Campañas de exploración ya no solo buscan detectar reservas tradicionales para mantener y reponer actuales niveles de producción. Enap y Geopark están identificando el volumen de recursos no convencionales como el shale y el tight gas.
Este año se invertirían unos US$300 millones en la exploración de petróleo y gas en la región de Magallanes, cifra record que podría seguir creciendo en función de la necesidades de reponer e incluso aumentar la decreciente producción de gas natural. Desde el 2007 la búsqueda junto a privados se ha concentrado en las reservas tradicionales. Pero el boom del shale gas en Estados Unidos abrió nuevas perspectivas a ENAP y las siete privadas presentes en la zona sobre el potencial de los recursos no convencionales en la región.
Hoy las empresas están desarrollando una intensa actividad exploratoria. Por una parte, existe la necesidad de cubrir la demanda en el corto y mediano plazo mediante la extracción convencional del gas. Sin embargo, con el desarrollo de nuevas tecnologías en el rubro, la mirada se ha abierto a largo plazo hacia la posibilidad de extraer de manera competitiva shale y tight gas.
Si bien en el caso del shale gas hasta el momento no se cuenta con reservas oficialmente probadas, la EIA (Agencia Internacional de Energía) –según consigna en un informe de Nevasa– estima que el recurso económicamente extraíble en la Patagonia, tanto chilena como argentina, llegaría a 172 Tcf (equivalente al 3% de las reservas mundiales), de los cuales 64 Tcf estarían en territorio chileno. Los recursos en el lado nacional estarían concentrados principalmente en Tierra del Fuego, zona donde precisamente GeoPark ha comenzado a desarrollar exploraciones.
ENAP marcó la pauta
La estatal ha desarrollado en los últimos seis años un creciente plan de inversión en exploraciones que este ejercicio se coronará con una cifra cercana a los US$100 millones, Si bien los procesos de licitación para el desarrollo de exploraciones por parte de privados comenzaron el 2007, fue en los CEOP de mediados del 2011, donde se incluyeron cláusulas para la perforación de al menos un pozo de gas no convencional.
Esta directriz hoy marca pauta. Hace unos días el gerente general de Enap, Ricardo Cruzat, ya daba algunas luces de los proyectos que comenzarían a tomar protagonismo en Magallanes en los próximos años. “No podemos seguir haciendo más de lo mismo, es una realidad que queda menos gas y que cada vez es más caro sacarlo. Por eso estamos evaluando el potencial del tight gas. Lo que estamos por demostrar es la viabilidad de sacar gas no convencional”, afirmó.
En este contexto, ENAP programó para este año una campaña que contempla la realización de más de 20 pozos exploratorios de mayor profundidad, “cuyo desafío es probar el potencial de hidrocarburos no convencionales en la región”, señalaron desde la empresa a ESTRATEGIA. Para estos efectos la petrolera suscribió un arriendo de equipo con la multinacional PETREX para la perforación de pozos de hasta 6.000 metros de profundidad.
Methanex confirma potencial
El gerente general de Methanex, Paul Schiodtz, explicó a ESTRATEGIA que uno de los objetivos de estas inversiones es cuantificar con mayor precisión el potencial del gas no convencional. “Hasta ahora los resultados son alentadores y, según la información que disponemos, existe importante potencial en horizontes que hasta ahora no habían sido explotados y que hoy están siendo investigados por varias de las empresas participantes en la actividad exploratoria”. El ejecutivo agrega que “en el transcurso de los próximos meses esperamos tener más información que permita cuantificar dicho potencial”. Asimismo, la compañía destinará este año US$15 millones a exploración de gas.
También señaló que hay gas en Magallanes y que existen opciones competitivas para explotar las reservas no convencionales. Consultado por la razón que entonces motivó la decisión de trasladar dos plantas de la compañía a Estados Unidos, indicó que se consideró la oportunidad que representaba, dadas “las perspectivas de precios bajos del gas natural en América del Norte”, así como a la ubicación estratégica de Lousiana como centro de producción y consumo de metanol.
Geopark toma la delantera
Geopark se ha transformado en el privado más relevante. La empresa no solo ha impulsado intensas campañas de exploración en sociedad con ENAP, sino que ya cosecha sus primeros frutos con descubrimientos como el pozo Palos Quemados en el Bloque Tranquilo y la entrada en producción de los pozos como Yagán y Sauce en el Bloque Fell.
El año 2011 se adjudicó tres grandes bloques en Tierra del Fuego (Flamenco, Campanario e Isla Norte), lugar donde el pasado mes de abril comenzó con las exploraciones. En función de la información existente sobre la zona, un plan de inversiones en torno a los US$100 millones para el primer periodo de la fase exploratoria en Tierra del Fuego y el manejo –desde el 2012– de un proyecto piloto para evaluar el potencial de los recursos no convencionales en la zona, se cree que prontamente habrían novedades en la identificación de recursos no convencionales.
Estrategia, Chile