Entrevista con Reinaldo Zahn, vicepresidente para América Latina de Weatherford
El directivo destacó el potencial de Vaca Muerta. “Por eso, grandes jugadores están intentando validar reservas en la cuenca Neuquina”, señaló. Sin embargo, cuestionó las actuales condiciones de mercado. “Hay que crear un mejor ambiente de negocios. Hay que permitir el giro de divisas al exterior. Si no, será difícil que vengan los inversores”, advirtió.
Las empresas de servicios petroleros jugarán un rol clave a la hora de poner en producción los yacimientos no convencionales de la cuenca Neuquina. Son los desarrolladores y los que poseen el know-how de la tecnología de punta que demanda la explotación de shale gas (gas de esquisto) y shale oil (petróleo de arcillas).
Reinaldo Zahn, vicepresidente para América Latina de Weatherford, una de las compañías de servicios más importantes del planeta, destacó, en ese sentido, el potencial de Vaca Muerta, una de las formaciones de roca generadora de la cuenca Neuquina. “Es la tercera reserva no convencional de hidrocarburos a nivel mundial y existen pruebas en lo que se refiere a su tamaño”, resaltó el directivo.
“Los grandes players (como ExxonMobil y Shell, entre otros) están trabajando en la zona. Veo que esas empresas están cuantificando los yacimientos, en pos de validar sus reservas en el área”, agregó. Sin embargo, aclaró que el desarrollo a gran escala de esos campos precisa, en primera instancia, que exista una atmósfera de negocios adecuada en el país. “Las petroleras harán los desarrollos en la medida en que lo macroeconómico y político cierre para que eso ocurra”, advirtió Zahn en diálogo conRevista Petroquímica, Petróleo, Gas & Química, que lo entrevistó durante la conferencia Arpel 2013, realizada en Punta del Este a mediados de abril.
A su entender, hay que crear un mejor ambiente para el negocio, para lo cual resulta clave resolver las complicaciones que existen para acceder al mercado cambiario y girar utilidades fuera del país. “Los inversores deben estar autorizados a sacar divisas. Es difícil que la inversión (necesaria para poner en valor Vaca Muerta) salga del país, por lo que hay que incentivar el ingreso de compañías extranjeras. Para eso, es clave generar confianza y permitir un retorno de la inversión. Si eso no sucede, será complicado que las empresas vengan al país”, advirtió Zahn.
Mejores precios
A principios de año, el Gobierno autorizó mejores precios para el gas en boca de pozo. A fines de febrero, la Comisión de Planificación y Coordinación Estratégica del Plan Nacional de Inversiones Hidrocarburíferas, que funciona bajo el ala del viceministro de Economía, Axel Kicillof –el funcionario que desde fines de 2011 marca el pulso del área energética–, publicó la Resolución 1/2013, que estableció que los productores recibirán u$s 7,50 por millón de BTU por la oferta adicional del hidrocarburo que incorporen a partir de este año. Implica, en la práctica, un incremento del 200% del precio que venían recibiendo los productores (alrededor de u$s 2,50).
“El reconocimiento de precios es un aliciente para la industria, pero los yacimientos no convencionales demandan otra escala”, analizó el gerente de Weatherford. Desde su óptica, hoy en día existen elementos coyunturales que terminan neutralizando y afectando los aspectos positivos de la mejora de precios del gas.
“Hay cuestiones de la macroeconomía política que provocan incertidumbre en la industria, más allá de los u$s 7,50 para el gas nuevo. Hay que ordenar la relación con los sindicatos y la inflación de los costos”, impulsó el directivo.
Costos altos
Los últimos años no fueron sencillos para las empresas de servicios, un segmento integrado también por Schlumberger, Halliburton, Pride, Bolland, San Antonio y BJ, entre otras. El encarecimiento de la mano de obra y de los costos operativos erosionó la rentabilidad, que además se vio perjudicada por la gran cantidad de medidas gremiales que limitaron la cantidad de días laborables. A mediados de 2011, por ejemplo, un paro de 60 días interrumpió la producción de hidrocarburos de Santa Cruz –el tercer polo hidrocarburífero del país– durante la mayor parte del segundo trimestre. Y en junio de 2012, el grupo autodenominado Los Dragones –una facción disidente de la UOCRA– mantuvo paralizada durante 5 días la producción de Cerro Dragón, el mayor yacimiento petrolífero del país, ubicado en Chubut.
“Hoy existe una inflación en dólares de los costos que perjudica a las compañías”, indicó Zahn, antes de añadir que “la perforación de los pozos convencionales en la Argentina cuesta el doble que en Estados Unidos”.
A su vez, señaló que el encarecimiento de los costos también se percibe en las tareas realizadas en los proyectos de shale gas yshale oil. “El costo de un pozo horizontal en áreas no convencionales en Estados Unidos es un 40% más barato que en Argentina, dado que en el norte existen una economía de escala y compañías de servicios preparadas. Acá, en cambio, la logística es cara, por lo que la utilización de los equipos debe ser full time para que exista rentabilidad”, enfatizó.
Al mismo tiempo, resaltó la importancia de formar recursos humanos para participar en ese tipo de emprendimientos. “La tecnología está a disposición, pero tenemos un gap en la gente. Los equipos se pueden traer, pero capacitar a los técnicos lleva tiempo. Por eso, tenemos el desafío de que esa curva de aprendizaje sea lo más corta posible”, concluyó.