El título resume la conclusión del informe Los subsidios a los combustibles fósiles en Argentina 2018-2019 de la Fundación Ambiente y Recursos Naturales, presentado en junio.
Entre otros puntos, el documento destaca que “los montos transferidos a las empresas dedicadas a la extracción de hidrocarburos -particularmente para la producción de gas- sumaron en 2018 US$ 340 millones; es decir, un 0,33% del presupuesto nacional y el equivalente a más de 5 millones de Asignaciones Universales por Hijo o al salario anual de 35.000 docentes de enseñanza inicial”. Mientras que este año “los subsidios a los combustibles fósiles suman más de US$ 6.000 millones, cifra que duplica lo que el Estado invirtió durante todo 2018 en Universidades Nacionales“.
“Los subsidios son una respuesta de corto plazo frente a problemas coyunturales, o bien una clara señal de los objetivos de un Estado. Históricamente, se los ha utilizado como herramienta para sanear situaciones conflictivas tanto a nivel social como económico, pero desde FARN hacemos hincapié en la necesidad de políticas públicas cuyos horizontes de planificación excedan los mandatos de un gobierno y se enfoquen en asegurar de la manera más justa la transición energética necesaria para un futuro sostenible.”