En una respuesta a la Cancillería argentina, British Petroleum anunció que no participa ni participará de la exploración de hidrocarburos en las islas. El Gobierno recibió el anuncio “con satisfacción”
La petrolera British Petroleum, de capitales ingleses, “no participa en actividades de exploración de hidrocarburos en la región” del Atlántico Sur “ni tiene planes de hacerlo en el futuro”, informó ayer la Cancillería argentina. La aclaración por parte de la empresa británica, una de las más importantes a nivel mundial en ese rubro, llegó en respuesta a una nota que el Ministerio de Relaciones Exteriores había enviado a mediados de marzo, advirtiendo que el gobierno argentino avanzaría con “acciones administrativas, civiles y penales” contra las compañías que participaran de la exploración y perforación de la zona aledaña a las islas Malvinas, por considerar que actúan en sentido contrario a lo indicado por las Naciones Unidas en diversas resoluciones.
“En el marco de las acciones emprendidas por el Estado Nacional contra las empresas que realizan o pretenden realizar exploración y explotación ilegítimas de hidrocarburos en aguas del Atlántico Sur, cercanas a las islas Malvinas y en consecuencia parte integrante del territorio nacional argentino, esta Cancillería informa que ha recibido con satisfacción nota de respuesta de la conocida empresa British Petroleum”, comunicaron ayer desde el Palacio San Martín.
Según se informó, en su respuesta, la BP señala un acuso de recibo de la nota enviada por el gobierno argentino y completa: “Al respecto, deseamos puntualizar que British Petroleum no participa en actividades de exploración de hidrocarburos en la región a la que refiere dicha nota, ni tiene planes de hacerlo en el futuro”. Esa empresa británica tiene intereses en la Argentina: no es un dato menor que esté a cargo, a través de la compañía Panamerican Energy, del mayor yacimiento de petróleo del país, Cerro Dragón, en la provincia de Chubut. La concesión se extiende hasta el año 2043.
La Cancillería argentina además confirmó que, tal como se había anunciado hace menos de un mes, continuará tomando las medidas que consideren correctas para defender los recursos naturales que por derecho le corresponden a este país además de insistir con que se abran las negociaciones bilaterales por la soberanía del Atlántico Sur. “En coordinación con otras áreas del gobierno nacional, continuará implementando todas las acciones que la legislación nacional e internacional estipulen para la defensa de los recursos renovables y no renovables que son patrimonio de todos los argentinos.”
El 15 de marzo pasado, mientras la presidenta Cristina Fernández de Kirchner viajaba a Chile para reforzar el compromiso de la región con la causa Malvinas, el canciller Héctor Timerman anunció un nuevo paso en la ofensiva diplomática por el Atlántico Sur. Así, reafirmando la soberanía argentina sobre el territorio en disputa y también sobre los recursos que existen dentro de ese espacio, advirtió que se tomarían medidas legales contra quienes participaran de la explotación de esos recursos.
British Petroleum, que figuraba en la lista de empresas que mencionó en aquella ocasión, fue la primera en contestar de manera formal la nota enviada por Buenos Aires. En Cancillería esperan que otras sigan a su turno. El alcance de la decisión argentina de avanzar legalmente no incluye sólo a las empresas del rubro petrolero que participen directamente sino también a las que brinden apoyo logístico, asesoramiento o financiamiento. Esto incluye bancos, brokers y analistas de riesgo, entre ellas algunas de peso internacional como Crédit Suisse, Barclays, Merril Lynch y Goldman Sachs.
Página/12