Conflicto: De los 18, 12 están afectados por contaminación de hidrocarburos y minería, y seis por otras prácticas.
Dieciocho territorios indígenas están amenazados por la contaminación u otro tipo de problemas socioambientales. De ese número, 12 están afectados por la explotación de recursos hidrocarburíferos y minerales.
Dieciocho territorios indígenas están amenazados por la contaminación u otro tipo de problemas socioambientales. De ese número, 12 están afectados por la explotación de recursos hidrocarburíferos y minerales.
Los datos fueron proporcionados por la Liga de Defensa del Medio Ambiente (Lidema) y el Foro Boliviano Sobre Medio Ambiente y Desarrollo (Fobomade). De las 18 áreas protegidas, nueve tienen problemas por la actividad hidrocarburífera: Madidi, Pailón Lajas, Carrasco, Isiboro Sécure, Tariquia, San Matías, Kaa Iya, Iñao y Aguaragüe. A éstas se suma Manuripi, donde se prevé la exploración hidrocarburífera.
Otras tres áreas son también afectadas por la actividad minera: Apolobamba, Eduardo Avaroa y San Matías. En total, son 12 los territorios indígenas que sufren los efectos de la explotación de recursos naturales no renovables.
El apu mallku del Consejo de Ayllus y Marcas del Qullasuyu (Conamaq), Rafael Quispe, denunció la semana pasada que el presidente Evo Morales tiene la intención de suspender la consulta indígena. El anuncio fue desmentido por el Gobierno nacional. Pero luego se supo que el Órgano Ejecutivo elabora dos reglamentos de consulta indígena en materia de hidrocarburos y de minería.
El primero es una modificación al existente con la intención de colocar límites a la indemnización, entre 0,5 y 1,5 por ciento de las inversiones. El segundo determina que es el Estado boliviano el que en última instancia tiene la palabra para autorizar o negar la exploración y explotación minera.
Otras regiones indígenas —Tunari, Sajama, Cotapata, Otuquis, Tipnis y la Estación Biológica del Beni— tienen otros problemas que tienen que ver con la apertura de caminos, la deforestación, tala indiscriminada de árboles, expansión de cultivos de coca, caza de especies silvestres, chaqueos y desmontes.
En 2009 se concluyeron seis procesos de consulta para la exploración y explotación de los recursos hidrocarburíferos en pueblos del norte de La Paz (weenhayek, lecos, mosetenes), comunidades campesinas y en regiones de Alto Parapetí, donde están los guaraníes.
Usan la compensación en producción
Los principales representantes de la Asamblea del Pueblo Guaraní (APG) y de la Confederación de Pueblos Indígenas del Oriente Boliviano (CIDOB) coincidieron en señalar que los recursos de compensación por explotación de recursos hidrocarburíferos son utilizados en proyectos agropecuarios, artesanía y ganadería.
El presidente de la APG, Celso Padilla, explicó que en el caso de las 22 capitanías, ellos deciden en qué rubro y cómo usar estos fondos. Además, dijo que el control se realiza mediante la comisión de seguimiento y fiscalización compuesta por la APG, las capitanías, las petroleras y el Gobierno. El máximo representante de la CIDOB, Alfredo Chávez, señaló que en los pueblos weenhayek y tapiete existe un control similar.
Fuente: La Prensa