El grueso de los recortes debería corresponder a los países ricos, según la propuesta danesa para la Cumbre del Clima de Copenhague
El mundo debería reducir en un 50% las emisiones de gases con efecto invernadero en 2050 a partir de los niveles de 1990, y el grueso de esas emisiones debería corresponder a los países ricos, según se desprende del proyecto de propuesta presentado por Dinamarca de cara a la cumbre sobre el cambio climático de la ONU, que se celebrará en Copenhague entre el 7 y el 18 de diciembre.
El proyecto indica que los países más desarrollados debería reducir en un 80% sus emisiones globales en 2050. El texto, que debería convertirse en la base del acuerdo climático definitivo de la cumbre de Copenhague, propone que el máximo de emisiones se alcance en 2020. No se especifican los objetivos de emisiones a medio plazo para los países desarrollados, un punto clave para los países menos desarrollados.
“Las partes deberían trabajar juntas constructivamente para reforzar la capacidad mundial de combatir el cambio climático”, indica el texto. Las conversaciones de la ONU han agotado el tiempo para cerrar un acuerdo legalmente vinculante tras las discusiones entre las naciones ricas y pobres sobre quién debería cortar las emisiones, y sobre cuánto y quién debería pagar. Sin embargo, aún hay esperanzas de lograr al menos un pacto politico sustancial eb la cita de Copenhague.
Se espera que los países en desarrollo, liderados por China e India, pongan sobre la mesa un texto que sirva de base para las negociaciones. El primer ministro danés, Lars Lokke Rasmussen, ya ha avanzado que sería deseable lograr un acuerdo “políticamente vinculante” de 5-8 páginas, con anexos que perfilen las obligaciones de cada país, como recortes en las emisiones para 2020 por los países desarrollados.
Fuente: El País.com