Es antes del encuentro de Cristina y Dilma que comienza hoy. Intentan que haya un acuerdo con los trabajadores.
Dilma Rousseff adelantó su viaje a Buenos Aires, y llegará al mediodía de hoy, no a última hora de la tarde, como se la esperaba. Eso deja menos tiempo para una negociación clave, la que busca un acuerdo por los trabajadores de Vale, un tema central en el encuentro que hoy y mañana tendrá la presidenta brasileña con Cristina Kirchner.
Ayer, en la Casa Rosada anunciaron que Dilma llegará a buenos Airs al mediodía. Antes se la esperaba a las 6 de la tarde. Así, se podrá reunir con Cristina a primera hora de la tarde, arrancando la ronda de negociaciones bilaterales antes. A la noche, compartirán una cena en el Museo del Bicentenario, la antigua Aduana, detrás de la Casa Rosada.
En tanto, ayer había febriles negociaciones entre Vale, el gremio de la construcción (UOCRA) y los contratistas de la empresa brasileña en la obra de la mina de potasio de Mendoza. Buscaban un acuerdo sobre el pago a los trabajadores del emprendimiento “antes de que se reúnan las Presidentas, para que este tema no complique el encuentro”, dijo un hombre ligado a esa discusión.
Vale es una empresa en la que el estado brasileño tiene participación, por lo que sus movimientos son medidos de otra manera. Dilma, así, tendría que dar cuenta en Buenos Aires de por qué la compañía levantó campamento de Mendoza, dejando 6.000 personas al borde del desempleo. “Ahora lo que se discute es algún tipo de acuerdo para extender los pagos al personal por más meses ”, dicen fuentes ligadas a la negociación. Hoy los despidos están frenados por un “procedimiento de crisis” dictado para extender la conciliación obligatoria que venció el jueves pasado.
La situación de Vale se ha transformado en un eje central de la relación bilateral, y las presidentas no podrán eludirlo. Pero no será el único que pondrán sobre la mesa. Cristina Kirchner aseguró ayer que (con Rousseff) “hablaremos de cómo logramos entre argentinos y brasileños desarrollar el sector autopartista, que genera tanto valor agregado y trabajo”. Se refiere a una negociación clave: cómo encarar el acuerdo automotriz que vence a mitad de año. Pero pese al anuncio presidencial, no hubo reuniones técnicas de funcionarios y/o empresarios para avanzar con el tema. “Lo que habrá, entonces, será una definición política de las presidentas”, arriesgaron ayer en una automotriz.
En la agenda hay otros temas urticantes: la venta de los activos de Petrobras a Cristóbal López, la denuncia de coimas de Embraer en la venta de aviones a Austral, las restricciones al comercio bilateral, las quejas de los industriales paulistas porque dicen que pierden mercado frente a China. Pero en Brasilia buscan dar otro tono al encuentro.
“Argentina es el principal socio político de Brasil, e iremos allí para dar nuestro más fuerte respaldo ”, dijo una alta fuente del Poder Ejecutivo brasileño consultado ayer sobre la vista presidencial. Los funcionarios de Brasilia dicen que “ Vale es un caso aislado ”. Y van más allá, señalan que los temas de la agenda, por complejos que sean, “no afectarán la relación”. “Al margen de las diferencias que puede haber,Argentina es nuestro socio más importante, y ese será el tono del encuentro”, aseguró el mismo funcionario.
Más allá de los apoyos políticos, de todas maneras, Dilma Rousseff tendrá un gesto importante con Cristina. Ayer trascendió en Brasil que se anunciará aquí que el BNDS otorgará el crédito de US$ 1.500 millones para el soterramiento del ferrocarril Sarmiento, una obra clave para el tren más cuestionado.
iEco
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Con Vale y automotrices de fondo, ya se reúnen Cristina y Dilma
La presidente Cristina de Kirchner recibe en Casa Rosada a su par de Brasil, Dilma Rousseff, con quien abordarán diversos temas de la agenda bilateral, entre ellos la situación de la minera Vale y el acuerdo para la industria automotriz.
Rousseff entró por el Salón Sur de la Casa de Gobierno, que da a Paseo Colón, donde fue recibida por Cristina y saludada por el gabinete completo. Luego pasaron al despacho presidencial donde mantuvieron un encuentro bilateral. Pasadas las 15.30, las mandatarias se trasladaron al Salón Eva Perón para sumar a ministros de sus gabinetes.
En el Salón de los Científicos aguardan los funcionarios de ambos países, que van ingresando al encuentro con las mandatarias en la medida que son convocados.
Trascendió que ambas mandatarias estarían molestas por los escasos avances que hubo en distintos tópicos de integración conversados en las últimas dos reuniones, una de ellas fin de año en el marco de la Conferencia Anual de la UIA.
Uno de los puntos en los que no habría muchos avances es en el acuerdo automotriz. La idea de Cristina y Dilma es trabajar todo el tiempo que demande y de ser necesario, Dilma se quedará hasta este viernes. La jornada de hoy culminará con una cena en el Museo del Bicentenario, donde harán una conferencia de prensa.
Tanto en Brasil como en Argentina las terminales automotrices son empresas de origen extranjero, explicó la presidente Cristina de Kirchner: “Por eso, es tan importante esta asociación estratégica con Brasil para desarrollar el sector autopartista. ¿Por qué? Porque agrega mucho valor”. Continuó explicando que la intención es que Argentina pueda a dar impulso a su sector autopartista y anticipó que este tema lo conversará con Dilma Rouseff en el encuentro que mantendrá a partir del mediodía en la Casa Rosada.
