Quiso transferir pérdidas a la Argentina.
El ministro de Planificación, Julio de Vido, lanzó un duro ultimátum a la minera brasileña Vale, que recientemente anunció el renunciamiento al proyecto minero en Mendoza. “Si no explota la mina se violenta contrato de concesión”, advirtió el funcionario durante un duro discurso emitido en Casa Rosada.
De Vido afirmó este miércoles que la empresa Vale “no cuida su caja” y advirtió que “si no produce y explota la mina” de potasio ubicada en Mendoza “se violenta el contrato de concesión” firmado con la provincia.
“La seguridad jurídica en cuestión de inversiones es un camino de doble ida y vuelta. El Estado debe cumplir, pero también deben cumplir las empresas inversoras”, aseveró el ministro y recordó que en este caso Mendoza es la propietaria titular de los recueros mineros y que es la provincia la que puede rescindir el contrato.
De Vido alertó que Vale intentó transferir millonarias pérdidas que registró la compañía a nivel mundial al Estado argentino, reclamando mayores exenciones impositivas para continuar con el emprendimiento, que ahora pasará a manos de YPF. De ese modo, buscan evitar el desembolso de entre 2.600 y 3.000 millones de dólares y evitar la construcción de obras de infraestructura vial, portuaria y de viviendas.
“Ya tienen ventajas comparativas producto de una ley que promociona la actividad” minera, describió el ministro y nombró las facilidades para manejar la deuda en caso de quebranto, según la conveniencia fiscal de la empresa, la amortización acelerada y la deducción de ganancias presuntas, entre otras.
Según el funcionario, en diciembre, Vale dijo que se incrementó el presupuesto del proyecto en Mendoza de 5.900 millones de dólares a 8.000 millones de dólares y que en enero anunció una pérdida mundial, y que los costos se fueron a 12.000 millones de dólares, cuando “ningún bien se encareció 80% en un mes”.
Sin embargo, De Vido mencionó que en los últimos meses Vale anunció el desprendimiento de activos como buques cargueros y la cancelación de otros proyectos mineros en varios países del mundo por millones de dólares, que buscaban compensar con la exención impositiva en la Argentina. “Fue una tendencia global, nada tiene que ver con nuestra coyuntura”, sostuvo.
Para remediar esas supuestas pérdidas, el titular de Planificación sostuvo que Vale además de las ventajas promocionales de la ley, “nos estaba solicitando para corregir esa defasaje la devolución anticipada de IVA, que prácticamente significa no pagarlo, compra de bonos a valor nominal (para luego venderlos a precio de mercado), la eliminación de algunas obras de infraestructura, la eliminación de derechos de exportación y un tipo de cambio diferenciado”.
“Con esos beneficios querían juntar 3.000 millones de dólares. Todos los activos que se desnacionalizaron, se regalaron durante la década del noventa, se hicieron de esta manera, pero ahora no. Con la nuestra, con la (plata) de los argentinos, querían pagarse el quebranto, la deuda” a nivel internacional, aseguró.
Asimismo, De Vido informó que a la hora de firma el contrato por la explotación del yacimiento Río Colorado de la localidad de Malargüe, la compañía fijó un domicilio en Holanda, y que según le “conviene”, se presenta como brasileña o como multinacional. “Pero acá actúa en términos jurídicos, en término legales, como si fuera una empresa radicada en los países bajos. Actúa en los papeles y en los hechos”, remarcó al advertir la maniobra de transferencia de deuda.
“Si tuviera bonos de Vale, estaría preocupado porque ha violentado las leyes en la Argentina”, completó y afirmó que el Gobierno tampoco está dispuesto a aceptar la salida de Vale del Mendoza sin resarcimientos a cambio de otra megaobra. “No vamos a cambiar un yacimiento de potasio a cambio de una represa hidroeléctrica. No canjeamos este proyecto por nada. No es que dejamos de hacer esto y hacemos aquello. Nosotros somos como Kirchner, siempre vamos por más. El potasio es importante para los alimentos y la represa para la energía, las dos cosas son importantes”, consideró.
Además, anunció que la Nación colabora con el gobernador Francisco “Paco” Pérez para analizar los incumplimientos de contrato y las posibles compensaciones. “Estamos trabajando para que Mendoza haga cumplir la seguridad jurídica, la misma que tiene Vale hasta en tanto cumpla y haga cumplir las normas”, declaró.
Por último, envió un mensaje a los directores de la empresa brasileña. “No vamos a pagar con impuestos que deberían pagarse al tesoro argentino el quebranto de ninguna empresa, y menos por esos montos”, sentenció.
Ambito
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La minera brasileña: Se cae el proyecto de Vale y amenazan con 6.800 despidos
LA MAYOR INVERSIÓN PREVISTA EN EL PAÍS.
Ayer comenzó a desmantelarse una obra millonaria en Mendoza que estaba parada desde el 22 de diciembre. Hoy, una audiencia clave en el Ministerio de Trabajo entre la empresa y los afectados.
La planta de la minera Vale en Malargüe comenzó ayer a desmantelarse y crece la incertidumbre por los 6.800 puestos de trabajo en riesgo en Mendoza y otras tres provincias involucradas en el Proyecto Potasio Río Colorado.
El gobernador mendocino Francisco Pérez adelantó que estudia aspectos legales para quitarle la concesión a la minera brasileña y reactivar el proyecto, asociado el Estado con inversores extranjeros. “ Se rompieron las relaciones con la empresa. El proyecto no se cae, continúa sin Vale ”, dijo Pérez y calificó la medida del cese de actividades como: “una decisión intempestiva, sin argumentos sólidos”.
