En España dan por hecho el aval a lo firmado el lunes. Petrolera argentina subió 11,4% y la española un 4,2%.
La casi segura aprobación por parte del directorio Repsol del acuerdo por la expropiación del 51% YPF disparó ayer las acciones de ambas compañías, que subieron con fuerza en España, Nueva York y Argentina. Mientras tanto, quedó claro que el pacto fue una compleja negociación que a cinco bandas que involucró a los gobiernos de México, España y Argentina, además de las dos compañías, ya que para que se concretara el pacto influyeron aspectos como la inversión petrolera en Argentina, inversiones mexicanas en España y el comercio de biodiesel en la Unión Europea.
El valor de YPF se incrementó en $ 10.422.789.014,5 en un solo día. El papel de YPF saltó 11,40% en la Bolsa de Comercio porteña, cerró en 259 pesos y acumuló un alza de 161,60% en lo que va del año, en línea con la ganancia de 11,50% a 29,72 dólares del ADR en Wall Street, donde suma 104,30% desde 2012.
También las acciones de Repsol cerraron ayer con una sensible mejora de 4,28% en la Bolsa de Madrid, a 19,24 euros por título, impulsadas también por el acuerdo. También ganaron un 5,95% los títulos de la constructora Sacyr, uno de las principales accionistas de la petrolera, con el 9,38% del capital, mientras Caixbank, el mayor accionista de referencia, con un 12%, repuntó 2,19% en Madrid.
Fuentes de Repsol señalaron en España que existiría “predisposición positiva” para aceptar la propuesta, ya que el “principio de acuerdo” cumpliría también “con los mínimos planteados por el presidente de Repsol, Antonio Brufau” y “es prácticamente idéntico en sus términos a la propuesta recogida en un papel que entregó el propio Brufau al ministro de Industria, José Manuel Soria para que lo trasladase en su reciente viaje a México a la cúpula de Pemex”.
En tanto, en la Argentina, el ministro de Economía, Axel Kicillof, uno de los impulsores de la expropiación en su momento, se amparó en “cuestiones de confidencialidad” para no dar detalles del “principio de acuerdo”, al que consideró “un avance muy importante y que corona negociaciones arduas que se llevaron adelante durante los últimos 19 meses”. Kicillof, aseguró que Repsol “habló de una compensación de 15.000 millones de dólares, después de 10.500 millones de dólares”, al sugerir que se le pagará menos, aunque bastante más de lo que sugirió al momento de la expropiación (ver aparte)
Parece claro que la cifra que se pagaría por las acciones de Repsol expropiadas sería de unos 5.000 millones de dólares (aunque otras versiones subían esa cifra hasta los us$6.000) y que sería en bonos en dólares amortizables a partir del cuarto año, tras cobrar intereses en los tres primeros, pero sin compensación en activos materiales, por lo que no será preciso la participación de consultores privados independientes.
El diario económico Expansión señaló que “este pago es inferior a los 7.000 millones de dólares en los que Repsol tiene contabilizado en libros el valor por el 51% expropiado, pero será aceptado por el consejo entre otras cosas porque los bonos ofrecen un margen de negociación y rápida liquidación que un dilatado proceso judicial no habría garantizado”. El 26 de junio, el Directorio de Repsol había rechazado una primera oferta de compensación similar por “insatisfactoria”, por considerar que los activos por valor de 5.000 millones de dólares que ofrece la Argentina (participación en Vaca Muerta) estaban sobrevalorados en perjuicio de Repsol.
Las reacciones no se hicieron esperar. Asociaciones empresarias, dirigentes políticos y gobernadores de provincias petroleras respaldaron la negociación. En la oposición, si bien la mayoría consideró positivo lo firmado, reclamó conocer la “letra chica” de lo acordado. (ver aparte)
En Neuquén, la noticia fue muy bien recibida: “Se abrirán las puertas para recibir muchas más inversiones” en la provincia, particularmente en Vaca Muerta, dijo el gobernador Jorge Sapag. Y aunque es “un tema que está liderando la Nación”, recordó que Neuquén “tiene derecho a participar en el 10,30% de las acciones, a lo cual hay que pagarlas”, aunque el ministro de Energía Guillermo Coco descartó que implique el desembolso inmediato de dinero.
Río Negro
También las acciones de Repsol cerraron ayer con una sensible mejora de 4,28% en la Bolsa de Madrid, a 19,24 euros por título, impulsadas también por el acuerdo. También ganaron un 5,95% los títulos de la constructora Sacyr, uno de las principales accionistas de la petrolera, con el 9,38% del capital, mientras Caixbank, el mayor accionista de referencia, con un 12%, repuntó 2,19% en Madrid.
Fuentes de Repsol señalaron en España que existiría “predisposición positiva” para aceptar la propuesta, ya que el “principio de acuerdo” cumpliría también “con los mínimos planteados por el presidente de Repsol, Antonio Brufau” y “es prácticamente idéntico en sus términos a la propuesta recogida en un papel que entregó el propio Brufau al ministro de Industria, José Manuel Soria para que lo trasladase en su reciente viaje a México a la cúpula de Pemex”.
En tanto, en la Argentina, el ministro de Economía, Axel Kicillof, uno de los impulsores de la expropiación en su momento, se amparó en “cuestiones de confidencialidad” para no dar detalles del “principio de acuerdo”, al que consideró “un avance muy importante y que corona negociaciones arduas que se llevaron adelante durante los últimos 19 meses”. Kicillof, aseguró que Repsol “habló de una compensación de 15.000 millones de dólares, después de 10.500 millones de dólares”, al sugerir que se le pagará menos, aunque bastante más de lo que sugirió al momento de la expropiación (ver aparte)
Parece claro que la cifra que se pagaría por las acciones de Repsol expropiadas sería de unos 5.000 millones de dólares (aunque otras versiones subían esa cifra hasta los us$6.000) y que sería en bonos en dólares amortizables a partir del cuarto año, tras cobrar intereses en los tres primeros, pero sin compensación en activos materiales, por lo que no será preciso la participación de consultores privados independientes.
El diario económico Expansión señaló que “este pago es inferior a los 7.000 millones de dólares en los que Repsol tiene contabilizado en libros el valor por el 51% expropiado, pero será aceptado por el consejo entre otras cosas porque los bonos ofrecen un margen de negociación y rápida liquidación que un dilatado proceso judicial no habría garantizado”. El 26 de junio, el Directorio de Repsol había rechazado una primera oferta de compensación similar por “insatisfactoria”, por considerar que los activos por valor de 5.000 millones de dólares que ofrece la Argentina (participación en Vaca Muerta) estaban sobrevalorados en perjuicio de Repsol.
Las reacciones no se hicieron esperar. Asociaciones empresarias, dirigentes políticos y gobernadores de provincias petroleras respaldaron la negociación. En la oposición, si bien la mayoría consideró positivo lo firmado, reclamó conocer la “letra chica” de lo acordado. (ver aparte)
En Neuquén, la noticia fue muy bien recibida: “Se abrirán las puertas para recibir muchas más inversiones” en la provincia, particularmente en Vaca Muerta, dijo el gobernador Jorge Sapag. Y aunque es “un tema que está liderando la Nación”, recordó que Neuquén “tiene derecho a participar en el 10,30% de las acciones, a lo cual hay que pagarlas”, aunque el ministro de Energía Guillermo Coco descartó que implique el desembolso inmediato de dinero.
Río Negro