Chimentos
Como el frío lo habilitaba, se organizó una cena en un barrio privado cercano a la Legislatura, en donde el anfitrión atendió a los invitados con un tradicional guiso carrero preparado en una olla de barro. Mientras se servían unas provoletas decoradas con panceta frita a modo de entrada, se habló de la situación que enfrenta la empresa Servicios Petroleros Argentina (ex Key). De acuerdo con uno de los comensales, el ambiente de trabajo no es el mejor, y citó como ejemplo que el gerente de compras tuvo problemas de estrés, y cuando retomó sus funciones debió abandonar la compañía. Lo mismo parece que sucedió en la gerencia de recursos humanos, donde se confirmó una licencia médica. Otro de los presentes, acotó que la empresa presenta varios meses de atraso con el pago a proveedores, y que las empresas más grandes, es decir con más espaldas, la están bancando. Las complicaciones financieras de la firma, vienen de meses atrás y de acuerdo con lo que trascendió los nuevos dueños tenían como estrategia cuando se hicieron cargo de la empresa vender a Cristóbal López su unidad de negocios ubicada en el sur del país –Chubut y Santa Cruz- y con los recursos ingresados capitalizar a la empresa, para hacerla líder en la cuenca neuquina en servicios de perforación en objetivos de recursos no convencionales, como el shale gas y el shale oil alojados en la formación Vaca Muerta.
Al hablar de Vaca Muerta, obviamente se cayó en las novedades de la novela entre YPF y Repsol, que busca recuperar sus activos tras la nacionalización de su subsidiaria argentina. Por lo que se sabe, esta semana representantes de Repsol, de la petrolera mexicana Pemex (posee el 10 por ciento de las acciones de Repsol) y de YPF se reunirían en una ciudad europea para tratar de encontrar una alternativa que le permita a la española recibir una compensación por la pérdida de activos y a YPF avanzar en un acuerdo con la mexicana para desarrollar recursos no convencionales ubicados en la cuenca neuquina. Antonio Brufau, presidente de Repsol, aceptaría un acuerdo de paz con la Casa Rosada siempre que disponga de la mayoría de Vaca Muerta y que se le asegure la repatriación de beneficios. Sin embargo, hay que ver cuál es la postura del gobierno nacional con Brufau, teniendo en cuenta que la disputa con el empresario español tiene aspecto de ser una cuestión personal.
Como de conflictos se hablaba, se llevó a la mesa el tema del alejamiento del gobierno neuquino de Rubén Etcheverry y su incorporación a las huestes del intendente neuquino Horacio Pechi Quiroga. Los memoriosos de la mesa, recordaron que Etchevrerry fue quien tuvo a su cargo en la administración de Jorge Sapag armar la ingeniería para la concesiones de las áreas secundarias licitadas. Fue además quien armó las giras del gobernador por Estados Unidos, donde visitó entre otros lugares la sede y laboratorio de Apache. En una de las giras, Sapag y la comitiva neuquina -que integraba además de Etcheverry el ministro Guillermo Coco- mantuvo reuniones particulares con directivos de Duke Energy, Williams-APCO, Exxon Mobil y un encuentro en Houston con otras petroleras organizado por el Instituto Argentino de Petróleo y Gas (IAPG).
Otro memorioso, recordó que los primeros cortocircuitos dentro del área energética provincial entre las áreas técnicas y políticas se vivió cuando el gobierno provincial comenzó a revertir áreas concesionadas para restarles activos a Repsol-YPF y otras petroleras con el argumento de que no habían realizado las inversiones comprometidas, proceso que terminó con la nacionalización de la empresa que ahora conduce Miguel Galuccio. El anfitrión agregó que la situación fue determinante para que Etcheverry se alejara de la empresa provincial Gas y Petróleo de Neuquén, y asumiera al frente de la Fundación Alejandría, -a la que se le sumó el proyecto de la red azul para proveer de agua a las petroleras para que produzcan bajo la técnica del fracking- cargo al que renunció cuando decidió pasarse a la actividad electoral por el partido de Horacio Quiroga. El informante acotó que la actividad que opera en la cuenca pierde un interlocutor técnico válido, y que habrá que esperar a ver quién lo reemplaza.
Ya con los postres en la mesa, y unas botellas de Johnnie Walker blue label sobre la mesa se hizo referencia a un pleito que inició el gobierno neuquino a la petrolera Chevron San Jorge, hoy Chevron Argentina teniendo en cuenta que se viene la firma de un convenio entre YPF (de la cual la provincia es accionista) y la petrolera norteamericana para explotar la formación Vaca Muerta. La demanda, en una acción declarativa de certeza, busca que la petrolera, operadora de las áreas Huantraico, CNQ-11 Las Lajas, CNQ-13 China Muerta, Curamched, El Sauce, El Trapial y Pillantoque, pague una indemnización en concepto de servidumbre hidrocarburífera derivada de la ocupación constante y permanente de tierras sobre la que ejerce el dominio originario. Además pidió la declaración de inconstitucionalidad de las normas, que se opongan al dominio que sobre sus recursos le reconoce la Constitución Nacional, dado que hay normas y artículos del Código de Minería que establecen que el uso de las tierras fiscales por los titulares de concesiones otorgadas por la autoridad federal es gratuita. La Corte, en diciembre, rechazó la demanda y sostiene entre sus argumentos que “las partes procuran obtener una suerte de asesoramiento jurídico, impropio de la función jurisdiccional, mediante un pronunciamiento de certeza sobre sus derechos, pero que pareciera tener el único objetivo de evaluar, según lo que allí se decida, si les conviene o no efectuar un reclamo pecuniario”. Hay que ver que hace el gobierno. Si le hace juicio a su futuro socio en YPF o insiste con la demanda, acotó el anfitrión.