Mientras espera la implementación de la demorada quita de subsidios al sector eléctrico, con la expectativa de recibir un incremento tarifario que le permita reflotar sus deterioradas finanzas, Edesur, la segunda mayor distribuidora del país, tiene en carpeta una serie de proyectos para mejorar la calidad de su servicio, que en diciembre pasado se vio muy afectado por la ola de calor que afectó a Buenos Aires y provocó repetidas fallas en el tendido eléctrico.
El más ambicioso apunta a construir una nueva estación transformadora (ET) de gran tamaño en el corazón de la ciudad. La iniciativa prevé, en rigor, instalar dos ET trifásicas de 300 megavolt ampere (MVA) de potencia cada una en la zona de Once para descomprimir el suministro de energía en la zona sur de Capital Federal, la región que registró mayor cantidad de cortes en diciembre pasado
Para eso deberá movilizar una inversión cercana a los US$ 200 millones, según confirmaron a El Inversor Online allegados a la iniciativa. Nada sencillo para una empresa que en el primer trimestre perdió $ 1117,7 millones a raíz del congelamiento tarifario que lleva más de 10 años y no le permite cubrir sus costos operativos, que se expandieron al ritmo de la inflación.
Por eso, la distribuidora de Endesa -que a su vez es controlada por la italiana Enel- aspira a conseguir el respaldo financiero del Estado bajo el paraguas del Focede, el fondo creado por el Gobierno para solventar ampliaciones y mejoras en el red eléctrica, o de otra herramienta crediticia similar. “Desde lo técnico, el proyecto ya está prácticamente cerrado. Pero debemos resolver la ingeniería financiera porque el balance negativo de la empresa no permite apalancar esa inversión”, admitieron allegados a Edesur.
De concretarse, será la primera ET de gran potencia que se construye en el área Metropolitana en casi 15 años. La última fue la estación de Azopardo, inaugurada a fines de los ’90. La intención de Edesur es que la planta esté operativa hacia fines de 2015 o principios de 2016.
A su vez, la distribuidora está sumando seis subestaciones transportables que estarán disponibles para el verano a fin de robustecer puntos en los que se registraron problemas de abastecimiento. Son unidades móviles importadas de 35 MVA de potencia que se montarán en lugares críticos del sistema de distribución eléctrica.