Luego de casi nueve horas de debate en el plenario de comisiones en la Cámara baja, el kirchnerismo sacó dictamen de mayoría. La UCR y el FAP apoyarán en general. El PRO y parte del PJ disidente se opondrán
Por Miguel Jorquera | Página/12
Sin sobresaltos, el kirchnerismo volvió a dar otro paso en la Cámara de Diputados para avanzar en la expropiación del 51 por ciento de las acciones de YPF en manos de la española Repsol. Tras casi nueve horas de debate en el plenario de comisiones de la Cámara baja, el oficialismo emitió el dictamen de mayoría sobre la media sanción que ayer mismo llegó desde el Senado y que irá al recinto de Diputados el miércoles 2 de mayo, donde el jueves 3 se transformaría en ley con un contundente respaldo que incluye a las principales bancadas de la oposición. La UCR, con diferencias internas, y el FAP apoyarán en general el proyecto oficial, pero presentando sus propios dictámenes con disidencias. El PRO y una parte del PJ disidente también presentaron sus respectivos dictámenes para oponerse a la recuperación estatal de la compañía. La Coalición Cívica dividió posturas entre quienes votarán a favor y los que se abstendrán, mientras que Elisa Carrió presentó un proyecto para crear una comisión investigadora sobre el vaciamiento de YPF.
Cerca de las 19, una docena de oradores, la mayoría oficialistas, desistieron de sus discursos para cederle el cierre del debate al presidente de la Comisión de Presupuesto, Roberto Feletti, en una sala donde quedaban apenas cuatro opositores. “No es una decisión intempestiva, sino que reafirma el permanente planteo del Gobierno en la búsqueda de la autonomía nacional”, sentenció Feletti sobre la expropiación de YPF.
No escatimó críticas a los opositores que “plantean por izquierda algunas cosas pero después votan por derecha” y cuestionó la “permanente actitud de la oposición de tratar de degradar al Parlamento por una supuesta falta de debate, el Parlamento está legislando”. También respondió a las “criticas y pronósticos permanentes de fracaso: nunca este Parlamento podría haber estado discutiendo este tema si no hubiéramos transitado estos años de desendeudamiento del Estado, de crecimiento y de constante aumento de la producción”, argumentó.
“Con la sanción de la ley se logrará poner a YPF al servicio del proyecto de autoabastecimiento, con competitividad en el mercado internacional”, sostuvo el presidente de la Cámara de Diputados, Julián Domínguez, después de presenciar parte del debate en el plenario, y vaticinó que la ley “será fundamental para recuperar el rol activo del Estado y la soberanía nacional sobre los recursos estratégicos”.
“Recuperar la soberanía nacional en la producción, refinación y distribución de hidrocarburos representa un claro y valiente avance hacia la profundización y mejoramiento del modelo iniciado en el año 2003. Estamos dejando atrás otra página del modelo neoliberal, privatizador y desnacionalizador que se consolidó en los ’90 y estamos escribiendo una página de soberanía concreta sobre nuestros recursos naturales”, sumó el aliado Carlos Heller de Nuevo Encuentro.
Apoyo crítico
El radicalismo ratificó su apoyo en general al proyecto, aunque todavía no lograron aplacar la rebelión de sus propios diputados que cuestionan la posición partidaria, encabezados por el cordobés Oscar Aguad. En el plenario hubo discursos que fueron desde duros cuestionamientos al Gobierno hasta la justificación del voto a favor de la expropiación.
Ricardo Alfonsín se encargó de lo último. “Nuestro voto por principios, por convicción y por historia”, dijo Alfonsín para replicar a quienes cuestionan al radicalismo con el argumento que acomodó su postura al humor de la opinión pública. “Cuando en los ’90 el 70 por ciento de la gente apoyaba la privatización, el radicalismo igual se opuso”, recordó. También criticó a los opositores que están en contra de la recuperación estatal de petrolera. “Se oponen porque le produce desconfianza el Estado y la política”, dijo, además de sentenciar que el radicalismo respalda la “recuperación de YPF para el Estado y no para un gobierno”.
En cambio, el radical Mario Cimadevilla pidió al oficialismo que “en el acto que realizarán mañana (por hoy) en reivindicación de este proyecto de ley tengan la valentía de pedir perdón al país por el daño que le hicieron a YPF y al sector energético”. Por ahora, la UCR no puede garantizar que todos sus diputados se encolumnen.
