Por U$S7.100 millones, Bridas y CNOOC se iban a quedar con la segunda productora de petróleo crudo del país, además de su cada vez más creciente producción de gas. Versiones cruzadas achacan distintos responsables. Algunas pistas para develar el misterio
El acuerdo firmado entre Carlos Bulgheroni, de Bridas, y James Halbig, de BP, en noviembre de 2010, que involucraba una operación de U$S7.100 millones, fue en vano. La argentina Bridas decidió retroceder en la compra del paquete accionario Pan American Energy (PAE), que adquiriría junto a su socio chino CNOOC, después de varios obstáculos que impedían que la transacción se complete.
Todo comenzó cuando BP impulsó un importante plan para desprenderse de algunas de sus operaciones en todo el mundo y así recaudar U$S45.000 millones. La compañía, una de las más grandes del sector hidrocarburífero, fue responsable del derrame de petróleo en el Golfo de México por lo que el gobierno de Estados Unidos aplicó una severa multa que llegó a los U$S20.000 millones.
En medio de las versiones cruzadas del por qué la megaventa no llegaba a buen puerto, se conoció que la multa a BP sería mucho menor. De ese modo se potenció el rumor de que a BP ya no le interesaba tanto despojarse de concesiones de explotación, entre ellas la del yacimiento de Cerro Dragón, en la provincia argentina de Chubut.
UN EJECUTIVO BAJO PRESION
La prensa británica especializada en asuntos económicos y de energía embistió contra Bob Dudley, presidente ejecutivo de BP. Expertos del sector de los negocios consideran que las decisiones de Dudley no fueron las mejores que lo hicieron cada vez más alejarse del objetivo de recaudar aquella suma millonaria.
Además de PAE, Dudley tuvo que lidiar con la cancelación de un intercambio de acciones con la rusa Rosneft para realizar tareas de exploración en el Artico. El ejecutivo admitió recientemente que se encuentra bajo mucha presión por los cambios radicales que le pidieron que aplique en la compañía.
Sin embargo, Dudley se había mostrado optimista después del segundo aplazamiento de la venta. En un comunicado a la agencia Bloomberg, la compañía manifestó: “el acuerdo aún no está cerrado, pero nos mantenemos optimistas de que las autorizaciones se concederán en el momento oportuno”.
EL DESINTERES CHINO
La edición argentina de la revista Fortuna agrega un dato surgido del mercado petrolero: CNOOC se habría desinteresado de aumentar sus operaciones en la Argentina a consecuencia de la resolución del Banco Central que obliga a las empresas mineras y petroleras a liquidar sus exportaciones dentro del país.
Se sabe que PAE es una de las pocas operadoras autorizadas por el gobierno de Cristina Fernández para exportar petróleo crudo. En 2010, Pan American vendió petróleo por U$S1.989 millones, un 4% más que en 2009, de acuerdo a un informe de la Dirección de Estadísticas y Censos de Chubut.
“El cierre de la operación se retrasó porque las autoridades anti-trust de la Argentina y las de regulación chinas demoraron sus definiciones”, sostenía un comunicado de BP. Desde Bridas aseguraron que la Comisión Nacional de Competencia estaba manejándose con tiempos más prolongados que los habituales para este tipo de transacciones.
DESPUES DE LA TORMENTA
El cambio de manos de PAE iba a convertirse en la mayor transacción del sector de los hidrocarburos en el país, superando a la compra de Sinopec (también de China) de Oxy, con fuerte presencia en Santa Cruz, valuada en U$S2.450 millones
El 1 de noviembre asumió Oscar Prieto como CEO de Pan American, un hombre cercano a Bridas. Nativo de la Argentina, ha trabajado para BG y Atlantic LNG, siempre desempeñándose en altos cargos en la industria de la energía. Las primeras actividades en el país es la de realizar diagnósticos personales de cada Cuenca donde PAE tiene actividad, siendo la primera la del Golfo San Jorge el martes 15 de noviembre.
Prieto aprovechó para mantener varias reuniones con los proveedores, pero también con el gobernador entrante e intendente de Comodoro Rivadavia, Martín Buzzi. Además, se propició un encuentro con la Cámara de Empresas Regionales de Servicios Petroleros, encabezada por su presidente Esteban Núñez.
Tras la decepción, la operadora controlada por BP y Bridas reiniciará en camino con nuevas caras en el timón de la segunda productora petrolera de la Argentina.
En 2010 obtuvo ganancias por 2.100 millones de pesos
El economista César Herrera calculó cuánto ganó PAE por cada Barril de Petróleo Equivalente, de acuerdo a lo que la propia compañía remite a la CNV (Comisión Nacional de Valores). El resultado: U$S7,10 por cada Boe (es decir, una estimación del precio tanto de petróleo como de gas).
PAE difundió un comunicado en donde estrujó los números al punto de descontar de las ganancias las inversiones. Otro investigador de las Ciencias Económicas, Jorge Gil, los refutó: “la propuesta puede merecer tanto una sonrisa que celebre su ingenuidad por su pretensión de convencer a los distraídos, como un reproche social regional por su manifiesta manipulación basada en errores conceptuales”.
“Tratar la inversión física en equipos y desarrollos de yacimientos como un gasto erogable y restarlo de las ganancias a los fines del análisis es un absurdo realmente inédito por su grosera presentación.
Es más, generaría la inmediata reprobación en cualquier examen de las escuelas secundarias de la zona. Muchísimo más en una universidad. Y muchísimo más aún en una universidad nacional pública”, escribió en una contratapa de Diario Patagónico.
En el ejercicio que finalizó el 31 de diciembre de 2010, y en base a una producción media diaria de 232,31 miles de Boe, PAE logró 2.100 millones de pesos (alrededor de 526 millones de dólares).
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