Violaciones a los derechos humanos y de la Madre Tierra por las petroleras en la Amazonia Boliviana

Casos que el Tribunal de Justicia Climática no debe olvidar

En el marco del primer Estado Plurinacional del mundo, encabezado por el primer presidente indígena del mundo, la empresa norteamericana Geokinetics está perforando las líneas sísmicas que atraviesan el Territorio Indígena Mosetén y desde el mes de agosto, ha empezado las detonaciones masivas de dinamita que impactan irreversiblemente sobre el bosque no intervenido.

Esta situación escandalosa, violatoria del conjunto de los derechos de este pueblo indígena, y que promoverá un punto de no retorno para la sobrevivencia del frágil ecosistema de la Amazonía Sur boliviana, fue constatada por la prensa internacional  que estuvo en las comunidades Mosetenes y sus territorios donde la empresa yanqui está operando.

CASO: Violaciones a los derechos humanos y de la Madre Tierra por las petroleras en la Amazonia Boliviana

Acusado/Responsable Máximo: Ministerio de Hidrocarburos y Energía del gobierno boliviano, empresa YPFB – Petroandina SAM.

Documentos de antecedentes: (enunciar y adjuntar)

  • Decretos Supremos que determinan las áreas hidrocarburíferas, definidas sin consulta previa.
  • Contratos de exploración y explotación de hidrocarburos entre YPFB y la sociedad YPFB Petroandina.
  • Declaración de Impacto Ambiental (DIA) de las Fases I, II, III del proyecto de exploración sísmica 2D Lliquimuni.
  • Carta de recordación de deberes, del Defensor del Pueblo, dirigida al Ministro de Hidrocarburos
  • Recurso de anulación de la consulta, presentado por CPILAP (Central de Pueblos Indígenas del norte de La Paz)
  • Recurso de Acción de Libertad presentado por la OPIM (Organización del Pueblo Indígena Mosetén), en contra del Ministro de Hidrocarburos  y Gerente de YPFB-Petroandina SAM
  • Videos testimoniales de la posición y actuación de los indígenas, empresa y gobierno.
  • Resoluciones de las organizaciones indígenas sobre el tema
  • Artículos de prensa sobre el caso

Ubicación:
Bolivia, departamento de La Paz, amazonia norte de Bolivia
Locación: Tierra Comunitaria de Origen del pueblo Mosetén, tierras tituladas

Comunidades Afectadas:
Comunidades Mosetenes, Lecos de Larecaja, comunidades interculturales agroecológicas. De continuar el proceso se afectarían las comunidades chimanes, josesanos, tacanas, Esse Ejjas, Lecos de Apolo y el pueblo indígena asilado Toromona.

DESCRIPCION
En el marco del primer Estado Plurinacional del mundo, encabezado por el primer presidente indígena del mundo, la empresa norteamericana Geokinetics está perforando las líneas sísmicas que atraviesan el Territorio Indígena Mosetén y desde el mes de agosto, ha empezado las detonaciones masivas de dinamita que impactan irreversiblemente sobre el bosque no intervenido. Esta situación escandalosa, violatoria del conjunto de los derechos de este pueblo indígena, y que promoverá un punto de no retorno para la sobrevivencia del frágil ecosistema de la Amazonía Sur boliviana, fue constatada por la prensa internacional  que estuvo en las comunidades Mosetenes y sus territorios donde la empresa yanqui está operando.

El proyecto sísmico de exploración sísmica en al menos 1.098 kilómetros lineales de la empresa petrolera YPFB-Petroandina Sociedad Anónima Mixta (SAM) obtuvo licencia ambiental para iniciar trabajos de exploración en el bloque Liquimuni, ubicado en Caranavi al norte del departamento de La Paz, sin haberse cumplido con los procedimientos establecidos en el Reglamento de Consulta aprobado el 2006.

El derecho a consulta y al consentimiento previo de las naciones y pueblos indígenas en torno a la explotación de los recursos naturales en sus territorios es una de las principales conquistas de las organizaciones indígenas en todo el mundo.

