En la Cuenca Neuquina el barril llegó a u$s 55. Se achica la brecha con el valor internacional.
El precio del petróleo en el mercado interno se acercó en las últimas semanas, como nunca desde el establecimiento de altas alícuotas de retenciones a las exportaciones, a los valores internacionales, lo que podría mejorar las expectativas de inversión si no fuera porque las empresas piden más señales oficiales. El barril de crudo de calidad Medanito (que se extrae en la Cuenca Neuquina) se comercia en Argentina a 55 dólares, un 30% más que hace un año.
Con un precio internacional de entre 70 y 80 dólares por barril (cotización WTI), la brecha con los valores internos es de sólo 15 a 25 dólares.
Cuando se establecieron retenciones móviles de hasta el 45% para desacoplar los precios internos de los valores internacionales y luego se fijó, a través de una resolución, en 42 dólares el valor del barril de crudo en nuestro país, la cotización internacional trepaba a cifras superiores a los 130.
Poco después de que se reconocieron unos dólares más al petróleo liviano (que tiene mejor rendimiento en los procesos de refinación) como el Medanito, en la Cuenca Neuquina los precios del barril treparon hasta los 47 dólares.
La brecha entre los precios internacionales y los domésticos cuando se establecieron originalmente estas fuertes regulaciones era enorme. Las inversiones comenzaron a caer, en parte por esta realidad y por otra: el valor del gas en el mercado doméstico también se congelaba.
El gas no es una commoditie, como sí lo es el petróleo, pero en los mercados regionales con cotizaciones propias, como el de América del Norte (Henry Hub), los valores de este combustible acompañan la evolución de los precios del crudo.
El escenario con precios locales tan alejados de los internacionales fue sumamente desalentador para las inversiones de las petroleras, según lo reconocieron las empresas, y los consultores y organismos que suelen hacer de voceros de las compañías.
No todos los actores son iguales en Argentina, no sólo por el tamaño sino además por la integración vertical del negocio. Así, YPF tiene una posición fuerte en yacimientos y desarrolla toda la cadena: extrae, refina y comercializa. Para esta compañía hispanoargentina el precio del crudo forma parte de un costo interno.
Pero para los productores que en Argentina venden el petróleo a terceros (Chevron, Pluspetrol, Apache) los ingresos se conforman con sus facturaciones a refinerías independientes o a las que también tienen sus redes de estaciones de servicios, como Esso o Shell.
Fuentes de varias empresas no integradas reconocieron en los últimos días que el precio del crudo en Argentina ya llega a los 55 dólares por barril.
Ese aumento se fue reflejando en los incrementos del valor de los combustibles líquidos en las estaciones de servicios, hasta que el gobierno decidió intervenir en lo que venía siendo un movimiento del mercado y prohibió que se toquen los números en los surtidores. La Justicia revirtió la resolución de la secretaría de Comercio nacional pero por ahora las naftas no retomaron el sendero del aumento.
Río Negro