Cuando el gobierno nacional hizo la presentación de los lineamientos de su proyecto de ley, desde la Secretaría de Energía de la Nación se le planteó a la Cámara de Empresas Productoras de Hidrocarburos (CEPH) que presenten un documento con sus observaciones. Sin embargo, decidieron no plantear una postura para no generar más rispideces con las provincias.
Había sido el viernes 11 de julio cuando las autoridades nacionales presentaron su borrador ante representantes de las compañías petroleras. Estuvo a cargo del secretario Legal y Técnico, Carlos Zannini, el ministro de Planificación, Julio De Vido, el ministro de Economía, Axel Kicilloff, y la secretaria de Energía, Mariana Matranga.
El jueves 17 de julio, y tal como consignó Diario Patagónico en su edición del 20 de julio, hubo un encuentro encabezado por el presidente de la CEPH, Oscar Vicente (de Entre Lomas) y representadas las empresas Pan American Energy, Sinopec, Wintershall y Tecpetrol. Faltaron YPF, ENAP Sipetrol, Total, Pluspetrol, Chevron y Exxon.
El documento que iban a discutir incluía unificar en una sola figura de concesión los hidrocarburos que se extraigan por métodos convencionales y no convencionales. También, querían solicitar menos retenciones a las exportaciones de petróleo crudo y una dinamización de las importaciones.
Sin embargo, el debate duró poco y decidieron suspender la mesa. Consideraron que si entregaban un documento lograrían enfadar más a los gobernadores petroleros y a nivel público parecerían contrarios a una reforma cuando, en realidad, las empresas están bastante conformes con la iniciativa que presentó Nación.