El acuerdo alcanzado entre el Gobierno y la petrolera española Repsol por la expropiación del 51% de las acciones de YPF recibió dictamen favorable, al cabo del plenario de comisiones del Senado que lo tenía en estudio, y quedó en condiciones de ser debatido el miércoles venidero en el recinto de sesiones.
El expediente será tratado la próxima semana en el Senado para luego ser girado a Diputados para su aprobación definitiva, que se estima se produciría el 23 de abril, señalaron fuentes parlamentarias.
El dictamen fue firmado luego de tres audiencias llevadas a cabo desde la semana pasada, por donde desfilaron expertos en materia energética a pedido del oficialismo y de la oposición.
El proyecto fue avalado por el Frente para la Victoria y sus aliados, además de los representantes del Movimiento Popular Neuquino, mientras que el radicalismo y el interbloque de UNEN expresaron su disconformidad.
Durante la audiencia expusieron el ex secretario de Energía del gobierno de Raúl Alfonsín, Gustavo Callejas, y el representante de la Asociación de Superficiarios del Petróleo de la Patagonia (Assupa), Eduardo Mertehikian.
El jefe del bloque de senadores del oficialismo, Miguel Pichetto, dijo que entendía las preocupaciones en torno al cuidado del medio ambiente formuladas desde la oposición, y destacó “el esfuerzo de la nueva conducción de YPF para dar instrumentos de control ambiental”.
No obstante, cuestionó la negativa de la oposición en apoyar el acuerdo al asegurar que “esta negativa a priori nos lleva irremediablemente como país al fracaso definitivo”, ya que “no hay contaminación más grande que la pobreza extrema”.
El senador se refirió a “la falta de trabajo para los argentinos” que conllevaría no avalar el acuerdo, dijo que Argentina está ante “un desafío extraordinario” y afirmó que en “esta década que viene o tenemos autoconsumo petrolero o estamos camino a la derrota como país y no vamos a tener elementos que puedan emitir que la Argentina crezca”.
Pichetto advirtió en ese sentido que “el déficit energético produce una erogación de divisas importante que afecta al crecimiento del país”, aclaró que el oficialismo está dispuesto al debate pero pidió “afrontar con coraje argentino el proyecto del desarrollo del petróleo y esa riqueza impresionante que tenemos”.
El presidente de la comisión de Minería, Energía y Combustibles, Guillermo Pereyra, rechazó los cuestionamientos de la oposición y aseguró que la actual gestión de YPF está adoptando “todas las medidas necesarias para el cuidado del medio ambiente”.
“Durante la época de Repsol no lo logramos pero sí en esta YPF, que está llevando a cabo un trabajo realmente importante en la remediación del suelo” para evitar la contaminación del río Colorado.
En tanto su par del oficialismo Marcelo Guinle evaluó que “todo desarrollo conlleva riesgos” y opinó que “no hay que tener hipocresía en el tratamiento de las cuestiones”.
Durante su exposición de hoy el ex secretario Callejas expresó su desacuerdo con el acuerdo con la petrolera española, al considerar que Argentina tendría que haber pagado “mucho menos” que los 5.000 millones de dólares que le abonará a Repsol por la expropiación de YPF.
“Repsol se llevó en cinco años 15.000 millones de dólares, la tasa interna de retorno que fue de las más grandes del mundo”, precisó, y consideró que “se podría haber negociado mejor”.
El representante de Assupa informó que esa organización encaró cinco demandas para obtener una recomposición por “el ambiente dañado por la explotación hidrocarburífera durante el tiempo que las compañías han funcionado”.
Por su parte el senador por el socialismo Rubén Giustiniani, sostuvo que le gustaría que “alguna vez pidan perdón por la privatización de YPF” a la que calificó como “dramática”.
Respecto a los cuestionamientos de la oposición sobre la falta de controles en empresas como YPF, el senador también oficialista Marcelo Fuentes aseveró: “No conozco ninguna empresa que no tenga controles” y aseguró que YPF “tiene auditorías internas”.
El oficialismo también rechazó las críticas del radicalismo en torno a la tasación efectuada previo al acuerdo alcanzado entre Repsol y el Gobierno.