Cuba refuerza su estrategia de prevención contra derrames de petróleo tras el desastre del hundimiento de una plataforma de la británica BP, en el Golfo de México en abril, y por el crecimiento del tráfico petrolero en el país, informó este sábado la prensa local.
“En nuestro país no puede suceder algo parecido a lo de BP. De ahí la importancia de preservar y fortalecer los medios de inspección y protección”, dijo José González, presidente del Capítulo Cubano del Instituto Panamericano de Ingeniería Naval (IPIN) al diario Juventud Rebelde.
González, junto a otros especialistas, participó el jueves y viernes en el primer Simposio de Seguridad y Riesgos ante Derrame de Hidrocarburos y Servicios Marítimos Offshore, en Cienfuegos, centro-sur de Cuba.
El derrame de BP en aguas estadounidenses del Golfo de México amenazó las costas cubanas y su ecosistema, y aunque no se constataron daños, disparó el sistema de alarma y prevención que se desarrolla en el país.
“La nación no está exenta de la ocurrencia de estos fenómenos. Solo por la costa norte transitan a diario cerca de cien buques -muchos tanqueros- hacia el golfo de México. Un desastre perjudicaría de forma considerable al turismo”, añadió el especialista.
Pero además, Cuba tiene su programa petrolero propio y busca hidrocarburos en contrato de riesgo con compañías internacionales en su zona económica del Golfo de México.
También construye con Venezuela un polo petroquímico en Cienfuegos, que además de una refinería, tiene ya fábricas de bolsas y casas a partir del petróleo. Igualmente genera su electricidad a partir de termométricas diseminadas por todo el país.
“El desarrollo del Polo Petroquímico de Cienfuegos incrementará en 67 y 169% el tráfico marítimo y cargas operadas, respectivamente. La operación de buques de carga líquida representa más del 70% del total, por lo que se construirá una terminal de super tanqueros en el exterior de la bahía”, dijo José Díaz, presidente de la Administración Portuaria de esa ciudad. (AFP)
Terra.co