El presidente de YPF aseguró haber alcanzado un acuerdo con Francisco Pérez para avanzar con la reforma de la Ley de Hidrocarburos. Inversión en el yacimiento La Ventana.
El presidente de YPF, Miguel Galuccio, aseguró ayer haber alcanzado un acuerdo con el gobernador de Mendoza, Francisco Pérez, para avanzar con la reforma de la Ley de Hidrocarburos. “A este consenso no se llega sin discusión, pero tenemos un mismo objetivo: alcanzar el autoabastecimiento energético, y Mendoza es fundamental para hacerlo posible, por eso les agradezco mucho a los mendocinos el acompañamiento”, afirmó Galuccio, tras recorrer junto al gobernador el pozo Botellón X-2 en el yacimiento La Ventana, donde la empresa vuelve a tener actividad exploratoria luego de 10 años.
Ni Galuccio ni Pérez dieron detalles sobre los cambios que se introducirán en el proyecto oficial, pero el encuentro entre ambos y las palabras del presidente de YPF dejaron en evidencia que el peor momento de la relación parece haber pasado. Mendoza era una de las provincias que había manifestado su desacuerdo con la iniciativa oficial, que busca incentivar las inversiones en el sector poniéndole límite al acarreo que llevan adelante las empresas provinciales de energía al asociarse en proyectos sin poner dinero y sólo ofreciendo el área para explotar. De hecho, Mendoza creó a comienzos del año pasado la Empresa Mendocina de Energía.
“Con el gobernador logramos un consenso para la modificación de la Ley de Hidrocarburos, que no cambia la Ley Corta”, sostuvo ayer Galuccio luego de recorrer las instalaciones del yacimiento La Ventana en Rivadavia. Las provincias tienen el dominio jurisdiccional del subsuelo. El derecho se los otorgó la reforma constitucional de 1994, y en 2003 el entonces presidente Néstor Kirchner avanzó con el cumplimiento de ese mandato al firmar el decreto 546, donde se estableció que las nuevas concesiones serían fijadas por las provincias. En noviembre de 2006, el gobierno fue más allá al sancionar la Ley 26.197, que les transfirió la totalidad de los yacimientos. Esa última ley es la conocida como Ley Corta, que el gobierno dejó en claro que no modificará. Lo que todavía no se precisó es si finalmente se le pondrá freno al acarreo y, si eso ocurre, de qué manera compensarán a las provincias.
Lo único seguro por ahora es que el gobierno nacional y las provincias acercaron posiciones. De hecho, el domingo, los gobernadores de Chubut y Neuquén, Martín Buzzi y Jorge Sapag, respectivamente, se manifestaron expectantes ante el nuevo proyecto de Ley de Hidrocarburos. “Sabemos que no va a contemplar distintos aspectos que estaban en el borrador de la ley que había sido elaborada en el ámbito de YPF”, sostuvo Sapag sin dar detalles.
Más allá de la novedad en torno de la reforma de la ley, Galuccio y Pérez suscribieron un convenio para reactivar el pozo Botellón X-2 en el yacimiento La Ventana. El proyecto contempla 300 millones de dólares para exploración y reafirma la alianza con la empresa china Sinopec. La Ventana es un área productiva de 480 kilómetros cuadrados, ubicada en el norte de la provincia de Mendoza, cuya concesión de explotación hasta el año 2027 pertenece a YPF en un ciento por ciento. Cuenta con 239 pozos en producción y 70 pozos inyectores que producen unos 6 mil barriles de crudo diarios para las refinerías de la petrolera. La semana pasada, YPF firmó la extensión de su asociación con Sinopec para la exploración y desarrollo del área con un nuevo contrato que se extiende hasta 2027, y define los porcentajes de participación en la sociedad en un 70 por ciento para YPF y un 30 por ciento para Sinopec.
La petrolera nacional informó que la reactivación de este yacimiento forma parte del “agresivo plan de exploración que la empresa desarrolla en Mendoza y que permitió que la provincia tenga, hasta el momento, la mayor tasa de descubrimientos”. Además, de los diez mejores pozos productivos de petróleo y gas de YPF, Mendoza tiene dos de los mejores pozos de petróleo y cuatro de los de gas. La empresa detalló que este año tendrá en la provincia diez equipos de perforación activos, un nivel que no se alcanzaba desde 1995.
