Experto cree que el país vería mermado su superávit comercial por importar petróleo.
“Con el crudo por encima de 80 dólares no alcanzan los subsidios para amortiguar”.
BUENOS AIRES (ABA).- Aun cuando las voces críticas digan que la Argentina está “fuera del mundo” y haya quienes vean ello como positivo (un paraguas frente a las crisis financieras mundiales) a nuestro país le será muy difícil sustraerse del impacto económico producto de la convulsión política en los países árabes petroleros.
“Existe una gran incertidumbre porque no se sabe para donde caerán los dados. ¿Habrá -en Egipto, Argelia, Bahreim, Libia, etc- una tendencia hacia la democracia, o hacia líderes islámicos ortodoxos? Más allá de lo que ocurra en cada país va a tardar un tiempo en saberse”, reflexionó el experto en materia de hidrocarburos, Gerardo Rabinovich.
Mientras los analistas se detienen en tales elucubraciones, el barril Brent -con la guerra civil en Libia en auge- pasó por encima de los 110 dólares y el WTI cerca de los 100 dólares el barril al igual que la canasta de la OPEP.
¿Incidirá semejante escenario en un país que tiene los precios de los hidrocarburos “atados”?, ¿traspasará el tamiz de un mercado tan regulado?, consultó este medio al prosecretario del Instituto Mosconi.
“Claro que todo esto puede incidir -respondió Rabinovich- porque somos importadores de petróleo. Y no solo repercutirá en el precio del crudo sino también en los productos derivados como fuel oil, gasoil y naftas. En promedio, el precio internacional del crudo creció casi el 10 % en un mes”.
– ¿Cómo juega el control tarifario interno para impedir el traslado de semejante índice internacional a los precios que paga el consumidor?
– Dado que tenemos que importar el producto a precios muy altos y venderlo en el mercado interno a precios muy bajos, esta situación nos va a perjudicar. De permanecer en este esquema los subsidios se van a disparar y va a tender a desaparecer el superávit comercial.
– ¿Hasta qué punto?
– El superávit fiscal se fue evaporando, ahora el comercial queda muy presionado con esta situación. Los excedentes de la balanza de pagos se vienen usando en una red de subsidios. Por suerte otros commodities que exportamos como los alimentos (sobre todo la soja) se mantienen en niveles altos lo cual deja algún margen de superávit aunque cada vez es más chico; el desequilibrio en materia de hidrocarburos se sigue profundizando ya que con los precios controlados la demanda adentro sigue creciendo.
–¿Hay necesidad de importar?
– Sí. De España me llamaron de una empresa que decía que en lugar de diez barcos de gas natural licuado les habían comunicado desde aquí la decisión de pasar a traer cuarenta.
– ¿Hasta qué precio internacional del petróleo es “amortiguable” para que las variables no se disparen?
– Hay que esperar que la situación se calme y el precio vuelva a ser el del año pasado, o un poco más por encima de 70 dólares el barril. Subiendo a 80 no es amortiguable.
– ¿Si sigue cerca de los 100 dólares el barril será inevitable un incremento en la tarifa de los hidrocarburos?
– En ese caso las empresas productoras podrían presionar para que aumente el precio de las naftas y se generaría una situación difícil. Es un momento complicado de la historia.
Río Negro
Coletazos en la región
En Río Negro y Neuquén hay problemas en numerosas estaciones con la provisión de naftas. ¿Tiene algo que ver lo regional con el fenómeno mundial, eje de esta nota?. Este diario se lo consultó al experto del Instituto Mosconi
– ¿Qué piensa que está ocurriendo con la escasez de nafta o gas oil en muchas estaciones de servicio en la Patagonia?
– En la medida en que los precios de importación aumentan, las empresas que no lo pueden trasladar al precio. A veces pueden especular. La única que puede equilibrar los números es YPF, que tiene una alianza con el gobierno. Puede también suceder que en época de cosecha o siembra empiece a escasear gas oil que cada vez se usa más para generación eléctrica y cuando no se llega al abastecimiento desde Camessa van a buscar a las estaciones de servicio y se vacían.
– Al neófito puede llamarle la atención que ello ocurra justo en el centro de la zona de producción petrolera y cerca de Plaza Huincul, donde está la refinería de YPF .
– Hay que ver cómo están dirigidos los caños, por aquello de que Dios está en todas partes pero atiende en Buenos Aires.
Río Negro