» El grupo energético italiano Eni dijo que espera un incremento en su producción este año gracias a la recuperación de sus actividades en Libia, aunque su ganancia subyacente en el segundo trimestre no logró cumplir con las expectativas.
Eni, que es controlada por el Estado, dijo que el crucial reinicio de la producción en Libia a niveles previos al conflicto compensaría los retrasos en algunos emprendimientos importantes, el impacto de una filtración en la plataforma de Elgin en el Mar del Norte y el auge de los sabotajes y robos en Nigeria. Previamente Eni, uno de los mayores productores extranjeros de petróleo y gas en Africa, dijo que había hecho un nuevo descubrimiento en su campo en Mozambique que podría llevar las reservas de gas en el lugar a un estimado de 1.974 millones de metros cúbicos.
Durante el año pasado, Eni despejó algunas preocupaciones sobre su rentabilidad y potencial de crecimiento de largo plazo al registrar exploraciones exitosas en Noruega y especialmente en Mozambique. “Hubo algo de decepción sobre el desempeño de la producción y exploración, pero eso fue más que compensado por el entusiasmo por nuevos descubrimientos como el de Mozambique”, dijo Jason Kenney, analista de Santander. En una declaración, Eni dijo que su ganancia ajustada neta en el segundo trimestre subió un 2 por ciento a 1.460 millones de euros. Analistas encuestados por Reuters habían anticipado en promedio una ganancia de 1.542 millones de euros.
Las ventas del negocio de gas del grupo continuaban pesando sobre los resultados. La débil demanda y condiciones de competencia más duras llevaron a una caída de un 4 por ciento en las ventas. Para todo el año, la empresa dijo que espera que su producción de petróleo y gas crezca en torno a un 10 por ciento, descontando el impacto de acuerdos de producción compartida, la filtración en la plataforma Elgin y los sabotajes en Nigeria. Eni dijo que ofrecerá un dividendo provisional de 0,54 euros por acción comparado con los 0,52 euros de un año atrás.
El grupo está en proceso de vender su participación controladora en el operador de gas Snam, lo que podría generar cerca de 7.000 millones de euros en efectivo y eliminar unos 11.000 millones de euros de deudas de su hoja de balance. Eni, que también está vendiendo un 33 por ciento de participación en la portuguesa GALP, pretende usar el efectivo para reducir su deuda y enfocarse mejor en su producción de petróleo y gas. “Con la desinversión de nuestras particiones en Snam y Galp se transformará nuestra hoja de balance, asegurando nuestra capacidad para financiar un crecimiento robusto a largo plazo en cualquier ambiente de mercado”, dijo el presidente ejecutivo de Eni, Paolo Scaroni.
Fuente: International Business Times
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