Tras el referéndum.
Seis molinos de viento gigantes giran suavemente con el viento helado sobre la estepa de las islas Malvinas, a pocos kilómetros de la base militar de Mount Pleasant. “Esto es parte de nuestro futuro”, asegura un curtido baquiano de origen británico desde arriba de su jeep.
Por Martín Dinatale
Ese “futuro” no queda tan lejos. En verdad, ya comenzó a rodar y los isleños tienen muchas expectativas puestas en la explotación de dos variantes económicas que equilibren los elevados ingresos por la pesca: la energía eólica y el petróleo.
Por la industria pesquera, la administración de Malvinas recibe más de 15 millones de libras al año, lo que representa el 60 % del presupuesto de las islas. Otro 10% proviene del turismo, un 8% de la lana y la carne de cordero y el resto de servicios. Pero los isleños saben que esa ecuación no podrá mantenerse de por vida y ya se pusieron en marcha para generar otros ingresos y a la vez no depender de Gran Bretaña.
El referéndum que acaban de hacer y que ratificó con el 99% de los votos que seguirán bajo el ala del Reino Unido les da cierta tranquilidad por la protección en defensa militar que tienen. Aunque también están buscando cierta independencia económica de la corona británica. Y esto no lo toman como un reproche hacia Londres. Por el contrario: por ejemplo, Stephen Luxton luce orgulloso una corbata con la bandera británica. Es el director de Recursos Minerales de la Asamblea isleña, y explica: “Para 2017 vamos a empezar a explotar mucho petróleo y desarrollaremos ese recurso para nuestro futuro”.
La intención de los isleños es armar un fondo de inversión similar al de Noruega. Incluirán capital privado y estatal. Por ello, Luxton se ataja al hacer proyecciones. “Nosotros no haríamos lo que hizo la Argentina con Repsol. Eso de dejar de pagar. Jamás nacionalizaríamos una empresa”, dice, con ironía.
Los malvinenses se asociaron con firmas de Italia y Estados Unidos para la exploración de petróleo. Y los números que maneja Luxton son ambiciosos. Prevén que en la segunda mitad de 2017 la explotación petrolera en el mar del norte de las Malvinas les dará unos 328 millones de barriles al año. En los próximos 25 años, esperan sacar unos 70.000 barriles por año. “Esto es muy importante para el futuro económico de las islas pensar en el largo plazo”, se entusiasma este funcionario nacido en las islas.
¿No temen un bloqueo de la Argentina o medidas que afecten la producción petrolera como las sanciones a empresas que trabajen aquí?, pregunta la naicon. “No, porque aquí no cuentan las leyes argentinas. En todo el trabajo que hacemos no usamos ningún país de América latina como logística y las empresas ya están acostumbradas que así sea. Quizá sea más caro pero ya lo tienen incorporado”, responde Luxton.
La energía eólica es otra de las variantes que empezaron a explorar los isleños para sustentarse. Los seis molinos de viento que hay cerca de Mount Pleasant son de la industria alemana Enercon GMbH y actualmente aportan el 33% de energía eléctrica para Puerto Argentino y así se logra un ahorro de 400 litros de diésel por día.
Pero la administración de las islas Malvinas aspira a mucho más. Glenn Ross es el gerente de la planta de energía que administra los molinos y asegura que en el futuro inmediato quieren llegar a sustentar el 100% de la luz para toda la ciudad con energía eólica. Hasta ahora, los isleños llevan invertidos 4,6 millones de libras en el desarrollo de los molinos. La primera fase de este emprendimiento comenzó en 2007 y para los próximos años quieren reemplazar el diésel por energía eólica.
La explotación de gas es otro de los proyectos de la economía alternativa que se proyecta en las islas. Pero los elevados costos de transporte hacen que por ahora no se vea como un recurso de explotación inmediata. La Corporación para el Desarrollo del gobierno de las Malvinas fomenta el crecimiento económico y la diversificación ayudando a empresarios locales e inversores extranjeros a través de emprendimientos conjuntos. Con tantas proyecciones de recursos económicos que se hacen aquí hay quienes sueñan en unas islas Malvinas como un pequeño Kuwait, sólo que aquí el clima es muy duro y no se ve el sol tan seguido.
EN BUSCA DE ORO NEGRO
En Malvinas se ilusionan con nuevas riquezas
- STEPHEN LUXON – Director de Minería
“No influyen los bloqueos argentinos porque aquí no cuentan las leyes argentinas”