A diferencia de lo que pasó en el Senado, los diputados del FAP votarán a favor de la expropiación en general y propondrán modificaciones. Claudio Lozano fue el encargado de exponer el dictamen en “disidencia parcial” que respaldan el PS, la UP, el GEN, el juecismo cordobés y Libres del Sur. “Nosotros hubiéramos planteado las cosas de otro modo, hay errores que nos pueden costar muy caros. Acompañamos el resultado, no compartimos el mecanismo”, dijo Lozano antes de interpelar al oficialismo. “Creemos que hay que avalar esto, celebraríamos si pudieras producir algunas modificaciones. Que la intervención se haga bien. Por qué razón tanto apuro”, se preguntó.
Fernando “Pino” Solanas se mostró más optimista con la decisión del Gobierno, aunque reclamó una YPF “ciento por ciento pública y con control social”. “Creemos que no se puede fracasar, estamos ante algo importantísimo. Acá hay una unidad nacional que quiere que se recupere y no fracase”, argumentó Solanas, que también se quejó que el resto de las provincias no productoras de petróleo no sean parte de la nueva YPF.
Elisa Carrió estuvo entre las primeras en hablar y luego se fue del plenario. Lilita se lamentó por la debilitada “legitimidad” electoral con que llegó al debate por la expropiación de YPF, pero no dudó en cargar contra oficialistas, opositores y hasta compañeros de bancada. Carrió dijo que presentaba sola lo que podría ser “su último proyecto” si “la gente no me acompaña”. La iniciativa es para conformar una comisión especial investigadora sobre YPF en la que incluyó a Repsol, al grupo Eskenazi, al economista Mario Blejer como representante de los “accionistas independientes” y de los representantes del Estado en la compañía, además de las “responsabilidades políticas” del Gobierno.
Pero Carrió no pudo disciplinar a todo su bloque. Los cívicos Carlos Comi y Horacio Piemonte ratificaron por la mañana su denuncia en tribunales contra la Presidenta por el vaciamiento de YPF, pero afirmaron que no pueden votar en contra de la recuperación estatal de la petrolera y lo harán a favor en general. Alfonso Prat Gay confirmó luego que los otros cuatro diputados del bloque, incluida Carrió, se abstendrán.
En contra
Al inicio de las casi nueve horas de debate, los opositores dejaron sentada su postura. El macrista Pablo Tonelli fue uno de los primeros en pronunciarse en contra: “La expropiación es innecesaria e ilegal porque el problema no es la propiedad de YPF sino la política energética. Con este proyecto no se logrará mayor energía sino todo lo contrario”, sentenció. El PRO votará su propio dictamen.
La peronista anti K Graciela Camaño también justificó su voto en contra: “Soy poco afecta a remover el pasado. Dejo que los demás se fijen lo que hice”, expresó, aunque renglón seguido repasó su “resistencia” a la privatización de YPF. “No tiren tanta bosta contra la década del ’90”, agregó Camaño para criticar las postura de muchos miembros del actual Gobierno de acompañaron la privatización y hasta confundió voluntariamente el nombre de la presidenta Cristina Kirchner con el de Carlos Menem.
Su interbloque de todas maneras votará dividido. Camaño acompañará el dictamen de la mayoría de los peronistas disidentes encabezados por el Francisco De Narváez y los diputados alineados con los Rodríguez Saá. En tanto, el dirigente sindical petrolero Ricardo Roberti y Alfredo Atanasof votarán a favor de la expropiación.
El plenario de comisiones fue apenas un adelanto de los que sucederá desde el miércoles próximo cuando el proyecto se discuta en el recinto de Diputados, donde habrá dos días para el debate que culminará el jueves 3 de mayo. Se estima que, como sucedió durante la discusión por la Resolución 125, habrá cerca de 220 oradores y alrededor de 20 horas de debate.
Página/12
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YPF: se agrava la rebelión en el radicalismo por el apoyo de Afonsín al Gobierno
Un grupo de entre 12 y 14 diputados radicales, encabezados por el cordobés Oscar Aguad, se reunió con el presidente del partido, Mario Barletta, y con el titular de bloque, Ricardo Gil Lavedra, para plantear su rechazo a la decisión de acompañar el proyecto del Gobierno para expropiación YPF. Exigen que les permitan abstenerse en la votación o abandonar el recinto
Mientras el plenario de las comisiones de Presupuesto y Hacienda, Energía y Combustibles, y Asuntos Constitucionales sesionaban en la Cámara de Diputados, en el bloque radical terminó de estallar la interna. Un grupo de entre 12 y 14 legisladores se rebeló contra la decisión de acompañar el proyecto de ley del Gobierno para expropiar el 51% de las acciones de YPF.
