Relativizó el rol de los municipios en materia ambiental. Admite que se preparan para el fracking.
En Allen y otras ciudades del Alto Valle se está generando un debate que tiene que ver con la extracción de hidrocarburos en las chacras. Por este tema, “Río Negro” dialogó con el gobernador Alberto Weretilneck.
–¿Qué posición toma el gobierno provincial en relación a la metodología extractiva del fracking?
–Mientras haya controles serios por parte del Estado no hay que tenerle miedo. Nosotros somos un Estado presente, ya sea desde la Secretaría de Hidrocarburos como desde la Secretaría de Medio Ambiente. El problema del fracking es fundamentalmente la captación y la devolución del agua que se utiliza. Mientras uno garantice que en la captación no va a haber inconvenientes con el abastecimiento de las poblaciones ni va a haber inconvenientes con los productores, no hay ningún problema. En lo que es la devolución obviamente lo que hay que controlar es que toda el agua que se devuelva no afecte ni napas ni cursos de agua. En este caso la provincia aún no tiene experiencias de fracking como se van a utilizar en Vaca Muerta por lo tanto es un tema que nosotros estamos investigando, aprendiendo para que en el momento que nos llegue a tocar estemos preparados.
–En Cinco Saltos se aprobó una ordenanza para prohibir la fracturación hidráulica y en Allen se está estudiando lo mismo ¿Esto va en contra de modelo energético que propone el gobierno nacional?
–Vamos a aclarar algunos aspectos. La materia ambiental es exclusiva de la provincia, no es materia municipal. Los municipios no están facultados por la Constitución Provincial para regular materias ambientales, la que regula esto es exclusivamente la provincia. Podrá haber ordenanzas, opiniones, las respetamos y valoramos, pero la materia ambiental es provincial por lo tanto lo que va a predominar en este tipo de situaciones es la legislación provincial y las facultades de la provincia.
–¿No cree que la actividad hidrocarburífera pueda llegar a desplazar a la actividad frutihortícola en el Alto Valle?
–Depende de cuál sea el marco de seriedad y responsabilidad con el que se maneje. Obviamente que si no hay control y hay una contaminación permanente de napas y suelos la va a afectar. Pero hay muchos países del mundo en los cuales la producción convive con el petróleo y sin embargo no se afecta a la producción. Depende de la responsabilidad del Estado en el control y de las empresas en la ejecución. Por eso es que creo que lo importante de esto es una Secretaría de Medio Ambiente y una Secretaría de Hidrocarburos haciendo cumplir las leyes, las empresas cumpliendo y cuando hay que multar, multar. Es la manera en la cual se evitan este tipo de cosas y creo que no tenemos que caer en la falsa discusión sobre si una actividad económica tiene que suplementar a otra. Es posible, si somos responsables, que las distintas actividades económicas convivan sin afectarse unas a otras. Me parece que lo podemos lograr y es un acto de responsabilidad de todos los que conducimos el Estado sobre todo en aquellas zonas en la que se está llevando adelante la fruticultura y empieza a haber desarrollo de gas o petróleo. Por supuesto que nosotros siempre vamos a privilegiar a la fruticultura porque es la que genera los puestos de empleo y es la actividad madre de la provincia.
–¿Usted asegura que el Estado está en condiciones de garantizar los controles?
–El Estado está en condiciones y si no está en condiciones lo haremos estar en condiciones. Pero lo que sí está absolutamente claro es nuestra responsabilidad en el control del medio ambiente y de los cursos de agua.
