflación en el país ha disparado el nivel de gasto de personal de las empresas.
En todo el año pasado, los beneficios de YPF cayeron un 12,2 por ciento a 3.902 millones de pesos por la pobre evolución de un grupo de filiales.
La tasa de reemplazo de crudo alcanzó el 106 por ciento y la de gas natural el 60 por ciento.
Invertia
La formación está bajo la atención de los inversores internacionales porque podría albergar unas de las reservas de hidrocarburos no convencionales más grandes del mundo. YPF tiene adjudicado un 40 por ciento del campo.
“Yo no descarto que el 2013, para nosotros, va a ser un año de dolor desde el punto de vista de conseguir el equipamiento, desde el punto de vista de tener la gente (…) Pero lo bueno lo justifica, cuando uno está creciendo es un dolor que tiene con gusto”, dijo Galuccio en una conferencia de prensa tras el anuncio de los resultados financieros por el 2012.
“Cuánto de ese plan hacemos, si hacemos 80, 90, 120 (perforaciones) hoy no te lo podría decir”, agregó a una pregunta sobre la viabilidad del piloto.
YPF está tratando de cerrar un acuerdo con la petrolera Chevron para asociarse en el desarrollo de Vaca Muerta. Pero las conversaciones avanzan lentamente por un embargo contra el grupo estadounidense en Argentina debido a una causa judicial por contaminación en Ecuador.
La compañía argentina está a la caza de inversiones privadas por 4.500 millones de dólares para financiar parte de los 32.600 millones de dólares que necesita en los próximos cinco años para levantar su alicaída producción de hidrocarburos.
La realización del proyecto es clave para la estrategia de YPF de empezar a generar un flujo de caja que le permita financiar la mayor parte de su plan de inversiones con recursos propios.
La compañía tiene restringido el acceso a los mercados financieros internacionales por la poca confianza que genera Argentina tras la masiva suspensión de pagos del 2001/2002. La nacionalización sin compensación de un 51 por ciento en YPF en manos del grupo español Repsol también aumentó el malhumor de los inversores con el país.
UTILIDADES EN ALZA
El beneficio neto de YPF creció en el cuarto trimestre del año pasado por encima de las previsiones del mercado, empujado por un aumento en las ventas e ingresos extraordinarios que neutralizaron un alza en los costos.
El resultado de la empresa alcanzó los 1.019 millones de pesos (207,1 millones de dólares) en los últimos tres meses del 2012, un 90,5 por ciento superior al mismo período del año previo y por encima de los 784 millones de pesos esperados por analistas consultados por Reuters.
Los ingresos de YPF crecieron un 26,5 por ciento en el cuarto trimestre, gracias a mejores precios locales del crudo que beneficiaron a sus negocios de exploración y producción, pero que redujeron sus márgenes por ventas de combustibles ante el encarecimiento de la materia prima.
Los beneficios también se vieron apuntalados por ingresos extraordinarios debidos a una reversión de créditos relacionados con un programa estatal para incentivar la producción de hidrocarburos y por saldos a favor tras la renegociación de algunas concesiones.
Galuccio dijo que YPF planea aumentar un 60 por ciento sus inversiones en el 2013 contra el 2012, cuando se destinaron 16.485 millones de pesos a bienes de uso.
También explicó que los costes de la compañía, un motivo de preocupación del mercado, estarán este año en línea con lo planeado si no hay nuevas negociaciones salariales. La alta inflación en el país ha disparado el nivel de gasto de personal de las empresas.
En todo el año pasado, los beneficios de YPF cayeron un 12,2 por ciento a 3.902 millones de pesos por la pobre evolución de un grupo de filiales.
La tasa de reemplazo de crudo alcanzó el 106 por ciento y la de gas natural el 60 por ciento.
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