Lo es, en la medida que pone un freno legal, asumido en el marco de la democracia representativa, al avasallamiento permanente que sufrían las comunidades indígenas de todo el planeta frente a la voracidad del capitalismo, depredador, saqueador y expoliador de la riqueza natural, allí donde se encuentre, pero especialmente en los países que se convirtieron en el escenario de su expansión imperialista y globalizadora durante el siglo XX y esta primera década del siglo XXI: el llamado Tercer Mundo.

En los hechos, el derecho de consulta es una frágil línea que separa las prácticas aberrantes del pasado (que incluyeron el genocidio de multitud de pueblos indígenas y el etnocidio de poblaciones enteras) con las buenos deseos de inclusión y respeto con los que nos llenamos la boca en el presente.

La exploración petrolera forma parte de la  “política de desarrollo del Norte de La Paz”. La crisis profunda del modo de producción capitalista en todo el planeta está aparejada a la  identificación del territorio amazónico como una de las fronteras a superar, abriéndolo a la voracidad desarrollista, en aras de explotar indiscriminadamente sus recursos naturales, y convertirlo en uno de los soportes para la reconfiguración del modelo de acumulación vigente.

Está claro que los “amos del mundo” han decidido que la Amazonía debe ser sacrificada al altar del capital, bajo el manto encubridor e hipócrita del tan proclamado desarrollo y el alabado progreso que, entre otras virtudes, sacaría a la región del olvido y el abandono estatal y a sus poblaciones indígenas, del primitivismo y la pobreza.

Esa es la Amazonía como la quieren Alan García o Mario Vargas Llosa o como ya la está imponiendo a la fuerza, el ex obrero metalúrgico y actual presidente de Brasil, Luis Ignacio Lula da Silva.
Según declaraciones registradas en un periódico, Lula dijo en el municipio de Alta Floresta, en el norte del estado de Mato Grosso, que está “orgulloso” que productores rurales que antes tenían apenas 50 hectáreas en el estado de Río Grande del Sur “hoy tengan 2.000 hectáreas (en la selva amazónica), posean casa y auto. Están bien con la vida porque produjeron, trabajaron”.
Lo dijo la misma semana donde aprobó una ley para legalizar la usurpación hecha por empresarios privados de 67,4 millones de hectáreas de selva amazónica, ya arrasada para cultivar soya y criar ganado. O sea una Amazonía para otros, no para los amazónicos.

Por ello, lo que está en el fondo de la discusión y en el primer lugar en la agenda de la lucha, más allá del incumplimiento de las leyes, es el modelo de desarrollo que se busca imponer, y con violencia, sin dudas.

Ese modelo de desarrollo tiene dos consecuencias irreversibles: la destrucción de la floresta, la abolición de la selva como el último ecosistema en su tipo en el mundo, y la desaparición física o la asimilación definitiva de sus pueblos indígenas, incluyendo los últimos pueblos aislados que existen sobre la faz de la Tierra.

Frente a ello, está claro que hay que elegir y que no hay soluciones intermedias: o se está con la naturaleza y con los indios, o se está en contra de ellos. O se está con la vida en la Amazonía o se promueve la muerte de la selva y de su gente.