En rigor, ninguno está en contra de la nacionalización de los recursos hidrocarburíferos, pero no comprender por qué habría que votar esta iniciativa oficial, cuando en realidad todos los radicales critican, entre otras cosas, el modo y los actores que quedarían al frente de la empresa, porque son los mismos que condujeron a la actual crisis energética.
Según pudo averiguar LPO, algunos de los legisladores que no quieren acompañar la estrategia del alfonsinismo son Oscar
Aguad, de Córdoba; Hipólito Faustinelli, de esa misma provincia; Jorge Alvarez, de Santa Fe; Hugo Castañón, de Río Negro; Olga Brizuela y Doria de Cara, de La Rioja; Mario Barbieri, de Buenos Aires; Linda Yagüe, de Neuquén; Rodolfo Fernández, de Corrientes; y Daniel Kronerberger, de La Pampa.
“Un radical nunca puede estar en contra”, explican desde ese sector “rebelde”. Y agregan: : “Criticamos a De Vido, decimos que los culpables de la crisis energética son los kirchneristas, nos oponemos al modo en que se está expropiando, pedimos que se nacionalice el 100% de la compañía con pago previo de la indeminazión, exigimos un cuidado riguroso para no perjudicar nuestros vínculos con el mundo -como ya está sucediendo-, pero resulta que después le votamos el proyecto. Es una locura”.
Hace algunos días, este sector mantuvo una reunión con el presidente del partido, el santafesino Mario Barletta, para pedirle que cumpla con un rol de mediador. Le explicaron que no quieren oponerse al bloque votando en contra, pero insisten en que al menos los habiliten a abstenerse, con uso de la palabra en el recinto.
El mismo planteo le hicieron a Ricardo Gil Lavedra. La respuesta fue que lo seguirían conversando. El miércoles 3 de mayo, previo a la discusión en el recinto, habrá una reunión de bloque, donde se volverá a plantear el tema. Allí se llegará a un acuerdo, o la interna terminará de estallar. “Si no nos quieren dejar abstenernos, plantearemos que nos iremos del recinto al momento de la votación. Pero no vamos a votar a favor”, dijeron a LPO.
El fondo de la cuestión es que el grupo liderado por Aguad considera que el radicalismo tiene que plantear una oposición fuerte en la cámara de diputados. “Lo que hace Alfonsín es tibio, y después la gente termina votando por el gobierno. Dicen que el límite es Macri, pero hace unos meses armó alianza con De Narváez”, plantean.
Efectivamente, no es la primera vez que la UCR vota con el Gobierno. La transferencia del subte, premetro y 33 líneas de colectivos a la Ciudad de Buenos Aires también fue aprobada con el apoyo de la UCR.
“¿Por qué no intentamos avanzar con el proyecto que la propia UCR tiene en Diputados, firmada por Gil Lavedra, que es mucho más seria que la del Gobierno? Tenemos un proyecto propio, pero terminamos votando al del Gobierno. No pedimos una oposición alocada, pero tampoco una postura tan tibia”, plantearán.
La respuesta de Alfonsín
Mientras tanto, Ricardo Alfonsín intentó desmentir que algunos de sus colegas vayan a mostrar una postura contraria al bloque. “Si queremos ser previsibles, los partidos no pueden transformarse en un conjunto de librepensadores”, lanzó el ex candidato presidencial.
Sostuvo que, más allá de las diferencias expresadas por algunos radicales durante el reciente debate partidario para definir la posición frente a este tema, se decidió apoyar el proyecto y alertó: “No creo ahora que hayan cambiado de opinión y que no cumplan el compromiso asumido en esa ocasión”.
Y ratificó que votarán en general a favor de la expropiación de la petrolera, “sin perjuicio de la diferencias que tenemos y sin perjuicio de responsabilizar al Gobierno y al actual esquema por el desastre al que hemos llegado. Peor que esto no puede haber nada”.
La Política Online