“Por eso también parte de la charla, que vamos a tener, cuando nos visite nuestra amiga, colega y compañera Dilma Rousseff, va a ser, precisamente, saber cómo logramos entre argentinos y brasileños seguir consolidando y desarrollando el sector autopartista, que es tan importante porque genera mucho valor”, dijo Cristina.
Por su parte, la mandataria brasileña preguntada por los temas a tratar con su par de Argentina aseveró que traerá una “agenda positiva” marcando de esta manera el ánimo negociador con el cual viene. Estará acompañada de numerosos miembros de su gabinete para tratar diversos temas de comercio bilateral que no están exentos de problemas.
“Tenemos una muy amplia agenda con Argentina. Siempre hablamos de todo, el comercio, la inversión, vamos a discutir todos los temas”, señaló Dilma a medios periodísticos. “La visita del presidente de Brasil se puede extender hasta el viernes”, comentaban en Brasil fuentes oficiales. En la Rosada tienen previsto que pueda irse recién después del mediodía del viernes ya que se prevé una jornada de trabajo durante el jueves que culminará con una cena en el Museo del Bicentenario reservándose el viernes por la mañana para cerrar los temas que pudieran haber quedado pendientes.
La presidenta de Brasil llegó acompañada del canciller, Antonio Patriota, los ministros de Desarrollo, Industria y Comercio Exterior, Fernando Pimentel, de Pesca, Marcelo Crivella, nuevo ministro de Agricultura, Jorge Mendes Ribeiro, quien sustituye a Wagner Rossi, que renunció ante las denuncias que enfrenta por corrupción y la presidenta de Petrobras, María das Graças Foster, entre otros.
Los temas de agenda son numerosos, entre ellos Argentina seguramente insistirá con la promesa de Brasil de otorgar financiamiento por unos $ 1,5 mil millones para obras de la línea Sarmiento que cuenta con la participación de la empresa de Brasil Odebrecht.
Como anticipó Cristina los detalles de la nueva Política Automotriz Común (PAC) ocupará buena parte de la agenda bilateral. El acuerdo actual vence a mitad de año y a más tardar en agosto debería comenzar a regir el nuevo. En caso de no lograr cerrar este nuevo pacto, en teoría debería liberarse el comercio bilateral del sector, algo que se descarta en ambos países. Argentina intenta que numerosas empresas autopartistas se establezcan en el país ya que el país tiene una balanza deficitaria en autopartes.
Uno de los tópicos delicados a discutir es la decisión de la empresa minera Vale de abandonar el proyecto fabricación y el transporte de potasio que deja sin trabajo a unas 6.000 personas entre empleo directo e indirecto. Hoy rige la segunda conciliación obligatoria establecida por el Ministerio de Trabajo que ha frenado estos despidos.
La empresa justificó esta decisión en que los costos de la inversión aumentaron de 6 a 12 mil millones de dólares. En tanto, el ministro de Planificación, Julio de Vido acusó a Vale de haberle solicitado al Gobierno argentino más beneficios impositivos
“No podemos darles u$s 3.000 millones extras, sin ningún tipo de contraprestación; eso es robar, es un hecho delictivo, y nosotros no nos vamos a prestar jamás a expoliar de esa manera a los argentinos, como se los expolió en la década del noventa, cuando con los bonos basura, violentando la seguridad jurídica, las leyes de la Argentina y de Mendoza”, aseveró el funcionario.
Otro tópico que podía generar rispideces era la denuncia de Embraer de haber pagado sobornos en la Argentina para colocar 20 aviones a la empresa Aerolíneas. Pero, la rápida desmentida por parte de la empresa fue bien vista en el Gobierno argentino.
Los empresarios de Brasil vienen manifestando resquemor para invertir en la Argentina. Ya es conocida la decisión de Petrobras de ir liquidando activos y en Argentina sostienen que están bastante avanzadas las conversaciones con el empresario Cristóbal López, aunque la empresa petrolera brasileña desmintió que ya se haya alcanzado un acuerdo.
Otro aspecto que genera más de una fricción entre los empresarios brasileños son las trabas al comercio exterior establecidas por la Secretaria de Comercio, a cargo de Guillermo Moreno. Seguramente Pimentel vendrá con los números del INDEC que muestran con claridad cómo han caído las importaciones de Brasil a la Argentina.
• Política regional
Las dos mandatarias conversarán seguramente de la posibilidad de incorporar al Paraguay nuevamente en el Mercosur. Paraguay fue excluido del bloque y UNASUR debido a la polémica destitución del presidente Fernando Lugo, en junio pasado. Desde el domingo pasado cuentan con un presidente electo democráticamente. Asimismo, las demoras en avanzar en el acuerdo Mercosur y la Unión Europea será otro de los temas a conversar.
Aunque el tema comercial para Brasil, seguramente será el eje de las conversaciones. Es que Argentina ocupa el tercer lugar después de China y Estados Unidos de las exportaciones, y las ventas al país cayeron casi un 21% el año pasado.
Dante Sicca exsecretario de Industria de la Nación y director de abeceb.com afirmó que “no habrá que esperar resultados concretos de esta reunión como una solución al caso Vale por ejemplo”.
A juicio del economista, “en líneas generales todo el clima de negocios entre Brasil y Argentina está atravesando una etapa complicada”. Sicca señaló que “Quizás sólo haya que esperar de esta reunión de las presidentas algunos gestos que busquen una distensión para más adelante encarar los verdaderos desafíos”.
Lo cierto es que ambas mandatarias se profesan mucho afecto y en ambas existe la decisión de incrementar el comercio regional.
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