Formosa, 26 de octubre de 2012
Gral. Belgrano, Formosa.
El ciudadano Cristian Fabián Penayo denuncia haber sido víctima de apremios ilegales por parte de efectivos policiales de la comisaria de Gral. Belgrano, provincia de Formosa.
A continuación el relato de Cristian Penayo:
“Yo soy Cristian Penayo, hijo de Orfilia Amarilla y Jorge Penayo, soy nacido y criado acá en Gral. Belgrano, tengo 21 años, pero hace un par de meses fui a trabajar en construcción en la ciudad de Formosa, vine a Belgrano para ver a mi hijo y pasar el día de la madre con mi mamá, pero ese fin de semana tuve un problema inesperado… un hecho desgraciado…”
“Resulta que el domingo 21 de octubre, tipo 02:30 hs de la madrugada, aproximadamente, fuimos al boliche con Walter Peralta, un conocido, estuvimos en el boliche como hasta las 04 de la madrugada, al salir fui a hablar con un muchacho que se llama Jacinto, estábamos en frente al boliche ahí sobre la Av. del Libertador, momento en que escucho que alguien me nombra, cuando intento girar alguien me pega por la cara y me tira al piso, inmediatamente el policía Gauna, que estaba de civil y trabaja de patovica; me agarra y me aprieta con su rodilla sobre mi columna contra el piso mientras otros 4 policías se acercan y me esposan… al mismo tiempo el policía Sergio González me empieza a patear…”
“Me levantan del piso esposado y González me sigue pegando con la mano por el estomago…, de ahí me llevan a la comisaria mientras me siguen pegando cachetazos y patadas, la comisaria queda del lugar aproximadamente 300 m o menos; me meten en la comisaria y me esposan por las rejas del calabozo, González me sigue pegando por el estomago, los golpes hace que yo pierda la respiración, entonces otro policía, que no tenía el porta apellidos en el uniforme, me pega con la cachiporra por la rodilla y me exigía que me levante…”
“Yo no podía levantarme, no tenía fuerza y me dolía mucho la rodilla, entonces uno de los policías me pone la cachiporra contra la garganta y me cuelga con ella… me preguntan hijo de quién era y que hacía por Belgrano?, mientras el policía González me seguía pegando, González me decía que no grite porque si gritaba me iban a hacer peor…”
“Me sentía mal… sentía que iba a desmayar… les pido agua para tomar…, González agarra un balde con agua y me tira por la cara. Luego sale un policía de la oficina, creo que era oficial, se acerca y me revisa los bolsillos, me quita la billetera, extrae mi plata y se queda con ella… me dice vos estabas sin plata, le digo que yo tenía plata en la billetera, entonces me siguen pegando para que dijera que yo no tenía plata… y me hicieron jurar que yo no iba a hablar con nadie de lo que me estaban haciendo…”
“Me dejan parado contra las rejas unos minutos, luego el policía González vuelve a pegarme, al rato me sueltan y me dejan sentado en la sala de esperas, se reúnen los 5 policías que me maltrataron y pegaron y me dicen que no vuelva al pueblo de Belgrano, de lo contrario la próxima vez va a ser peor…; les pido para pasar al baño y como respuesta el policía González me da un cachetazo…”
“a continuación, me vuelven a poner la esposa, me tiran al piso, González me pisa el cuello, hablaban y se burlaban de mí, me hacen sentar, me sueltan y me dicen que me vaya, salgo de la comisaria, González me sigue y me agarra del cuello, me tironea y me lleva al hospital…, el hospital queda de la comisaria cerca de 400 m”.
“Me conduce a la guardia del hospital, González me dice que debía decir que estaba bien y que no me pasaba nada; me atiende una doctora, me pregunta si yo tenía algún dolor; González me tenia agarrado y amenazado, no podía decirle nada a la doctora; la doctora le da un papel a González, pienso que era un certificado, pero ella no quiso o no pudo evaluar mi situación, no sé…”.
“Cuando salimos veo que había 2 policías más en la puerta del Hospital, González me trae esposado por la Av. del Libertador hasta la última rotonda, a dos cuadras y media del hospital, en ese transcurso me sigue golpeando e insultando, los otros policías nos seguían a pocos metros, González me suelta en la última rotonda, me dice que no mire para atrás, que me vaya a mi casa, me dijo que si yo contaba lo que ellos me hicieron que el me iba a matar, dijo si hablas SOS boleta”.
“De ahí caminé casi 2 cuadras, pero no tenía más fuerza, me encontró una señora conocida de la familia y recurrió a un vecino a pedir auxilio, el señor muy amable me llevó hasta la casa de mi familia, pienso que llegue entre 6,30 hs o 7 hs de la mañana, yo estaba destruido; en mi casa me preguntan que me pasó y yo no les quería contar la verdad, imagínate con las amenazas que me hicieron los policías, yo tenía mucho miedo”.
·Cuando le preguntamos, ¿Por qué no recurrió al médico en otro hospital y porque no hizo la denuncia inmediatamente? Cristian contesto:
“Los policías se burlaron de mí, me golpearon mucho, me dijeron que me van a hacer algo peor, y González me amenazó de muerte si hablaba, yo… tengo mucho miedo. Mis viejos me querían ayudar porque me veían muy mal, pero yo tengo mucho miedo”.
Cristian F. Penayo afirma que los policías involucrados en el procedimiento no tenían porta apellidos en sus uniformes, pero que si los ve está seguro que los reconocería; respecto a González y Gauna afirma que los conoce porque son de Belgrano.
Desde el MoCaFor, solicitamos a las autoridades competentes del Gobierno Provincial y la Justicia que se inicie una urgente investigación, se esclarezca el hecho, y se castigue a los responsables. Hoy día, a simple vista a Cristian se lo ve mal tiene apariencia de enfermo y claro dice que le sigue doliendo varias partes del cuerpo.
Jorge Penayo y Orfilia Amarilla, padres de Cristian F. Penayo, son militantes del MoCaFor, a su vez es sobrino de Ermindo Penayo quien también sufrió apremios ilegales y hasta la fecha no se hizo justicia.
Compañeros/as, solicitamos difusión de la presente denuncia pública.
Desde ya muchas gracias.
Benigno López
del Movimiento Campesino de Formosa
Cel.: 0370-4531814