Hoy a las 15, hay una audiencia de conciliación en el Ministerio de Trabajo de la Nación con delegados de Vale y los gobiernos afectados.
Incidentes con heridos en una marcha de desocupados en el concejo deliberante de Malargüe dieron el alerta del enorme impacto social que significa el parate.
“En 15 días, Potasio Río Colorado podría quedar desierto y es el velatorio del proyecto”, afirmó Carlos Ferrer, presidente de la Cámara de Servicios Mineros de Mendoza.
Incredulidad, bronca, frustración y otros tantos estados de ánimos manifestaron los trabajadores y proveedores de Vale en Mendoza, donde más golpea la suspensión de la obra de la minera brasileña. De los 6.800 empleados afectados, cerca de 4.300 son trabajadores mendocinos y el resto de Río Negro, Neuquén y Bahía Blanca, donde se construía un ramal de ferrocarril que concluía en un puerto propio en Ingeniero White.
Hay otros 7 mil empleos indirectos vinculados a las 250 pymes que prestaban servicios al proyecto Potasio Río Colorado. “Ayer se dieron de baja 700 contrato s vinculados a la UTE de Skanska y estamos evaluando cómo distribuir a los obreros en otros proyectos y mitigar el impacto social”, contó el empresario mendocino Fernado Porreta, contratista del Estado y al frente de la filial local de la Cámara Argentina de la Construcción.
El megaproyecto de 5.900 millones de dólares llevaba un año y medio de ejecución en Malargüe, a 400 kilómetros al sur de la capital mendocina. A ese tranquilo poblado que vive del petróleo y el turismo, se había mudado una buena parte de los trabajadores mendocinos atraídos por el proyecto. “No entiendo. Esto nos iba a dar trabajo por 50 años”, se lamentaba el delegado de la UOCRA, Gabriel Flores. El intendente de Malargüe, Juan Antonio Agulles, trató de calmarlos: “Vamos a pedir que se mantengan los puestos de trabajo”.
El gobernador mendocino voló a Buenos Aires a reunirse con el ministro Julio De Vido y dijo que la Presidenta le pidió que “el proyecto siga con o sin Vale”. En conversaciones privadas, funcionarios mendocinos reconocían que habrá distintas manifestaciones de repudio, como cortes de ruta y movilizaciones de los trabajadores. “Hay que salir a luchar, a buscar soluciones”, planteó el delegado de la UOCRA.
La mina dejó de operar el 22 de diciembre. Desde entonces está paralizada pero el personal siguió cobrando.
El último compromiso firmado por la Dirección de Minería de Mendoza y Vale garantiza el pago de salarios hasta la primera quincena de marzo. “Es una incógnita si seguiremos cobrando, nadie se ha comunicado con nosotros”, dijo Pablo un profesional que trabaja para el consorcio Potasio Río Colorado.
iEco
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Para el titular de los industriales brasileños, Vale abandonó el proyecto por culpa de la economía argentina
El presidente del Consejo de Comercio Exterior de la Federación de Industriales de la ciudad brasileña de San Pablo, Rubén Barbosa, dijo que Vale retome el proyecto inmediatamente.
El presidente del Consejo de Comercio Exterior de la Federación de Industriales de la ciudad brasileña de San Pablo, Rubén Barbosa, sostuvo hoy que la compañía Vale se retiró del proyecto minero en Mendoza “por las circunstancias de la economía argentina”.
“Son problemas muy serios para la compañía porque por la situación internacional y los problemas cambiarios y de inflación los costos han aumentado muchísimo en la Argentina y Vale es una compañía estatal no privada decidió postergar el proyecto”, dijo en declaraciones a radio Mitre.
Ayer la Casa Rosada emitió un comunicado que indica que van a buscar medios para continuar el proyecto. Para Barbosa, el mensaje oficial fue “positivo”. “Hay una actitud de cooperación de ambas partes. Vale no cerro las puertas y el Gobierno tampoco cerró las puertas”, dijo y añadió: “Lo importante es que se dejan las puertas abiertas para un posible entendimiento”.
“Si bien la nota del Gobierno local pone la culpa en Vale, que unilateralmente decidió suspender el proyecto el Gobierno argentino dice que va a buscar todos los medios para continuar el proyecto que sigue teniendo atractivo económico y financiero y que espera que Vale si obtiene lo que quiere, siga con el proyecto”, dijo Barbosa. “Pero con los costos tan altos si no hay una contrapartida argentina como pidió Vale será muy difícil retomar ahora el proyecto porque el monto es muy alto, 10 mil millones de dólares, el doble de lo pensado inicialmente”, agregó.
Según el funcionario brasileño, Vale interrumpió el proyecto por las dificultades que se encontró con la economía argentina, la burocracia y los costos adicionales de producción, creo que con la caída de los precios internacionales por la desaceleración del crecimiento en el exterior.
Ayer, el gobernador de Mendoza, Francisco Pérez, afirmó que la decisión política tanto de su gobierno como el de la Nación es continuar con el proyecto de potasio en el sur de la provincia “bajo cualquier tipo de circunstancia”, aun con la retirada de Vale.
El anuncio de la suspensión del emprendimiento formulado el lunes por la compañía, motivó la preocupación de los trabajadores afectados, que temen la posibilidad de un “estallido” en el sur mendocino.
El proyecto de extracción de potasio para producir fertilizantes incluía, además de la mina en Mendoza, una vía férrea y una terminal portuaria en Bahía Blanca.
iEco