La empresa presentó medidas cautelares ante el Ciadi para frenarlo. La Argentina recusó a dos miembros del tribunal
La petrolera española Repsol busca frenar el avance del acuerdos entre YPF y Chevron en el tribunas arbitral internacional Ciadi. Allí presentó medidas cautelares para evitar que la petrolera estadounidense explote activos del megayacimiento Vaca Muerta. Estas medidas buscan que tanto el Gobierno como las provincias se abstengan “de realizar cualquier acto que implique la disposición de activos estratégicos de YPF”.
En tanto, la Argentina había pedido el miércoles pasado la recusación de dos miembros del tribunal de arbitraje que tratará el caso de la expropiación de YPF a Repsol. La petrolera argentina señaló además que Repsol “nunca fue propietaria de los derechos sobre Vaca Muerta”.
Ayer, el director financiero de la compañía española, Miguel Martínez, confirmó que Repsol “mantiene su actitud” abierta a un “acuerdo negociado” con el Gobierno, pero aclaró que cualquier eventual acercamiento se debe realizar “por los canales corporativos apropiados”. Además, reiteró su determinación de obtener una justa compensación, por lo que seguirá batallando en los tribunales.
Repsol había presentado en diciembre pasado una solicitud de arbitraje ante el Ciadi con el objetivo de que el Gobierno compensara la expropiación del 51% de las acciones de YPF que estaba en su poder.
Entre otras cuestiones, la petrolera tiene solicitada “la declaración de ilegalidad de la expropiación y la compensación o restitución de los activos expropiados”, de manera que cualquier acuerdo para explotar Vaca Muerta resulta, en su opinión, ilegítimo, porque pone “en peligro la integridad de la restitución”, según indicó la agencia EFE.
Además, Repsol criticó que Chevron ha actuado con un “doble rasero”, ya que mientras solicita “apoyo de la comunidad internacional” en algunos Estados, no tiene “reparo en aprovecharse” de la “confiscación” de YPF.
Al respecto, según fuentes de YPF citadas por la agencia Télam, los “activos y recursos –del yacimiento neuquino– siempre fueron propiedad de YPF S.A.”, por lo cual “YPF goza de plena autoridad legal para celebrar contratos y realizar cualquier operación comercial que considere conveniente”.
En su visión lo que Repsol pretende es que “YPF no explote sus activos, sobre los que tiene titularidad incluso antes de que Repsol entrara en el paquete accionario de YPF”.
Entre los accionistas de YPF, Repsol participa con el 11,8%, por lo que para YPF “la falta de ética es de aquellos que están operando en contra de los intereses de la compañía en la que son accionistas y tienen representantes en el directorio”.
A su vez, YPF “considera contradictoria esa actitud con la declaración formulada el 26 de junio último por el Consejo de Administración de Repsol, a favor de alcanzar una solución negociada y una actitud abierta al diálogo”.
Según los registros del Ciadi sobre la marcha de este procedimiento, la Argentina pidió que se retire a dos de los tres miembros del tribunal, el chileno Francisco Orrego Vicuña, propuesto por Repsol, y el mexicano Claus von Wobeser, propuesto por la presidencia del Ciadi, para encabezar el tribunal.
Cuando se produce una solicitud de recusación, el proceso queda suspendido hasta que el presidente del consejo del Ciadi decida, en un plazo que no puede exceder de treinta días, sobre las objeciones del demandado, en este caso la Procuraduría del Tesoro de la Argentina.
Repsol había propuesto a Orrego Vicuña para formar parte del grupo de arbitraje, mientras que la Argentina había propuesto a la francesa Brigitte Stern. Ambos habían aceptado entrar en el tribunal.
La presidencia del consejo administrativo del Ciadi, que corresponde al presidente del Banco Mundial, Jim Yong Kim, había propuesto a Von Wobeser para que presidiera el tribunal encargado de este caso.
Una vez constituido el tribunal del Ciadi, las primeras audiencias de arbitraje deberían comenzar en sesenta días, según el reglamento de este centro de arbitraje del Banco Mundial.
YPF cuestionó el pedido de Repsol
La petrolera española Repsol “nunca fue propietaria de los derechos sobre Vaca Muerta”, aclararon desde YPF al ser consultados por el pedido de esa empresa ante tribunales internacionales para evitar que la estadounidense Chevron invierta en el yacimiento argentino.
Desde YPF remarcaron que el pedido de Repsol “carece de fundamento jurídico ya que Repsol nunca fue propietaria de los derechos sobre Vaca Muerta”.
Asimismo resaltaron que los “activos y recursos -del yacimiento neuquino- siempre fueron propiedad de YPF S.A.”, por lo cual “YPF goza de plena autoridad legal para celebrar contratos y realizar cualquier operación comercial que considere conveniente”.
En su visión lo que Repsol pretende es que “YPF no explote sus activos, sobre los que tiene titularidad incluso antes de que Repsol entrara en el paquete accionario de YPF”.
Entre los accionistas de YPF, Repsol participa con 11,8% de las acciones por lo que para YPF “la falta de ética es de aquellos que están operando en contra de los intereses de la compañía en la que son accionistas y tienen representantes en el directorio”.