IMPACTOS

  • Comunidades invadidas por los petroleros.
  • Campamentos por todos lados, vagonetas y camionetas, buses y camiones de la empresa yendo y viniendo, hombres vestidos de naranja pululando como hormigas.
  • Equipos de trabajadores que ni siquiera han pedido permiso a los moradores de las comunidades y se han puesto a trabajar como si fueran de su propiedad.
  • Líneas sísmicas tendidas a través de las casas de las comunidades, a través de los patios de las casas, ¡donde juegan los niños!, a través de los baños higiénicos, de las canchas de fútbol.
  • Mojones de las líneas sísmicas, con su señalización en cintillo rojo (que significa explosión) a metros donde viven hombres o mujeres en paz y tranquilidad, hasta que llegaron los hombres de naranja.
  • Líneas sísmicas que se internan en el monte virgen, árboles cortados y deforestación en bosque virgen.
  • Línea sísmica que atraviesa  la vertiente de la comunidad, único ojo de agua, situado cerro arriba. No hay ningún acuerdo, ni compromiso, ni nada para respetar dicha fuente del vital elemento.
  • Nadie ha garantizado lo que va a suceder, ni menos hablado de compensaciones en caso de desastre.
  • Desde que llegaron los de la empresa (y sin pedir permiso) y encendieron las máquinas, no  se ven más aves (el ruido es incesante), ni tampoco animales (que cazaban para alimentarse), ya que ni siquiera los dejan acercarse al bosque. A su bosque.
  • Acciones de soborno a dirigentes de algunas organizaciones y comunidades indígenas, lo que agrava el cuadro de avasallamiento de las mismas, a pesar de que el propio Evo declaró que no se comprarían dirigentes como antes hacían las trasnacionales (La Razón, La Paz, 29/10/2008)”, en referencia a la actuación de la empresa Petroandina, responsable de las labores exploratorias en ese sector suramazónico.

AMENAZAS

–         Amenazas individuales y grupales.- Al introducirse la actividad petrolera y si ésta se consolida, todas las formas de vida y todos los sentidos de vida que se han construido hasta ahora, cambiarán radicalmente.
–         Amenazas físicas y psicológicas, a dirigentes, líderes, al pueblo, provenientes de vecinos colonos, sindicatos afines al gobierno y de habitantes citadinos.
–         Amenazas a los otros pueblos.- Parecía que la población no indígena estaba conforme por la ausencia de manifestaciones contrarias, sin embargo, conforme se evidencian las consecuencias de la operación petrolera, las reacciones han comenzado a expresarse, de éstas familias que tienen origen quechua, aimara y/o simplemente mestiza.
–         Las amenazas más graves se darían en los territorios y en las personas de los otros pueblos indígenas amazónicos, incluyendo los calificados de alta vulnerabilidad como Esse Ejjas, Araonas y aquellos en aislamiento voluntario como los Toromonas e inclusive Pacahuaras, pues todo el ecosistema amazónico sufrirá consecuencias más temprano que tarde.

DERECHOS IMPACTADOS/VULNERADOS

Derechos Humanos
–          Derechos individuales y colectivos
–          Derecho a la salud
–          Derecho al desarrollo
–          Derecho al trabajo y/o actividades productivas tradicionales
–          Derecho al territorio
–          Derecho al agua y acceso a otros alimentos
–          Derecho a la autodeterminación, autonomía, a la consulta y a la participación
–        Derecho a establecer normas internas, autoridades y estructuras orgánicas, a su respeto y no interferencia por parte del Estado

DERECHOS DE LA PACHAMAMA, MADRE TIERRA O NATURALEZA

–          Derecho al equilibrio ecológico
–          Derecho a la preservación o subsistencia de especies
–          Derecho a la subsistencia de las especies
–          Derecho a espacios privados y compartidos de las especies
–          Derecho a la reproducción natural
–          Derecho a las sinergias paulatinas
–          Derecho a los cambios rítmicos

Principios e instrumentos internacionales y nacionales que protegen el o los derechos violados

–        Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia
–        Convenio 169 de la OIT
–        Pacto de San José de Costa Rica
–        Pactos sobre los Derechos Civiles y Políticos y DESC
–        Declaración NN.UU. sobre los DD. PP. II.
–        Leyes 3058; L.1715-L. 3545; L. 1257; L. 3760; L. 1333

DEMANDA DE REPARACION

Dejar el crudo en el subsuelo en la Amazonia boliviana, como acción vital para la protección del territorio y sus habitantes y para innovar en la búsqueda de alternativas al desarrollo extractivista tradicional basado en la exportación de productos primarios. Además esta es una medida emblemática para enfrentar en la practica el calentamiento global, superando la etapa de los discursos a las propuestas efectivas, cuestionando la lógica del desarrollo extractivista y constituyéndose en una opción para la construcción del Vivir Bien.

Es además una propuesta apoyada públicamente en ocasión de una Asamblea de Naciones Unidas por el presidente del Estado Plurinacional de Bolivia, Evo Morales.

Fobomade