WASHINGTON (AP).- Un sismo inusual de magnitud 5,6 que sacudió Oklahoma en 2011 probablemente fue ocasionado cuando residuos de perforación petrolífera fueron empujados al subsuelo profundo, concluyó un equipo de científicos universitarios y federales de Estados Unidos.
Ese sería el movimiento telúrico más poderoso atribuido a inyecciones profundas de agua residual, según un estudio publicado el martes por la revista Geology (Geología). Los residuos eran de perforación tradicional, no de la técnica de fracturación hidráulica.
El sismo ocurrido el 6 de noviembre de 2011 cerca de Prague, Oklahoma, lesionó a dos personas, dañó 14 casas y fue sentido en cientos de kilómetros en 14 estados, según el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS por sus siglas en inglés). Fue el movimiento telúrico más fuerte en la parte central del país en décadas y el más fuerte en los registros de Oklahoma, dijeron los expertos.
El estudio de geofísicos de la Universidad de Oklahoma, la Universidad de Columbia y de la USGS dice que un día antes hubo un sismo ligeramente menor en un viejo pozo petrolífero utilizado para deshacerse de agua residual, justo a lo largo de una falla tectónica. Ese sismo más pequeño detonó el sismo más grande y una réplica menor.
La ubicación de los sismos justo en el punto donde se almacenaron las aguas residuales, combinado con un incremento en la presión del pozo, son un argumento decisivo de que las inyecciones dieron como resultado el sismo más fuerte, afirmaron los geofísicos.
Río Negro
El sismo ocurrido el 6 de noviembre de 2011 cerca de Prague, Oklahoma, lesionó a dos personas, dañó 14 casas y fue sentido en cientos de kilómetros en 14 estados, según el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS por sus siglas en inglés). Fue el movimiento telúrico más fuerte en la parte central del país en décadas y el más fuerte en los registros de Oklahoma, dijeron los expertos.
El estudio de geofísicos de la Universidad de Oklahoma, la Universidad de Columbia y de la USGS dice que un día antes hubo un sismo ligeramente menor en un viejo pozo petrolífero utilizado para deshacerse de agua residual, justo a lo largo de una falla tectónica. Ese sismo más pequeño detonó el sismo más grande y una réplica menor.
La ubicación de los sismos justo en el punto donde se almacenaron las aguas residuales, combinado con un incremento en la presión del pozo, son un argumento decisivo de que las inyecciones dieron como resultado el sismo más fuerte, afirmaron los geofísicos.
Río Negro